Spoilers: Saints Row IV, el juego más friki

Saints Row IV puede considerarse el juego más friki hasta el momento por la cantidad de guiños, cameos y referencias a otros juegos, películas o iconos de la cultura pop. Sería algo así como el Tarantino de los videojuegos.

Haré un repaso a las reseñas que me han parecido más interesantes empezando por aquellas relacionadas con el ocio digital. Lo haré en orden cronológico inverso, para hacer un viaje a través del tiempo, desde los títulos más recientes hasta los inicios del software de entretenimiento.

Comienzo el recorrido con una de las referencias más obvias. A partir de un determinado momento de la historia, los personajes del juego pasan sus ratos libres en una nave espacial muy parecida a la Normadía de Mass Effect. Pero eso no es todo, ya que podremos interactuar con los tripulantes de dos formas, la más clásica, hablando con ellos y una más picante opción de entablar una relación sexual. Pero a diferencia de la saga del Comandante Shepard, aquí no habrá que pasarse horas intentando ligar mediante intrincadas opciones de diálogo, simplemente pulsando un botón tendremos sexo todas las veces que queramos. Pero no os esperéis nada explícito, todo ocurre off camera.

Parecería que estamos en la Normadía si no fuera por esa muñeca hinchable a modo de piloto automático

Parecería que estamos en la Normadía si no fuera por esa muñeca hinchable a modo de piloto automático, ¿un guiño a ‘Aterriza como Puedas’?

Durante una de las conversaciones en dicha nave, Keith David, vicepresidente de los Estados Unidos en Saints Row IV, comenta que estuvo jugando 12 horas al Dead Island antes de que los alienígenas Zin atacaran la Tierra. Continúa diciendo que ahora no podrá terminarlo nunca y que no se lo perdonará jamás. Debo comentar que a mí se me corrompió la partida guardada del Dead Island Riptide con más horas de juego que a Keith David y sigo sin perdonárselo a Deep Silver.

Otro cameo muy divertido es el que hace referencia al Metal Gear Solid y a su famosa caja de cartón en una de las pocas misiones de sigilo que trae el juego. Sí, has leído bien, hay misiones de sigilo en Saints Row IV, incluso hay que disparar a las luces para crear oscuridad, todo aderezado con mucho humor. El protagonista hace reflexiones del tipo: «¿Por qué disparar dos veces a las luces cuando puedo matar al guardia con una sola bala?» Aplastante afirmación, toma nota Kojima.

Otro de los guiños más alocados ocurre durante una parte de Saints Row IV en la que el modo de juego se convierte en un 2D de scroll lateral, que imita los clásicos arcade. En este caso se trata de una referencia a la saga Streets of Rage de SEGA Megadrive, llamada Saints of Rage. La conversión es brutal, sigues controlando al mismo personaje, esto es, con los rasgos y la ropa que llevaba, sólo que ahora parece que está 2D y pixelado. Las animaciones de combate se han modificado con la finalidad de imitar movimientos con un número de sprites limitado, como ocurría en las primeras consolas. El sonido también se ha distorsionado y el efecto es calcado a las voces digitalizadas de las máquinas de los 80.

Saints Row IV

Saints of Rage, tributo al mítico pasacalles de SEGA.

Una de mis partes favoritas del juego transcurre cuando el protagonista se monta en una nave y tiene que recorrer un estrecho túnel lleno de obstáculos al ritmo de la canción What Is Love de Haddaway. Al comenzar la misión, un texto indica cómo hacer el movimiento de Barrel Roll, referencia a la saga Starfox de Nintendo.

Una recreativa a la que se hace referencia aunque esta vez de manera menos directa es al clásico Battlezone (Atari, 1980). En un momento del juego controlaremos un tanque modelado con vista de alambre (wireframe) imitando los gráficos vectoriales de los primeros videojuegos en 3D. La diferencia con el clásico es que aquí la vista es cenital.

No podía faltar una reseña al clásico de los clásicos de las arcade, el Space Invaders (Taito, 1978). Durante uno de los primeros compases del juego tenemos que defendernos del ataque alienígena usando un arma montada. En un alarde de locura, o genialidad, las naves de los Zin se colocan de la misma forma que lo hacen los invasores del espacio en la recreativa.

También hay cabida para las aventuras conversacionales, Saints Row IV nos hace retroceder en el tiempo hasta los albores del software de entretenimiento. Si has jugado a La Aventura Original o has leído Ready Player One, esta parte te va a encantar. Eso sí, los textos no son para nada aburridos, están aderezados con mucho humor y mala leche.

Saints Row IV

Nunca una aventura conversacional fue tan divertida.

Pero no sólo de videojuegos vive la gente de Volition, vayamos ahora con los guiños al cine.

Casi nada más comenzar el juego hay una escena donde volamos en helicóptero por un desierto con pozos petrolíferos mientras suena la canción Long Tall Sally de Little Richard. Se trata de una referencia a la película Depredador, no Apocalypse Now como piensan algunos, donde Arnold Schwarzenegger y sus camaradas escuchan la misma canción a través de un loro atado a la pared de su helicóptero. Pero lo más gracioso de todo, es que la gente de Ubisoft Montreal utilizó el mismo tema para una escena parecida en su magnífico Far Cry 3: Blood Dragon. Así que la referencia es doble.

Otro momento musical fantástico transcurre también al comienzo del juego, un poco después del guiño anterior. En un momento de máxima tensión, nuestro héroe se sube a un misil con cabeza nuclear al ritmo del éxito musical I Don’t Want to Miss a Thing de los Aerosmith que fue el tema de promoción de la película Armageddon.

Durante la visita al infierno virtual de uno de los compañeros, participamos en un combate contra un primo muy lejano del muñeco de Marshmallow de Ghostbusters llamado Paul. Y hacia el final del juego hay otra escena calcada de la segunda parte de la saga de los cazafantasmas, donde en lugar de dirigir a la Estatua de la Libertad controlaremos a su homólogo de Steelport.

Todo un homenaje al final de Cazafantasmas 2

Todo un homenaje al final de ‘Cazafantasmas 2’.

Una referencia un poco más complicada de encontrar es una que se hace del arma más famosa del blockbuster Men in Black. Para encontrar la Langosta Chillona (Noisy Cricket en inglés), aquella pistola diminuta que tiraba para atrás a Will Smith cada vez que apretaba el gatillo, debemos disparar a la puerta con el cartel Emplyees Only en la tienda de ropa Let’s Pretend de New Baranec (suroeste de Steelport).

Un cameo un poco más rebuscado es el que se hace a la saga de Harry Potter y a su juego de Quidditch a través de la inclusión de los CID de mando, una bolas doradas que vuelan a gran velocidad y a las que has de perseguir para destruirlas. Pero no acaba ahí la cosa, ya que existe un vehículo secreto escondido en una de las torres Zin que consiste en una escoba voladora llamada Salem, con un cierto parecido al modelo Nimbus 2000 de las novelas de J. K. Rowling. Por favor que me comente alguien si se ha dedicado a perseguir los CID de mando montado en la escoba y de paso que se haga un vídeo.

Hay varios guiños a las trilogías de Star Wars, desde el uso de un sable láser como arma de cuerpo a cuerpo hasta la personalización del vestuario para parecer alguno de los personajes de George Lucas. Por ejemplo, el traje Recaudador, que se puede comprar en la tienda Let’s Pretend es clavadito al de Boba Fett. Existe además un detalle de sobresaliente para aquellos más avispados. Durante la misión de rescate de Matt Miller, mientras controlamos el tanque virtual y Kinzie está intentando piratear el sistema, veremos aparecer líneas de texto en la parte superior de la pantalla. Entre los comandos que aparecen está el de “Iniciar orden 66”, que es la instrucción que se da a los clones para acabar con los Jedi.

Hay una misión donde deberemos circular con una moto futurista por un escenario que imita la circuitería de un ordenador, algo parecido a lo que podemos ver en la película de Tron.

Dejo para el final la referencia más obvia, Matrix everywhere, desde la trama, pasando por alguno de los trajes o movimientos de cumplido del protagonista, hasta la elección de una puerta roja o azul, todo recuerda a la historia de Neo. Incluso los discursos de Zinyak recuerdan las letanías indescifrables del Arquitecto de la película de los hermanos Wachowski.

Hay muchos más guiños a otras películas pero no tienen tanto peso en el juego. Podéis ver una estupenda recopilación de ellos en el siguiente vídeo de GameFont:

  1. Ahora no solo esta de moda el colgar gameplays para que puedas destrozarte la primera experiencia jugable; si no también reventar todos los guiños y joderte la sorpresa de descubrirlos uno mismo. Con dos pares.

  2. Siento el destripe, para la próxima vez pondré una alerta de spoilers en uno de los primeros párrafos. Espero que cuando termines el juego te pases de nuevo por el artículo y compruebes cuantos guiños habías localizado.

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