Análisis de Marvel Ultimate Alliance 2 (Xbox 360)

Como el turrón y los hijos de la mili en otros tiempos, hay juegos que siempre llegan a tiempo para estar a casa por Navidad. El que será último título basado en personajes de Marvel antes de su adquisición por la todopoderosa creadora de los anillos de la castidad, Disney, repite fórmula con muy, muy pocos retoques de un juego que apareció hace tres años para todas las plataformas del mercado.

Si la mecánica apenas ha variado, menos lo ha hecho su esencia. Ultimate Alliance 2 es un hack´n slash de libro en el que desde una vista cenital nos enfrentamos a hordas de enemigos que no son ni sombra de los protagonistas y a los que debemos quitarnos de enmedio como a las moscas en una parrillada. Toques roleros en la evolución de los personajes e inspirado en clásicos como Diablo, aunque yo prefiero compararlo con Gauntlet, el videojuego ideal para hacer manitas, todos juntos sobre un mismo teclado.

Si la mecánica es simple, formar un equipo de cuatro súper héroes y repartir yoyas como panes a diestra y siniestra, no menos lo es la historia. Parece ser que se ha intentado aprovechar la historia de Secret War y se ha mezclado con algunos toques de «la Civil War«. Y cuando digo que parece ser no es porque me lo esté inventando, sino porque las escenas de corte están tan mal realizadas y los diálogos que en ocasiones podemos entablar con otros personajes están tan mal dirigidos y son tan vacíos de contenido y del mínimo gusto artístico que tragárselos es digno de medalla. Y yo no es que sea precisamente exigente, mi personaje favorito de cómic es arseface, pero ver al Capitán América hierático como un estatua egipcia a la que sólo le falta que se le caiga un ojo, como un muñeco de felpa al que le ha borrado la pupila pintada sobre un trozo de plástico, me parece de tarjeta roja. Además, ¿quién quiere ver una escena de corte sosísima, mal realizada y mal dirigida cuando puede estar pulsando los botones A y B quince veces por segundo? Yo, obviamente, no.

Entre los aspectos más destacados, que para repartir toñas tenemos un elenco de personajes incomensurable y, por si fuera poco, podemos intercambiarlos en cualquier momento. Aunque hay muchos personajes que se irán desbloqueando según vamos progresando, al igual que los trajes, podemos encarnar a gente como Spider-Man y Luke Cage, a los Cuatro Fantásticos, Gambito, Tormenta, Lobezno, Iron Man, Capitán América, Iceman, Daredevil y Hulk. Cada personaje tiene dos movimientos especiales, que se amplían en otros dos en los niveles 5 y 10. Podemos mejorar además sus atributos individuales gastando los puntos de experiencia y/o dinero que recogemos en los escenarios, y los atributos del equipo recogiendo medallas.

Es decir, tenemos un equipo de cuatro súper héroes que van juntos repartiendo golpes por distintos escenarios, cumpliendo un objetivo cualquiera y enfrentándose, de vez en cuando a jefes finales. Claro, estos son tipos más duros. Enfrentarse a Electro, Shocker o Colossus requiere un esfuerzo extra, y aquí es donde entran los golpes en equipo. Repartiendo a mansalva rellenamos un indicador que nos permite que el personaje que estemos controlando se alíe con otro del equipo para dar golpes más poderosos. Aunque uno de los logros nos exige hacer las 200 combinaciones posibles, en realidad existen diez tipos distintos de golpes «fusión» pero plasmados con diferentes skins.

Lo más atractivo del juego es ir probando uno a uno los personajes y los posibles equipos, comprobando sus puntos fuertes y débiles, hacerlos progresar en sus atributos, recoger objetos de los escenarios que nos permiten desbloquear extras, y, como no, el formar un equipo online con tres colegas para no depender tanto de la IA.

En cuanto al apartado técnico, flojo, bastante flojo. A nivel gráfico tan sólo podemos salvar la estabilidad del motor gráfico y algunos efectos de luces, porque en cuanto a definición de personajes y escenarios, animaciones y secuencias de introducción el título deja muchísimo que desear. Pero lo más negativo es que el título está completamente en inglés y con subtítulos… también en inglés. Y en esta ocasión no vale poner la excusa de que es para resaltar la calidad de las voces originales, ya os lo digo yo.

La segunda entrega de Marvel Ultimate Alliance solo significará algo para los amantes de la casa de las ideas (o de la que lo era hasta su compra por parte de Disney) y por tanto, para amantes enfervorecidos de los cómics de súper héroes… sobre todo para los no muy exigentes, que se conforman con controlar a su personaje fetiche sin pedir a cambio ni argumento ni buenos gráficos. Y sin embargo, a pesar de que si diseccionáramos todos sus apartados uno a uno raro sería el que pasara del aprobado, el jodido sigue enganchando como la primera parte. Aunque esta conclusión, nuestro amor por los hack’n slash malos con toques de rol, como Too Human, será motivo de estudio en algún otro momento.