Un día Remedy decidió recuperar su independencia y gracias a ello dieron rienda suelta a lo que el estudio mejor sabe hacer, contar historias extraordinarias, con personajes interesantes y mecánicas enfocadas a la acción. Control terminó siendo una sorpresa para muchos y una oportunidad gigante para el estudio Finlandés.
La sorpresa del año
Remedy Entertainment estaba de capa caída después de los resultados generado por Quantum Break. El estudio toma la decisión de romper relaciones con Microsoft y de inmediato se embarca en Control, un juego que mezcla lo mejor que este equipo sabe hacer, contar excelentes historias, con Sam Lake a la cabeza y entregar una jugabilidad que atrapa por su simpleza.
Pero Control tiene algo más, porque no es son solo estos dos aspectos, es también la ambientación. La Casa Inmemorial es un lugar repleto de secretos y el juego invita a explorarlos. El misterio atrapa de tal manera que es inevitable dejar de lado la historia principal, para recorrer los retorcidos y la vez hermosos escenarios del lugar.
El juego tiene sus fallas, pero no le quita lo divertido en ningún instante. No seremos meros espectadores, sino los acompañantes de Jesse Faden en su camino por esta casa, por conocer la verdad, por descubrir su pasado y como todo esto se relaciona con los demás juegos de Remedy. Una maravilla en muchos aspectos que merece su reconocimiento dentro de lo mejor del 2019.
Es de los pocos que tengo en mi lista de pillar cuando baje. Ya ha bajado a 40 pero me sigue pareciendo demasiado.
Espero que no desaparezca.
Me parece un juegazo tremendo, redondo. Lástima de sus puntuales ralentizaciones y que la historia pilla carrerilla y es una absoluta ida de olla que reconozco que he sido incapaz de seguir. Pero es 100% Remedy y eso no puede ser malo.
Otro que tengo en la lista de pendientes. Mucho por jugar y tan poco tiempo…