Los que nos soléis leer sabéis que yo, como redactor, soy muy fan de los libros divulgativos sobre el videojuego. No me importa que sean cosas más informales o textos académicos densos, lo devoro todo, pero reconozco que, cuando nos ofrecieron Pensar el juego para reseñarlo, no creí que fuera a ser un libro que fuera a impactar tanto.
Pensar el juego
El título no puede ser más apropiado, y como me comentó Víctor Navarro, coordinador del volumen y director de la colección Ludografías dentro de la editorial Shangrila, el objetivo de estos volúmenes es hacer reflexionar al lector. Dividiendo el libro en veintiséis capítulos (introducción más veinticinco ensayos) cada texto trata una temática dentro del mundo de los videojuegos, pero no exclusivos de ellos. Hablar de Media Mix como lo hace Antonio Loriguillo es hablar de como los videojuegos forman parte de un ecosistema interactivo donde solo son una parte más que da forma a franquicias transmedia. Leer sobre GaaS como hace Marçal Mora es reflexionar sobre que es un videojuego como producto, las diferencias que existen entre versiones de un mismo producto y si un parche se puede considerar un juego nuevo.
En total estamos hablando de veinticinco ensayos dentro de Pensar el juego, 25 caminos para los Game Studies. Todos son autores españoles que, de una forma u otra, han acabado reunidos en este libro gracias al increíble trabajazo de coordinación que ha hecho Víctor. Todo con un objetivo: crear una biblioteca de Game Studies en español. ¿Qué es un Game Study, decís? Es un texto académico que utiliza el videojuego como eje vertebral para tratar de manera trasversal diferentes temáticas que existen dentro o fuera del videojuego (como industria, como cultura o como entretenimiento).
25 ángulos distintos sobre los que reflexionar los videojuegos
Y es que con diferentes prismas tenemos textos como Videojuegos Poscoloniales, de Beatriz Pérez Zapata, Bio(ludo)grafía, de Susana Tosca, Visionado, de Enrique Morales o Ludopolítica, de Eurídice Cabañes. Cada uno interesante, algunos más difíciles de entender pero todos incitándome a investigar más. No negaré que, tras leerme los capítulos, siempre echaba un vistazo a la bibliografía seleccionaba para profundizar más, para empaparme de aquella temática y aprender todo lo posible antes de saltar directo al siguiente capítulo del libro. Y aquí es donde viene una grata sorpresa.
El libro está ordenado alfabéticamente según el título del texto, comenzando con Analogía de Alberto Murcia y terminando por el ya mencionado Visionados de Enrique Morales, pero no es esta la única forma de leerlo. Al final de cada ensayo tenemos dos opciones, dos posibilidades para continuar la lectura. Si, por ejemplo, nos acabamos el capitulo Arquitectura de Adrián Suárez, el libro nos ofrece dos posibilidades: podemos seguir profundizando en el uso del espacio dentro de los videojuegos con el texto Mundo, de Antonio José Planells, o tener una aproximación a la sociopolítica en el mundo de los videojuegos con Ludopolítica, de la ya mencionada Eurídice Cabañes.
Elige tu propio camino del descubrimiento
Podemos no seguir ninguna de estas dos opciones y, simplemente, pasar al siguiente capitulo o coger cualquier otro al azar, pero el orden que Pensar el juego nos plantea es algo digno de tener en cuenta. Acabar un capítulo y ponernos a pensar sobre él nos creará inquietudes que, si escogemos cualquiera de los dos textos preseleccionados por Víctor Navarro para continuar, crecerán y nos hará reflexionar siguiendo un orden creado a partir de la propia necesidad de conocimiento que posee el lector interesado. Es algo mágico, y lo mejor es que cada texto, sea o no de un campo que dominemos como lectores o incluso aunque a priori parezcan poco interesantes, siempre sorprenden y te dejan con más preguntas que respuestas y la tarea de investigar y descubrir más sobre ello.
Pensar el juego es el ensayo sobre videojuegos más variado que he leído y un imprescindible en cualquier biblioteca. La colección busca expandirse y, según me comentó Víctor, ya está en proceso una continuación que saldrá en un tiempo indefinido. Como ya he dicho, Ludografías busca convertirse en un referente de los Game Studies en lengua castellana y creedme, van por muy buen camino.