Aunque hay que tener buenos conocimientos de inglés para seguir el vídeo, digamos que ésta es la historia de un directivo de Electronic Arts que no tenía ni idea de qué juego hacer y al que el mismísimo demonio se le apareció para alumbrarle en su camino. Y ni el mismísimo cojuelo está convencido de que sea un título tan distinto de God of War…