Autor: José Valero Pineda
Mi nombre es Niko Belic, soy un inmigrante del Este y en este momento estoy navegando muy cerca de Liberty City … Mi barco está a punto de llegar al puerto y estoy cerca de comenzar una nueva vida . Tuve que marcharme de mi país natal, Rumania, por problemas con la Ley, se puede decir que no he sido una persona ejemplar… He tenido que matar, traficar, robar. Pero ahora espero que sea diferente, no me gusta la sensación de ser “perseguido”.
Ya estoy en suelo firme, después de recoger la mochila con un par de camisetas y pantalones me decido a ir en busca de mi nueva vida, tengo 500 dólares de un pequeño trapicheo que tuve con un socio americano, así que hoy puedo dormir tranquilo y llenar la barriga para coger fuerzas para mañana … Me espera un duro día en busca de trabajo …
Acabo de despertar, me he pegado una ducha en el hostal, he desayunado y el sol reluce como nunca lo habíaa visto… Comienza un gran día.
La ciudad es impresionante, nunca havia visto edificios de ese tamaño, y la gente, qué decir de la gente, muchos de ellos van con trajes y coches caros, pero según por la zona que me mueva ahí variaciones, muchos barrios no me atrevo ni a entrar …
Los primeros sitios en los que he estado buscando trabajo no parecen para mi, los dueños siempre me dicen que no encajo con el perfil que buscan, no es tan fácil como yo pensaba encontrar un trabajo normal, y la verdad no tengo experiencia en ningún sector que no sea el ilegal.
Después de todo el día buscando, lo único que tengo es un teléfono de una pizzería en la que buscaban repartidor ¿Quién dijo que la vida era fácil? ¡¡¡Seguro que mañana encuentro un buen trabajo!!! todavía me quedan 400 dólares, así que me vuelvo hacia el hostal mientras degusto el ultimo cigarro que me queda del tabaco de mi país…
El camino es largo, y se está haciendo de noche, espero no perderme porque ésto es gigante, sigo recto por una avenida y le pregunto a unos chavales donde encontrar mi hostal, muy amables me comentan que puedo tirar por unos callejones que tengo justo delante y que me llevaran al lado de donde quiero llegar, camino tranquilo, paso lento, no hay ni un alma en los callejones, sólo un grupo de jóvenes que parecen estar tranquilamente apoyados en una pared, sigo con mi paso tranquilo y pausado y cuando estoy a la altura de los chicos en un abrir y cerrar de ojos me veo contra la pared y con una pistola justo entre ceja y ceja… Mi cigarro cae al suelo, el corazón late fuerte, me sentía indefenso , no tenía en mi chaqueta mi preciosa Mágnum, así que solo podía aceptar lo que me venia por delante … Si estuviera en mi país ningún mangante de pacotilla se atrevería a hacerme esto, pero ésto es Liberty City, soy una simple abeja en un panal gigante …
Recibí un fuerte golpe en la cabeza propinado por uno de los chavales, caí al suelo , y procedieron a registrarme todo lo que llevaba, encontraron los 400 dólares y salieron corriendo como alma que lleva al diablo… Lo que parecía que empezaba en sueño , a acabado en pesadilla, ¿Donde voy ? ¿Qué hago?
Vuelvo al hostal con la cara magullada y los ánimos por los suelos, recojo mi mochila y me voy donde me lleven los pies… Tras 15 minutos andando ya no puedo más, el día ha sido demasiado duro como para poder arrastrarme a mi mismo unos cuantos metros mas, así que me siento en un banco de un parque y empiezo a pensar como solucionar este asunto …
Me viene a la mente el socio con el que hice el trapicheo antes de venir a Liberty City , ¡tengo su tarjeta todavía! Corro desesperado en busca de un teléfono, voy por una avenida grande, hay mucha gente, en un instante veo a una mujer de unos 40 años, con su traje caro, sus joyas, y su teléfono móvil pegado en la oreja … Es mi oportunidad , sin perder el ritmo de mi carrera alargo el brazo para alcanzar el teléfono y ¡ZAS! ¡Lo tengo!, La mujer grita asustada y yo me pierdo entre las inmensas calles de Liberty City … Que se fastidie,pienso… Tiene demasiado dinero, seguro que se compra uno enseguida …
Tras correr durante 20 largos minutos parecía que mi cansancio volvía, no sé ni cómo pude correr así antes, sería la adrenalina que de nuevo corre por mi sangre… Me paro , llamo a mi socio , le digo dónde estoy y se dispone a recogerme, el teléfono móvil lo tiro volando por los aires, Seguro que con lo caro que es me pueden rastrear y encontrarme… Espero durante 1 hora, mis piernas tiemblan , estoy empezando a sentirme otra vez como en mi país… Perseguido, sin sentimiento de libertad, durmiendo con un ojo abierto por tener enemigos fuera. Aparece una gran limusina, vaya, no sabia que este hombre tenia tanto poder, entro dentro de ella y ahí me está esperando él, con 2 mujeres una a cada lado… Mis primeras palabras son claras, Big Joe, hoy necesito descansar, ¿Puedes darme cama? Por supuesto, Niko, te llevaré a mi mansión, dormirás y mañana hablaremos de unos asuntillos que tengo por ahí …
Una vez en la cama, no consigo conciliar el sueño, sin quererlo acabo de volver a entrar en los negocios turbios… Sólo por el mero echo de recibir un favor de Big Joe voy a tener que ser su zorra durante un tiempo, en el fondo, sólo sé hacer estos trabajos … ¿Qué me deparará el mañana? ¿Traficar con drogas? ¿Matar a alguien ? …Bueno, nada que no haya echo ya. Conecto la lámpara y de una cajetilla de tabaco que habia en la mesita cojo uno, lo enchufo y saboreo mi última noche de tranquilidad…
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ni viene de rumania viene de serbia