Everybody's Golf para PS4 es tan adictivo como siempre

Soy muy fan de los juegos que parecen haberse creado alrededor de la mecánica de desbloquear cosas. Eso es lo que me engancha de juegos como Diablo 3 o los propios Everybody’s Golf (conocida en los USA como Hot Shots).

Jugar al Golf nunca estuvo reñido con el estilo

Hazte con todos

Aunque los acabados de la producción de Blizzard y los juegos de Clap Hanz no tengan nada que ver, la adicción, al menos en mi caso, proviene del mismo sitio: realizar actividades similares una y otra vez con el objetivo de obtener nuevos accesorios que nos proporcionen una ventaja en el juego o, simplemente, una diferenciación estética.

Es casi surrealista que esta máquina de enganchar se justifique en el Golf, un deporte aparentemente minoritario – si entendemos como mayoritario el Fútbol y en menor medida el Tenis. Pero es que la fórmula Arcade de Clap Hanz podría servir hasta para el MMA.

En este Everybody’s Golf para PS4 el factor desbloqueables sigue siendo el epicentro de todo, pero se ha cubierto de un envoltorio de mini mundo abierto de cartón piedra que añade más elementos a la experiencia Everybody’s Golf que a mi, en principio y a falta de desbloquear todas las experiencias, como el conducir coches de golf, me parecen demasiado accesorios/strong>.

Como también me sobran los diálogos que no aportan nada más que el intentar forzar la empatía por personajes que, al final, no son más que maniquís andantes a los que arrebatarles sus trapitos para potenciar nuestro armario. Eso sí, encontrarte entre estos NPCs a un VIP como Shuhei Yoshida, presidente de los estudios PlayStation a nivel mundial, es un puntazo.

Las capas de la cebolla

A pesar de la recargada presentación de este Everybody’s Golf, y de sus incomprensibles tiempos de carga, el que, como yo, haya llegado aquí por el mono de los desbloqueables, aquí encontrará su droga, aunque no esté tan refinada como yo me habría imaginado. Es cierto que aún no le he metido suficiente tiempo para descubrir todas las experiencias disfrutables en el mini mundo que se ha sacado de la manga Clap Hanz. En ese respecto, kudos a la desarrolladora: llevo unas cuantas horas y el juego aún esconde casi todos sus secretos.

Cientos de camisetas, pantalones, zapatos, accesorios, juegos de palos, pelotas… esperan al jugador que tenga ganas de quedarse sin vida en el enésimo Everybody’s Golf, una franquicia que es alérgica a producir videojuegos mediocres pero que quizá ya ha brillado tanto como ha podido en otras entregas y desde hace años se limita a entregar lo que otros juegos sueñan en conseguir: una fórmula que engancha cosa mala a la que te atrevas a acercarte.

  1. Veo que lo que mas te esta gustando es la personalización.

    Yo no he vuelto a tocar la saga desde la psx… y mira que me gustaba. El pique real lo encontraba en la parte de minigolf, que incomprensiblemente eliminaron del juego.

  2. Offtopiqueando…

    He dejado un comentario en el análisis del Broken Sword 5, que acabamos de terminar, y se ha ido al limbo. Luego, cuando he tratado de mandarlo otra vez, me dice que comentario repetido. Qué analidad. XD

      • No creo, ya digo que me decía «comentario repetido». Se le habrá ido a la peich. XD

        Ná, decía que me había gustado mucho, que no había tirado de guía (no suelo), que le habíamos sacado todos los logros menos uno que sacaremos en otra partida rápida y que merece la pena el juego, pero que no llega al nivelazo de los dos primeros (especialmente del primero).

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