Mientras siguen trabajando en la secuela y continuación de la historia de Max Caulfield Life Is Strange, Deck Nine toma el relevo para profundizar en la co-protagonista del primer juego, Chloe Price, en esta ocasión protagonista absoluta de Life Is Strange Before The Storm.
Life Is Strange fue sin duda una de las sorpresas más agradables de 2015 y a mi juicio es el mejor título de Dontnod hasta la fecha. Su formato episódico es posiblemente de los más acertados y menos forzado de todos los títulos que lo han implementado, pues su propuesta utiliza el Cliffhanger como técnica narrativa y al final de cada uno de los 5 episodios que componen la obra, el interés por seguir descubriendo su historia se incrementa gracias al saber hacer de la compañía francesa, que demostraron ser unos auténticos maestros a la hora de construir una buena trama y unos personajes atractivos y con mucha personalidad. Esta precuela en la que conoceremos los acontecimientos vividos antes del retorno de Max a la ciudad y donde el jugador vivirá el principio de la relación entre Chloe y su padrastro David y sobre todo el nacimiento de la amistad entre la díscola protagonista y Rachel Amber, sin duda un gran atractivo para los conocedores de la historia del primer título.
En Life is Strange la mecánica principal era la capacidad de Max para rebobinar el tiempo y arreglar los desaguisados que creaban entre las 2 inseparables amigas, algo irónico, pues las visiones del futuro que tenía Max eran consecuencia de acciones del pasado que todavía no habían ocurrido, algo difícil de explicar, un efecto mariposa más enrevesado de lo normal. En esta precuela, como decía antes, Max no está y Chloe no posee la capacidad de manipular el tiempo, y pensaréis, ¿dónde puede estar la gracia en un juego que pierde su mecánica principal?, para mí la respuesta es fácil; básicamente lo potencialmente atractivo de esta saga reside en su ambientación, en sus personajes, en su historia, su música, sus momentos contemplativos y por supuesto, la importancia de nuestras elecciones. Por lo tanto, ¿se echa de menos la mecánica del primero?, absolutamente no. A parte de disfrutar de las virtudes comentadas -y ojo, en Deck Nine han sabido captar la esencia del primer juego a la perfección– aquí se sustituye la manipulación temporal por una especie de discusiones entre Chloe y los personajes secundarios, deberemos salirnos con la nuestra al más puro estilo batallas de gallos, donde deberemos estar atentos a lo que nos dicen nuestros adversarios semánticos para tumbar sus argumentos, una mecánica curiosa que rinde tributo a la guerra de insultos de Monkey Island bastante curiosa y que encaja perfectamente con la personalidad desenfrenada de la joven de cabello tintado de azul, que por cierto, al menos en el primer episodio, llamado: Despierta, todavía no se lo ha tintado.
Volviendo a las protagonistas, deberemos aceptar la personalidad de Chloe y entenderla para estar a gusto con las decisiones que vayamos a tomar, hay que ponerse en su piel, a mí me gusta Chloe y donde Max era un avatar más plano y más pensado para que el jugador lo dotase con su personalidad, Chloe es como es, y se disfruta más si nos metemos en su papel de chica rebelde, incomprendida y desbordada por la muerte de su padre, el aislamiento social, el abandono de su mejor y única amiga y la entrada en su casa, de un padrastro autoritario al que no acepta ni aceptará en el futuro, como vimos en el título original. Poco o nada voy a contar sobre los acontecimientos que viviréis en este primer episodio de LIS: Before The Storm, todo empieza con Chloe intentándose colar en una fiesta privada en las afueras de Arcadia Bay, allí toca uno de sus grupos favoritos y claro, ella no puede perdérselo. Con el portero de la fiesta, iniciaremos el tutorial de la mecánica de discusiones para conseguir entrar, una vez dentro y tras una pelea con dos yonkis, conoceremos a Rachel Amber, su futura mejor amiga. A partir de este punto, dejaré que descubráis vosotros mismos todo lo demás.
Con Rachel viviremos esa noche y el día siguiente, un día inolvidable en todos los sentidos y en el que he vivido uno de los momentos más eróticos en un videojuego sin que se muestre ni un centímetro de carne de más, y eso demuestra lo adulto y maduro que puede llegar a ser el medio cuando no lo dirigen un par de barbudos de 50 años con secuelas de su pubertad. Como no, todo empieza haciendo novillos en el instituto, para Chloe resulta toda una sorpresa el hecho de que la chica más popular del pueblo se interese por ella y se embarca en un viaje a lo desconocido, quizás atraída por Rachel o quizás por aburrimiento y excusa para saltarse las clases del día. La fuerza de las elecciones empiezan a florecer en el primer episodio desde el minuto uno y todavía no sabemos las consecuencias que éstas provocaran en los 2 siguientes que llegarán antes de final de año, pero creerme que todo parece indicar que esta precuela estará a la altura del original, al menos en lo narrativo y ambiental, santo y seña de la casa.
La importancia de explorar los escenarios sigue siendo un pilar en la narrativa del juego, no solo sirve para descubrir más sobre el «lore», nos ayudará también a tomar la mejor decisión en los «duelos semánticos» y como anécdota, hay unos coleccionables que más bien son ocasiones en las que Chloe se saca el Graff, para dejar una pintada al más puro estilo; «Anarquía y birra fría». Siempre he dicho que en los pequeños detalles está la chicha del asunto, la diferencia entre lo anodino y lo brillante, así que vamos a ello. Abrir el diario de Chloe es un torrente de emociones y al leerlo, -no recuerdo donde lo escuché- descubrimos de una forma ilícita pero pura y personal de descubrir verdaderamente a las personas, leyendo cosas sobre lo mal que se siente Chloe por la pérdida de su amiga Max, sobre hacerse un dedo pensando en un compañero de instituto o lo mal que le cae David, el novio de su madre y joder, reconozco que me he emocionado fisgoneando sus páginas, por cierto Max Caulfield, eres muy mala persona… El telefono móvil también es una herramienta de fisgoneo y conocimiento que rellena la historia, duele ver como Chloe quiere y recuerda a Max y le escribe mensajes que no son respondidos, la pobre se pregunta porque ni siquiera su antigua mejor amiga le ha llamado tras la muerte de su padre. Otro detalle de los que me gustan es la posibilidad que te da el juego en algunas escenas, donde fumar un cigarro o compartir los auriculares con Rachel mientras escuchamos música y dejarla sonar hasta que nos cansemos es algo catártico, simplemente contemplando el momento y sumergiéndonos en sus pensamientos y recreándonos en algo tan simple pero tan humano e íntimo.
Para cerrar mi opinión solo me queda hablar del título a nivel audiovisual y conclusivo. Life Is Strange Before The Storm usa el motor Unity y es prácticamente igual que su predecesor a nivel técnico, ni sorprende ni lo pretende, simplemente es suficiente para lo que quiere hacer, una mejora en las expresiones faciales no estaría de más, pero a pesar de ello consigue transmitir emociones a un buen nivel gracias a las interpretaciones de los actores de captura y su interpretación, por cierto, en esta ocasión se ha prescindido de la actriz que interpretaba a la Chloe Price original debido a la huelga de actores de doblaje, y esta vez corre a cargo de Rhianna DeVries, que en un principio se encargó solamente de la captura de movimientos pero que acabó siendo también la voz de la protagonista, y la verdad es que raya a un gran nivel interpretativo. La música quizás no es tan especial como en el primero, pero encaja a la perfección y sigue transmitiendo una fuerza increíble en cada momento que aparece. Lo bueno de esta precuela es que puede servir como puerta de entrada para los que dejaron pasar Life Is Strange, un título imprescindible que deberías jugar si todavía no lo has hecho.
Life Is Strange Before the Storm tiene algo muy interesante que ofrecer al público general y todo lo que intenta transmitir lo consigue de lleno, además tiene potencia e interés suficiente como producto individual, con un principio, nudo y desenlace muy marcado que deja un Cliffhanger de lo más goloso y una parte final gloriosa que acaba en lo más alto, una traca de fin de fiestas que nos invita a estar atentos y nos deja con muchas ganas de que llegue rápido el segundo episodio y eso es complicado de conseguir en un primer capítulo. En Dontnod puede respirar tranquilos, Deck Nine son las manos perfectas en las que podía haber caído su obra. [85]