Si hay una cosa que está dejando clara toda la información que estamos recibiendo de Dead Island (excepto su tráiler, evidentemente) es que aunque tiene muy buena pinta, la originalidad brilla por su ausencia. Y las novedades que os traemos acerca de las armas con las que vamos a masacrar zombies no hacen más que confirmarlo.
La fórmula es muy similar a la que vimos en Dead Rising: podremos utilizar como arma todo lo que encontremos en nuestro camino, nuestro armamento se deteriorará con el uso hasta quedar inservible y combinando diferentes objetos en los bancos de trabajo, ya sea probando o mediante planos que vayamos encontrando, obtendremos armas más poderosas. A simple vista la única novedad es la posibilidad de reparar aquellas armas que queramos mantener en buen estado.
Sin duda alguna, Dead Island se perfila cada vez más como un Dead Rising con mayor libertad y no duda en tomar de él y de otros juegos del género conceptos que han funcionado muy bien, lo que no quiere decir que no vaya a ser divertido por mucho que critiquemos su originalidad, más bien lo contrario. De hecho, yo mismo he pensado más de una vez que no estaría nada mal poder matar zombies y explorar sin tener que estar pendientes del puñetero reloj. Lo que es evidente es que esperar otra cosa es absurdo.
Por cierto, dentro de poco dispondréis de las primeras impresiones con el juego gracias a Dark Hellgater.