El catálogo de salida de una consola es algo determinante a la hora de adquirirla (salvo que seamos uno de esos fanboys empedernidos y cegados por el ansia) y en este aspecto, llevamos una generación en la que hemos salido un poco escaldados: arranque lamentable de 3DS, Vita que amaga, amaga, y no acaba de remontar, WiiU que ya ha sido oficialmente enterrada por muchos…
Y para remate de males, todas las cancelaciones y rumores con los problemas técnicos que giran en torno a los títulos de PS4 y Xbox One. En la Madrid Games Week, pudimos asistir a la presentación de uno de los títulos de lanzamiento de esta última: Ryse. ¿Va a vendernos la nueva sobremesa de Microsoft?
Patrick Esteves, design director de Crytek, fue el encargado de mostrarnos todas las bondades del título. Comenzamos la presentación con un espectacular vídeo digno de una superproducción de la HBO sobre el Imperio Romano. Está claro por dónde quiere ir Crytek, y Esteves lo dejó muy claro: gráficos, gráficos y más gráficos. Quieren ser el referente en la nextgen y convertirse en la compañía que pueble los sueños húmedos del más exigente graphicwhore.
Ryse quiere que nos sumerjamos completamente en el videojuego, que empaticemos con su protagonista y nos emocionemos con lo que sucede. Esteves prometió que las animaciones nos van a dejar de piedra, gracias a todo el trabajo que han hecho mediante captura de movimientos, y que vamos a alucinar especialmente con todo el trabajo que se ha hecho con las caras. Para rematar el conjunto, tenemos modelos de 50.000 polígonos, y se acabó eso de un protagonista bien detallado y enemigos cutrecillos, porque aseguró que todos los personajes contarían con esa densidad de malla. La iluminación también jugará un papel muy importante a la hora de emocionarnos: atardeceres, salidas de sol a través de los arcos del Coliseo… ¿En qué se traduce esto? En un solo concepto: lens flare. Preparaos, porque va a ser el efecto estrella en la generación.
Debido a algunos problemas técnicos, la build que traían preparada no funcionaba, así que tuvimos que conformarnos con ver a Esteves jugando a la misma demo que se podía disfrutar en el pabellón, la del modo Coliseo. En este modo multijugador, comenzamos con un gladiador «con lo puesto» y conforme vayamos derrotando enemigos, iremos obteniendo equipo y mejoras. Mientras jugaba, Esteves iba desgranando la jugabilidad de Ryse: podemos cubrirnos, evadir, empujar y golpear. A la hora de matar a un enemigo, podemos hacerlo de manera normal o mediante una ejecución, en la que la cámara tomará un papel importante y mostrará una secuencia bastante espectacular y sangrienta. Matar es la única manera de recuperar vida, ya que no hay botiquines ni regeneración de salud.
Si somos muy defensivos, los enemigos controlados por la IA nos rodearán y arrinconarán. Os mentiría si dijese que tras los 2 primeros minutos no empecé a aburrirme. No sé si en la versión final habrá alguna mejora a este respecto, pero las posibilidades son muy básicas, y al final la jugabilidad se redujo a una secuencia muy repetitiva: repele-repele-golpea-voltereta-repele-repele-golpea-voltereta… Él mismo reconoció que, tras plantear este modo de juego, ni él ni su equipo le veían mucho sentido. «Cualquier jugador aguantará un máximo de 30 minutos pegándose con los demás y luego se aburrirá. Pero se nos ocurrió una solución genial que hace que no se agote la diversión: escenarios interactivos«. No, ya os digo yo que esto no va a alargar la diversión. Podéis añadir a los golpes el volcar antorchas para quemar a los contrincantes y empujarlos de una patada a las picas del borde del escenario. Y se acabó.
Tocaba hablar del modo campaña y seguir alabando al título. Aquí Esteves se creció y habló sobre una de las principales polémicas del sector, que ha estado en boca de todos recientemente con el estreno de Beyond: cine contra videojuegos. Hasta ahora, como bien dijo, existía un claro desequilibrio. Si un juego pretende ser más cinematográfico, sacrifica jugabilidad, y viceversa. Pues bien, agarraos los machos porque Ryse va a hacer lo que no se ha conseguido en todos estos años: va a ser el juego más espectacular en el apartado cinematográfico y con una jugabilidad compleja y exquisita. ¿Os lo creéis? Yo tampoco, ni la gran mayoría de los asistentes a la presentación. Como bien recalcó un compañero de otro medio, lo que nos estaban enseñando era un juego con cinemáticas intercaladas. Y eso se ha hecho siempre.
Se abrió el turno de preguntas, y no podía faltar la pregunta del millón: ¿1080p y 60fps? No. Esteves intentó adornarlo todo muy bien y venderlo muy bonito: barajaban dos resoluciones: 900p y 60fps y 900p y 30fps. Tras reunirse con el equipo de programación, decidieron optar por la segunda, porque permite más enemigos en pantalla, más inteligentes, una IA exquisita que nos va a hacer alucinar, que se va a organizar, que nos va a fregar los platos, recoger la colada… Y además, es que nosotros nos creemos que las cosas se ven mejor a 1080p, y no. Eso no importa, lo que importa es que el juego sea bonito y esté bien hecho. Que vaya a 900p es lo de menos y no influye para nada. Porque, total, tú empiezas una charla diciendo que vas a mirar a todos por encima del hombro en lo que a gráficos se refiere, y luego sueltas que no importa que un juego nextgen no sea HD y te quedas más ancho que largo.
¿Vamos a comprar un juego completo, o nos van a vender la mitad en forma de DLC? Elegante salida por la tangente hablando sobre lo tremendamente difícil y rejugable que es el modo campaña, que tiene una asombrosa duración de… agarraos… ¡8 horas! Pero claro, tenemos que desbloquear las ciento y pico ejecuciones diferentes, y luego completar el new game+, que se desbloquea al terminar la campaña por primera vez. Ríete tú del Skyrim.
Para terminar, solo quedaba matizar algunos detalles sobre la trama: nos encontraremos con personajes históricos, recorreremos Roma y algunas de sus colonias y tendremos que ejecutar la venganza que pretende llevar a cabo Marius tras contemplar cómo asesinaban a su familia a sangre fría.
Al terminar el evento, estuve escuchando las impresiones generales que había causado el juego, y la inmensa mayoría concordaban con la mía: Ryse parece un juego gráficamente resultón y… Ya. Muchos dudaban que no vaya a ser carne de cesta de segunda mano a 20€ en pocos meses, y estaban claramente molestos con el tema de la resolución. Algunos, sin embargo, se mostraban emocionados ante lo que vaticinaban que es un auténtico vendeconsolas que viene a revolucionar el género y a asentarse como una nueva IP. ¿Cuál de estos dos caminos tomará Ryse? Esperemos que el segundo, pero, una vez más, el tiempo lo dirá.
Tuve la oportunidad de probarlo un par de veces en la feria. Si esto -y dead rising 3, world of tanks y demás- es la next-gen, que paren el tren, que me bajo. Lo único de XOne que valía la pena era Forza 5 -y el mando de la consola.
Yo salí algo decepcionado, quizás por las expectativas. Sí me gustó el combate y toda la historia, ambientación etc. Me sigue atrayendo mucho el juego pese a todo. Sólo queda esperar.
Genial entrada, muy bien resumido. Opino como vosotros, salí algo frio. Tengo esperanzas de ver la historia del título y comprobar si está a la altura de su contexto.
Lo de la resolución no hay por donde cogerlo. WiiU ofrece 1080 a 60fps. Sé que no es lo mismo, pero por eso mismo estas consolas deberían hacerlo sin problemas…
Saludos!
Nao es de las pocas que me hace leer con interés impresiones de juegos para una consola que jamás me pienso comprar xD