Desde el pasado martes ya está disponible la demo de Forza Horizon para que todo el mundo pueda probarla antes de su salida al mercado dentro de dos semanas. Nosotros ya nos la hemos descargado para contar que nos parece y la verdad es que deja unas sensaciones un tanto extrañas a su alrededor…
Lo primero mencionar algunas cosas importantes. A este juego llego «virgen». Es decir, he visto vídeos, material, etc. del título, pero hasta ahora no lo había cogido en mis propias manos, así que lo trato como cualquier usuario que se baje la demo. La segunda, como ya he expresado muchas veces aquí en AKB, no me gusta que se asocie la palabra «Forza» con algo que no sea simulación y este es el caso. Y la tercera, en un mundo en que nos estamos quejando constantemente de que no hay títulos nuevos y salen secuelas como churros, no vamos a matar a este juego solo porque sea nuevo… aunque realmente no lo sea.
Porque Forza Horizon no muestra nada -al menos en su demo– que no hayamos visto antes en otros juegos de coches. Lo primero que te llama la atención es el cacareado ambiente festivo que rodea al título, como si fuera una concentración de «tuners» alrededor de sus coches o si fueras al Rock am Ring en Alemania. Al menos es lo que intenta en la presentación del mismo. Ese estilo en los marcadores con el rosa fuerte marcándolo todo o la música presente por todos lados… pero ahí se acaba la cosa en la demo, porque en cuanto empiezas a jugar, lo que realmente encuentras es una mezcla de Test Drive Unlimited y DiRT, con ciertos toques de Forza Motorsport -que para algo anda Turn 10 apadrinando el proyecto de Playground Games.
Las sensaciones generales son mejores de lo que esperaba, pero sin llegar a ilusionarme del todo. Es el típico juego que piensas que va a estar bien para echar unas partidas, pero que sabes que no te enganchará durante un año. Nada más comenzar la demo -y es de agradecer que sea algo extensa y no bastante corta como las que sacó Turn 10 en Forza 3 y 4- te encuentras con el Viper 2013 intentando llegar a un punto de encuentro siguiendo a otro anfitrión. Ahí es donde ya te das cuenta que a pesar de llevar un coche «real» su conducción no es del todo la de Forza. ¿Por algo esto es un arcade no? Pero no la olvida del todo, ya que tiene bastantes tintes de simulación. Es decir: no nos vamos a pegar las derrapadas que nos damos con un NFS girando el coche «porque si», sin que se vaya de atrás. Los coches se comportan de una manera bastante realista hasta cierto punto y puedes complicar la cosa tocando aspectos de un simulador como el control de tracción, el ABS, el tipo de conducción o el cambio de marchas a manual, pero todo ello suavizado para que el público general pueda seguir jugando a la demo. Vamos que han suavizado la conducción. Muy al estilo de lo que pudiera ser GRID en su día, pero algo más duro.
Y no es lo único que han suavizado. Porque los choques, al menos en la demo, no sirven para nada. Es cierto que de vez en cuando verás algún parachoques volar, pero no queda resto ninguno de los daños mecánicos de un simulador o de arcades, con lo que darse con algo o alguien solo tendrá el consabido retraso de tiempo o posiciones según la prueba que estemos haciendo. Espero que esto no sea así en el juego final, porque es algo pobre.
Graficamente se nota mucho el uso del motor de Forza a la hora de la iluminación, modelado y presentación de las pistas. El trabajo de Playground Games va a ser tratar con entornos abiertos y no circuitos cerrados como en los clásicos Forza haciendo buffering de los escenarios… pero eso es solo para la conducción sobre carreteras generales, ya que en cuanto te metes en un evento, ya está «escriptado» por así decirlo. ¿Ejemplo? Conduciendo con el coche por la carretera general una vez terminadas las pruebas de la demo, se había hecho de noche -¿de noche en un juego de Turn 10? ¡No estoy soñando!- y estaba con las luces puestas para ver y todo eso, cuando llego a uno de los eventos que ya había realizado. Pensé: «a lo mejor, se puede repetir, pero por la noche»… Pues no. De pronto volvió todo el atardecer de la vez anterior que había hecho esa prueba. Una pena.
En la demo puedes correr tres carreras diferentes, además de la inicial en cuanto le das al botón de start. Una es una carrera sobre tierra al más puro estilo DiRT, Colin McRae, etc., en la que compites con ocho coches y tienes que elegir uno con tracción 4×4. La conducción en esta pista es muy arcade y no se nota demasiado los cambios de terreno ni las piedras que pueda haber en la pista cuando te sales del trazado. Es un poco como las pistas de tierra de Gran Turismo: derrapas más y punto. Al menos, han encontrado la razón para meter «fregonetas», SUVS y 4×4 como vehículos en el juego, cosa que en Forza no tenía demasiado sentido.
Cuando acabas esa primera prueba, sea en la posición que sea, inmediatamente te invita a competir contra el tiempo de otros amigos en busca de mayores recompensas. Es el mismo sistema implantado en el último Forza 4, pero de manera más directa, lo cual hace que te piques en la misma prueba por freír a tus compañeros de Live. Así que bien por esta parte.
Después nos invitarán a realizar un evento de exhibición. Se trata de correr contra una avioneta en un circuito bastante virado. Sí, he dicho una avioneta. Ella irá más rápida por el cielo en cuanto a los tramos con rectas, pero tu irás más en los de curvas, a pesar de llevar un muscle car americano. Lo que mola es que cuando te pasa la avioneta por encima, todo tiembla a tu alrededor -mando incluido- y la sensación las primeras veces mola bastante. Aquí la conducción, al ser en asfalto, ya si recordaba más a Forza, pero el coche se maneja más fácil y «culea» demasiado como buen arcade, por mucho que actives el control de tracción o le dieras a tus manos. Al ganar la prueba, te quedas con el coche del evento. Así que ya sabemos alguna de las formas de aumentar nuestro garaje en el título.
La última prueba es otra carrera al sprint, en esta ocasión en carretera abierta. La típica carrera de punto a punto que siempre hemos tenido en cualquier juego de este tipo, rodeado de super-coches como Porsche, Lamborguini y por supuesto, tu Viper 2013, que es el coche que te toca. Y aquí es donde se ve más claramente el arcadazo que es, cuando comienzas a conseguir velocidades de infarto, cruzándote con coches más lentos en tu carril o coche que vienen de frente y te chocas frontalmente con uno si que tu coche se desintegre como sería lo habitual en un simulador.
Según vayamos realizando pruebas, iremos desvelando los diferentes tramos de carreteras del juego, con lo que tendremos más posibilidades de recorrer todo el mundo del juego, muy al estilo Test Drive Unlimited, situando nuestro trayecto para ir de punto a punto. Podemos usar Kinect para este punto. De hecho yo lo hice y me reconoció perfectamente las ordenes que me mostraba para dar en pantalla, lo cual te evita meterte en el mapa y señalar donde quieres ir. Así que usaremos el trasto como GPS. Minipunto a favor si tienes Kinect. No es lo único que tendremos con las carreteras abiertas. También encontraremos radares donde marcar la velocidad máxima en un punto de la carretera y controladores de velocidad que nos medirán la velocidad media entre dos puntos. Más sitios donde picarse contra otros usuarios.
El sonido está bastante bien. Sobra hablar del motor de los coches viniendo de Forza ya que todos están muy conseguidos, pero sinceramente la música me sigue molestando cuando conduzco. Nada más aterrizar en el juego, me recogió el «Hey Boy, Hey Girl» de Chemical Brothers y luego dentro de él, tenemos tres emisoras de radio que elegimos con los botones izquierdo y derecho de la cruceta. Hay un cierto retardo, porque hay que dar dos veces para que cambie de emisora – o para desconectar la radio. Hubiese estado mejor que fuera con un solo toque. Otra cosa de Forza que sigue presente son las múltiples cámaras de conducción y una vez más nos encontramos con que es mejor conducir desde la cámara baja o la del interior que la habitual cámara exterior de cualquier arcade ya que a veces cuando el coche se descontrola un poco, cuesta más hacerse con él en las cámaras exteriores.
En definitiva, mis sensaciones con Forza Horizon han sido mejores de las que esperaba. Parece que va a ser un juego con bastantes cosas a realizar, aunque le pesa el tema de no acabar de definirse a si mismo. No sabe si realmente quiere ser un arcade de verdad, porque sigue teniendo cosas de Forza y eso está bien para depende que cosas. Le puede llegar a pesar, porque en los arcades normalmente se pide una acción más frenética y este título no parece tenerla -sobre todo después de haber podido probar NFS Most Wanted que directamente está en otra galaxia por tipo de juego-.
Forza Horizon parece ser un juego más pausado, donde progresar, conseguir coches, puntos y credibilidad -como pueda ser en Forza- en un mundo abierto y con pruebas fuera de circuito… pero Criterion anda demasiado cerca para andarse con tonterías y pruebas de laboratorio. Sea como sea, no va a ser un mal primer paso para Playground Games… aunque le sobre el «Forza» del título.
Ah, una curiosidad que se me olvidó poner. Si mal no recuerdo, en el doblaje a castellano de la demo, la voz que se escucha es la del mismo locutor de la radio de Paradise City en Burnout Paradise y la de la chica la de nuestra manager en GRID -aunque lo mismo estoy equivocado, pero me suenan a que son las mismas voces.
Respecto a cuando dices que no se define, no crees que si perdiera ese control y jugabilidad y fuera totalmente arcade como un Out run o un BurnOut, entonces es cuando ya no le quedaría nada de Forza.
Quizás eso es precisamente lo que define este juego y lo que justifica la palabra «Forza» en el título.
Es que partiendo de la base que quieren hacer un arcade, la palabra Forza ya sobra de primeras. Y de segundas, si te pones a hacer un arcade, no te quedas en medias tintas, porque los que lo han intentado -quedarse a medias tintas – o se han pegado una galleta de 3 pares de narices o han vendido una mierda…
Si la gente busca arcade, quiere arcade y si quieres simu, busca simu – más o menos fiel, pero simu. Pero eso de tener el control del coche «semi-siulando» el control de Forza en este tipo de juego, no acaba de cuadrar del todo y lo ves en cuanto te das 10 carreras seguidas en el juego. La palabra es «anti-natural». Pero vamos, el juego no parece malo… solo que si nos ponemos en ese palo y ya que pude catar el nuevo Most Wanted, pues prefiero -en principio- el de Criterion.
hola ,ami no me gusta este me gusta el forza 4 en el que cada coche tracciona de forma distinta y es un mundo cada uno con su angulo de giro ,suspension ,aerodinamica etc es increible como se notan las gomas y los bandazos con la direccion que unas veces los controlas por los pelos y otras trompo instantaneo hacia el lado contrario o como vascula la carroceria la verdad que es un simulador sutil y el sonido es pa morirse , un saludo y espero tu analisis de wrc 3 hermano
A mi me ha encantado la demo!!!