Rompe Ralph es puro HAMOR a los videojuegos

Walt Disney Studios, la mayor fábrica de sueños del mundo sigue llevando la magia y la ilusión a nuestros corazones. Y hay que alegrarse, porque no hace demasiado Disney sufrió una mala racha con películas de baja calidad como Salvaje o Zafarrancho en el Rancho.

Teniendo en cuenta que la todopoderosa Pixar le pisaba los talones, hasta el punto de tener que adquirirla para mejorar sus productos, parece que la compañía de Mickey Mouse ha sabido redirigirse por el buen camino y traernos de nuevo películas de gran calidad de la talla de Tiana y el Sapo o Enredados.

Disney parece haberle cogido el truco a la animación en 3D y cada nuevo trabajo supera con creces al anterior, pues se nota que la influencia de Pixar sobre este campo es bastante significativa. Pese a cada vez existe más competencia en lo que respecta a la animación generada por ordenador, las compañías del ratón y de la lamparita siguen siendo las reinas y eso se demuestra gracias al cariño y atención que plasman sobre sus obras. La película que nos ocupa trata sobre el mundo de los videojuegos, una temática nada descabellada si tenemos en cuenta que se trata del entretenimiento electrónico más popular del mundo, superando en ventas a la música o incluso al cine.

Cada vez somos más los jugadores que disfrutamos de este divertido ocio y es por ello que Disney nos trae un producto que rinde culto a este hobby, no sólo para proponernos su particular visión de este querido universo, sino también para satisfacer a los millones de fans tanto de la compañía como de los videojuegos repartidos por todo el mundo. Así es como nace Rompe Ralph, su nueva propuesta para estas navidades que tratará de alzarse como mejor película de animación del año y convertirse en el mayor homenaje a los videojuegos que se haya llevado nunca a la gran pantalla, con permiso de la estupenda Scott Pilgrim: Contra el Mundo. Acompaña a Ralph a un maravilloso viaje por convertirse en todo un héroe que le llevará por increíbles mundos repletos de polígonos y píxeles. ¡Nunca un videojuego había sido tan espectacular!

Ralph es un personaje de videojuegos que duerme plácidamente en el interior de un tronco dentro del bosque. Un buen día, una máquina excavadora le arrebata su hogar y construyen un enorme edificio, destruyendo todo el hábitat natural y desterrándole a vivir en el vertedero. Despojado de sus bienes, Ralph se enfurece, decide destruir el edificio y desalojar a todos sus inquilinos. Sin embargo, el protagonista del juego, llamado Arregla Félix Jr., posee un martillo mágico que le permite reparar el daño causado y acabar con los planes del enemigo. Nuestro villano, que en realidad resulta ser todo corazón, está cansado de ver como siempre es Félix quien se lleva todo el reconocimiento, de modo que decide abandonar su juego y descubrir otros mundos donde pueda ganar una reluciente medalla de oro que le permita ganarse el respeto de sus compañeros de juego.

Se podría decir que Rompe Ralph de Disney equivale prácticamente a Toy Story de Pixar. La esencia es la misma, pues en la peli de Pixar los juguetes cobran vida cuando los niños abandonan la habitación, mientras que en el film de Disney los personajes de videojuegos actúan como actores dentro de la recreativa y se retiran a descansar a la estación central de juegos cuando la sala de recreativos se cierra al público. Dicha estación es el lugar de encuentro donde los héroes conviven unos con otros cuando no están en plena partida y desde donde acceden a sus respectivos juegos a través de portales especiales. Aunque a priori la vida puede resultar placentera y cómoda, el mundo de los videojuegos posee sus propias reglas y resulta indispensable cumplirlas si no se quiere morir o permitir que la máquina recreativa sea desconectada.

Los homenajes a los videojuegos, los gags y los guiños a la industria son constantes, desde que empieza el film hasta que acaba, incluidos los créditos finales. Si sois de los que al acabar la película y empezar los créditos abandonáis la sala, en este caso cometeríais un tremendo error, pues esconden multitud de sorpresas que os encantarán. La película no sólo rinde homenaje a los juegos, sino también a films de culto como Star Wars o Shrek, de modo que para apreciar los cientos de guiños que esconde habría que verla un par de veces o tres más. No exagero, pues durante la proyección aparecen tantos personajes, cameos y situaciones que resulta imposible apreciarlos a la primera. Los momentos en los que aparece la estación central de juegos se convertirá para los espectadores en una especie de minijuego al estilo “¿Donde está Wally?”, donde nos pondremos a buscar a nuestros héroes preferidos y a identificarlos según el título en el que aparecen.

Rompe Ralph es un film dirigido sobre todo a los videojugadores, de modo que el resto de espectadores apenas van a entender muchos de los chistes y situaciones. Es más, me atrevería a asegurar que incluso los jugadores jóvenes que juegan a entregas actuales de la presente y pasada generación tampoco los van a captar, pues la mayor parte de la aventura se desarrolla teniendo como telón de fondo los títulos que protagonizaron los salones recreativos en la década de los 80 y 90, aunque también existe un hueco especial para los juegos más modernos. La película se desarrolla en base a tres títulos principales:

– Arregla Félix Jr.: un juego que supone una mezcla entre Mario Bros, el Donkey Kong original de recreativas y Rampage,

– Heroe´s Duty: acción en tercera persona al más puro estilo Call of Duty, Gears of War y Halo.

– Sugar Rush: una especie de Mario Kart donde absolutamente todo está hecho de golosinas, dulces y artículos de bollería. En este juego es donde se desarrolla gran parte de la aventura.

El ritmo del film es estupendo, con momentos de acción trepidantes que nos mantendrán pegados a la pantalla. La película dura una hora y media, como suele ser habitual en este tipo de producciones, y si bien la historia decae un poco a los ¾ de hora, se suceden tantísimas referencias a la cultura del videojuego que siempre nos mantendremos alerta para poder apreciarlas todas. La historia se centra demasiado en Sugar Rush y el hecho de que Ralph hubiese visitado algún juego más le habría sentado fenomenal al desarrollo. Me habría encantado que el protagonista hubiese visitado mundos al estilo Sonic the Hedgehog con sus vertiginosos escenarios repletos de loopings o Super Mario Bros en el reino champiñón, pero la selección de universos también es acertada si se quiere tratar de contentar a la gran mayoría de jugones, tanto a los que juegan a los nuevos títulos como los que disfrutamos de los clásicos de antaño.

Disney ha dado en el clavo con esta película y el producto ha resultado ser mucho mejor de lo que en un principio me esperaba. Rompe Ralph es tremendamente divertida, sobre todo la primera media hora, y es que han tratado con tanto cariño y respeto el mundo de los videojuegos que resulta espectacular, para quitarse el sombrero. Hay tantas cosas por descubrir que la primera vez que la veas te quedará ese regustillo especial por querer volver a verla para seguir explorándola en busca de nuevos secretos. Posee un contexto rico en detalles e ideas brillantes y si a eso le sumamos la aparición de personajes de videojuegos tan populares y queridos por todos como Pacman, Sonic, los luchadores de Street Fighter o Q*bert, el resultado es simplemente impresionante.

Durante la hora y media que dura desearás que no acabe nunca y se te pasará volando el tiempo, tanto que te quedarás con ganas de más una vez termina, pero tranquilos, pues sus máximos responsables han confirmado la secuela gracias al tremendo éxito de taquilla que ha obtenido sólo en EEUU, sin contar que aún debe estrenarse en otros 11 países. No sólo eso, sino que han declarado que la nueva trama se desarrollará dentro de los circuitos de las consolas de sobremesa y contarán con la aparición especial de Super Mario, con el que ya tienen preparadas algunas ideas. Desgraciadamente aún tendremos que esperar 2 o 3 años más hasta que la secuela llegue a nuestros cines.

Si te gusta Walt Disney y sobre todo te gustan los videojuegos Rompe Ralph es tu película. Posee todo aquello que los jugadores hemos estado esperando durante mucho tiempo, una cinta tremendamente divertida con cientos de guiños y cameos que encantará tanto a grandes como a pequeños, aunque serán los primeros quienes sabrán apreciar y descubrir realmente todos los secretos que esconde. La nueva obra de Disney es puro HAMOR y seguramente tardaremos mucho tiempo en volver a disfrutar de algo tan magnífico, de modo que no la dejes escapar y ve a verla a tu cine más cercano el próximo día 25 de este mismo mes.