Sonic, tio, tú antes molabas

«Vale, vale, vale… ¿que es lo que ha pasado aquí?» me he preguntado mientras estaba oteando YouTube tras unos días bastante movidos. Me voy unos meses de Akihabara, todo ji-ji, ja-ja y jo-jo, entre Max Payne, Connor (aka Ratohnhake:tón) y John Marston. Pongo YouTube y me salta lo siguiente Sonic The Hedgehog Fan Film de los responsables del fan-film también de Megaman. AY!

La película, si se puede llamar así, empieza con una introducción de Urkel narrando que nos imaginemos como un planeta tan guay y sin problemas podría estar invadido por un doctor que se parece a un huevo con patasa partir de ahí, solo podemos seguir hacia abajo, como quien mina en Minecraft.

Bueno, bueno, que no haya lágrimas ahora. Blue Core Studios es una pequeña productora, financiada a través de donaciones, mayormente por Kickstarter, y que ya se hizo un pequeño nombre entre los fans cuando realizo una pequeña película sobre Megaman y que obtuvo críticas variadas. Por ello, los chicos de Blue Core no se achantaron y siguieron adelante con otro proyecto, uno que incluía a un personaje pequeño, azul, rápido, lleno de púas con deportivas rojas y guantes de color blanco… si, es Sonic.

El caso es que, en este fan-film de aproximadamente 15 minutos, vemos el esfuerzo de nuestros amigos de Blue Core por recrear el mundo de Moebius, tal y como lo recordamos de aventuras como Sonic Adventure y Sonic Adventure 2, con el Doctor Robotnik haciendo de las suyas y queriendo conquistar el mundo mediante su incesante ejército de robots y al que el ejército G.U.N intenta defenderse con éxitos anversos. En una de estas escaramuzas, uno de los soldados cae presa de los robots de Robotnik y, estando a punto de ser ejecutado, es salvado gracias a un misterioso «borrón azul» que destruye a los robots. Sin embargo, este borrón es, como ya sabréis, el mismo Sonic, cuya existencia empieza a creerse como un mito, la de un héroe que salvara Moebius de la opresión de Robotnik.

Y hasta aquí, toda similitud con los videojuegos protagonizados por el que fuera el icono de SEGA en los 90 para convertirse (con perdón de la expresión) en la zorra de Nintendo. Ya fuera por reediciones o por cameos en la máquina de la que fuera su enemiga, Sonic se ha puesto bajo la batuta de la Gran N y, olvidando fracasos como Sonic The Hedgehog en 2006, estuvo bajo las ordenes de Mario y compañía durante bastante tiempo. Luego, llegaría el 20º aniversario del puercoespín de azul, Sonic Generations y el resurgir de Sonic Team tras darse de bruces con la misma piedra. Pero, ¿que significa el fan-film realizado hace un par de meses para los fans del erizo? ¿Una traición? ¿Un homenaje? ¿La posibilidad de demostrar que, si los fans se lo proponen, Sonic puede ser una estrella o un estrellado?

Sinceramente, entiendo el «hamor» que los fans de Sega aún procesan por su Mesías particular y a mí me ha parecido como el cuerno del Abismo de Helm sonando para que venga la caballería y el próximo proyecto oculto de Sonic Team. Esperemos al alba del tercer día…

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