Aunque todos pensábamos que Mass Effect seguiría el camino de su primera entrega y tan sólo los poseedores de un ordenador medianamente decente o una Xbox 360 podrían disfrutar de escenas de lesbianismo alienígena, la aparición de la consola PS3 en la web de EA Rusia del juego de Bioware en la cadena Game australiana ha puesto a más de uno los pelos como escarpias. ¿Multiplataforma en camino?