Lo digo y lo repito, a pesar del argumento GTA San Andreas que esgrimen en mi contra, que cualquier videojuego es peor con jetpacks. Eso sí, la vida podría ser maravillosa con semejantes artilugios en la espalda que nos permitieran sobrevolar por las calles de la ciudad: miradas indiscretas a dormitorios ajenos, algún que otro gapete desde lo alto a tu antiguo jefe… Eso sí, habría que tener cuidado con la gasolina no fuera que se te cayera un tipo XXL encima.
Os recomiendo que no dejéis ver a los niños el siguiente vídeo en el que un Spartan se pasea por la londinense Trafalgar Square en un jetpack: son capaces de meter un extintor en la mochila del colegio y tirarse por la ventana.