La víspera de Todos los Santos marca ese momento del año en que medio mundo disfruta de una fiesta en la que los muertos, espectos, fantasmas y lo sobrenatural cobran el protagonismo. Y también el momento del año ideal para ir al Cine a gritar con una buena peli de terror, o quedarse en casa sumergiéndonos en la experiencia interactiva que supone un videojuego frente a una película. En mi caso soy un fan del Terror, pero también me gusta la variedad y no anclarme en una sola propuesta temática y dentro de un sub-género particular.
Me encanta un buen manicomio abandonado con su ‘mad doctor’ loquísimo, pero también algo de fantasmas con su toque victoriano, algo de monstruos o el típico ‘slasher’ 80s, así que os traigo un listado personal de opciones, y con un poco de suerte quizás descubráis un título que no conocíais u os despierte el recuerdo de uno que os encantó. Sí, Silent Hill, Resident Evil u Outlast están fuera, y sí es un sacrilegio absoluto e inmoral y merezco acabar como víctima del Phantasmagoria de Roberta Williams (estoy ya algo mayor para que Krampus me lleve y faltan como 7 semanas para Navidad de todas formas). Pero como suelen salir siempre (con todo merecimiento) en los listados de obras maestras del terror, dejémoslas fuera esta vez, sólo esta vez, y más adelante les daremos su propia voz. Hoy que hablen otras, que como los fans del Terror saben este género es tan variado como el repertorio de cabezas de Jack O’Lantern. ¿Empezamos?
Clive Barker’s Undying
Un investigador paranormal, una trama sobrenatural ambientada en la costa irlandesa y en los años 20, y un autor de primera fila tras el argumento. Clive Barker, excelente escritor de terror al que le debemos también los cenobitas de Hellraiser o su atmosférico Clive Barker’s Jericho de la pasada generación, pergeñó un título que tiene la friolera de 15 años, pero que salvo en el aspecto gráfico y su Unreal Engine 1, el resto de apartados no envejecen. Jugablemente sigue siendo un FPS old school de los de ratón en mano y a darle caña, y narrativamente una historia de horror, codicia, rituales místicos y una familia atípica. Y ya está, no contemos más. Si os gusta el terror y nunca lo habéis jugado, recuperadlo, porque su atmósfera victoriana y sus sustos de manual pero efectivos siguen siendo geniales.
Koudelka
Seguimos en Irlanda, y además en la costa, pero viajamos hasta un 31 de octubre de finales del siglo XIX en el mágico Koudelka, un RPG para la primera PlayStation en la que sus creadores decidieron mezclar las dos mayores influencias de la época: Resident Evil y Final Fantasy. ¿Vaya mezcla, eh? Pues sí. Hablamos de un RPG puro y duro en el que la parte exploratoria recorremos una lóbrega abadía que supura sentimiento gótico por cada piedra y atmósfera RE victoriano. Y la parte de acción combates por turnos con sus acciones tácticas, flanqueos, magia y armas únicas. En sí este es de esos juegos que yo califico como ‘joyas imperfectas’. Imperfecta porque el combate, la base del gameplay, se hacía repetitivo comparado con el de un FF o del Chrono Cross, ya que no tenía tantas posibilidades; joya porque el resto era perfecto: la cantidad de escenas CG, el guión, la trama oscura y macabra, los personajes, el diseño del escenario, la enorme BSO de Hiroki Kikuta (ese requiem inicial), y lo que en su época fue más increíble: todos los diálogos, ya fuesen CG o cinemáticas con el motor del juego, estaba doblados y a un perfecto castellano cuando los FF de PSX todo era texto. Para mi, simplemente inolvidable.
Lollipop Chainsaw
Que Suda51 está ‘loco’ y le gusta hacer locuras es un hecho. Y si tiene presupuesto y talento al lado para respaldarle su visión, mejor aún. Halloween es también sinónimo de fiesta, de diversión, y en este caso tenemos a una cazadora de zombis en forma de animadora típica y tópicamente de instituto americano que habla con la cabeza de su novio, que lleva al cinto, viene de una familia de cazadores de no-muertos, adora los chupa-chups y mata zombies con una sierra eléctrica de corazones. ¿He dicho ya que los zombies revientan en una especie de neblina rosa-chicle? ¿Y que los malos serían dioses en un concierto metalero? ¿Y que Akira Yamaoka mete mano en la BSO y Tara Strong, Harley Quinn en los Batman Arkham, lo clava como la voz de Juliet? Añadidle que James Gunn (sí, el director de Guardianes de la Galaxia) co-escribe el guión y tenéis un título ideal para un Halloween de cachondeo. Eso sí, seguro que querréis serrarle la cabeza al tío que implementó la cámara, pero sólo un poquito.
Haunting Ground
Cuando el nombre de Capcom valía su peso en oro, y cuando el Survival Horror clásico estaba en su época dorada y salieron un montón de maravillas, fue cuando Haunting Ground se estrenó en el mercado de PlayStation 2. Tomándole a Clock Tower 3 sus ideas, la gracia del gameplay estriba en que no podemos enfrentarnos al enemigo, sólo huir y escondernos, logrando un sentimiento de indefensión total. Este es de esos juegos que cuanto menos cuentes mejor, sólo decir que Capcom logró que al empezar estuviéramos tan desorientados como la protagonista Fiona, que tras una escena CG perfecta que si la vemos en HD parece creada hoy y no hace una década, despierta en un castillo gótico sin saber qué ha pasado. Más que sustos y terror, Haunting Ground juega a crear una sensación de desquiciamiento. Y lo logra con creces, merced a un diseño sonoro que nos enervará los nervios. Kudos a la implementación de Hewie, uno de los mejores perros virtuales al que hemos podido dar órdenes.
Batman Arkham Asylum
Atmósfera, pura atmósfera es lo que 9 años después sigue uno respirando cuando acepta recorrer los pasillos del manicomio Arkham en uno de los juegos más capitales para el sub-género de superhéroes. En su momento Batman: Arkham Asylum me sorprendió porque no me esperaba que Warner le hubiese dado tanta libertad a un estudio tan desconocido como era Rocksteady para clavar la atmósfera gótica, retorcida y lóbrega que las páginas del Arkham Asylum de Morrison y McKean desprenden. Cada estancia nos hace mirar de vez en cuando por encima del hombro; cada diálogo del Joker por los altavoces nos desquicia; la tumba de Amadeus Arkham en mitad del cementerio sobrecoge, y la parte de la Morgue eriza el vello. Lo malo es que en su tramo final toda la atmósfera se desinfla al saber la trama, pero ojo, que hay un sorpresón final, y no hablo de la habitación secreta en el despacho. Probad a recoger todas las losas Arkham, escuchad la historia de Amadeus, y sorprenderos con una revelación final que vuelve a encauzar la historia a sus tintes sobrenaturales.
Ghostbusters
¿He visto a alguien arrugando la nariz? Lo siento chavales, pero soy un loco de Los Cazafantasmas 😀 Una película que 30 años después se ha convertido en algo generacional, de la cultura popular -todo el mundo reconoce su logo- y cuyo merchandising no para tuvo un videojuego en 2009 que sí, que dividió a los usuarios, que no gustó a los que pensaban que esto iba a ser un Gears of War con el skin de la peli, y que algunos encontraban aburriiiiido hasta el exceso al obligarles a agotar y cazar fantasmas uno a uno. Pero como pasa con todos los productos Fanservice -un termino que algunos denigran pero no se lo merece- , esto estaba dirigido sobre todo a los fans de la saga. Y como tal existen pocos videojuegos que puedan presumir de ser tan tan fieles al universo de una IP. La versión de PC, PS3 y 360 clavó el hacernos sentir el 5º cazafantasmas (gran idea), llevar un equipo de protones y alcanzó esa mezcla como las pelis de acción, comedia y momentos de terror (el videojuego tiene algunos sustos conseguidos) y de cierta tensión al usar el acojonante ‘score’ original de Elmer Berstein que pone los pelos de punta con ese theremin. Los actores originales en las voces, los dobladores originales en las voces españolas, un guión brutal retomando a Ivo Shandor y la espectacularidad de reventar todos los elementos de un escenario. Sí, a algunos les aburrió, pero es un manual de cómo debe hacerse un fanservice que deje a los fans satisfechos y aplaudiendo. Y si queréis más, os aseguro que el LEGO Ghostbusters de LEGO Dimensions es la leche de divertido y fiel.
Alan Wake
Maestros como muy pocos en la narrativa, Remedy (Max Payne, Quantum Break) tocó el cielo de las narraciones con Alan Wake, un thriller de terror mezcla de Stephen King, el David Lynch de Twin Peaks, Dimensión Desconocida y tantos otros referentes para construir una obra con personalidad propia. Quien es escritor sabe lo que es atravesar un bloqueo creativo como el de Alan, pero todo lo que se desarrolla a partir del momentazo de la casa del lago a oscuras es digno de elogio. Quizás que algunos nos quedamos algo insatisfechos ante un gameplay con demasiado gunplay (sus intenciones de mapeado abierto originales prometieron muchísimo), pero la atmósfera, el uso de la luz, la linterna, la banda sonora y las continuas revelaciones y sorpresas lo convierten en una maravilla narrativa que, si os gusta el género, debéis recuperar. ¿Os he dicho que está retrocompatible con Xbox One?
American McGee’s Alice & Madness Returns
Ahora es habitual ver un cuento clásico con una relectura siniestra. Hace 16 años no. EA de nuevo (estaba en racha, porque al año siguiente lanzó Undying) le dio liberta a American McGee para hacer lo que quisiera con su versión de Alicia en el País de las Maravillas. Y este hizo la Alice oscura, siniestra, retorcidamente demente, gótica y sangrienta que el Tim Burton de Sleepy Hollow habría firmado en vez de la Alice con Johnny Depp que nos coló. En sí se manejaba como un shooter en tercera persona con plataformas, pero la fuerza visual de su propuesta y lo visceral de sus combates contra soldados que sangran no envejece un ápice en una Wonderland de pesadilla, y con una BSO para el recuerdo. Años después McGee nos concedió el capricho de un Alice 2, y Madness Returns se convirtió en una aventura en tercera persona visual y sonoramente hipnótica, más demente y más sangrienta, y claramente el complemento perfecto para un Halloween de videojuego. Seguiremos soñando con una Alice 3 más allá de los cortos Kickstarter que planteó, por más que McGee se empeñe en derivar la saga a un multijugador online.
Haunting Starring Polterguy
Saltamos a las viejas generaciones y a los píxeles segueros, curiosamente de nuevo con EA, en un viejo título olvidado pero no por ello condenadamente divertido 23 años después de su salida. Y es que, ¿qué hay más divertido que ser un poltergeist punkarra cuya misión es asustar a una familia de insoportables ricachones llenando cada mueble y habitación de la mansión de ectoplasma verde? Con dosis de estrategia y al estilo de Kagero Deception / Trapt, en Polterguy vamos creando una serie de trampas para ir disminuyendo el medidor de resistencia de cada miembro de la familia, pero con cuidado que el moco verde se acaba y toca ir al infierno a por más. Convertir un cortacésped en un bicho que muerde, conjurar un vórtice en la alfombra del salón o hacer que el sofá se trague a alguien sigue siendo una gozada, sobre todo con un apartado visual en isométrico que sigue de moda por toda la nostalgia Pixelart que hay hoy en día. Si hay algo más Halloweenesco que esto, apaga el ectoplasma y vámonos.
Splatterhouse
En los años 80, el Terror en el Cine se basaba principalmente en los ‘slashers’ tipo Viernes 13 o Pesadilla en Elm Street, pelis en las que un asesino real/de ultratumba perseguía a jovencitos y los ajusticiaba. Reventar órganos y enseñar fluidos estaba de moda, y Namco quiso rendirle homenaje con su saga Splatterhouse -el splatter era el antecesor de lo que hoy se llama Torture Porn, y cintas como Holocausto Canibal o las salvajadas cutres de Peter Jackson son ejemplos destacados-, que pasó de recreativas a la Mega Drive en Occidente. Polémica en la época -en los 80-90 con la Mega Drive y Super Nes los juegos seguían considerándose para niños-, más de uno tuvimos que jugar a escondidas para luego presumir en el colegio, pero Splatterhouse 1, 2 y 3 eran arcades con una historia de slasher sobrenatural 80s -científicos locos, una máscara sobrenatural que convierte a su portador en un rocoso vengador, la novia secuestrada- y una ejecución jugable de splatter, ya que reventábamos a ostias a todos los monstruos y engendros.
Fijaos si eran salvajes que había científicos a los que les sacábamos el cerebro de un puñetazo, y una especie de bebés deformes gritones ahorcados y sangrantes que matábamos con una sierra eléctrica… Namco se atrevió hace algunos años a hacer un Splatterhouse en 3D, pero lejos de destrozar la saga -hola, Final Fight Streetwise-, el Splatterhouse de 2010 logró reimaginar la serie reteniendo todos sus elementos y siendo un gran ejemplo de reboot moderno. Sí, el control, el salto y la cámara podían estar mejor, pero visualmente no vais a encontrar un juego más sangriento, gore y ‘splatter’. No, en serio, es un maldito baño de sangre y tripas a ritmo de Heavy, Trash y Death Metal constante con una historia 80s sólida y un extra impagable: la trilogía 2D original como juegos desbloqueables. Poneos la máscara y a destripar bichos con las manos con Mastodon y Lamb of God sonando de fondo.
Alone in the Dark: The New Nightmare
Cuarta entrega y a la vez reboot de la pionera del género -aunque fue Resident Evil el que inventó el término Survival Horror-, en la época dorada de los juegos de terror tuvimos en consolas y PC un Alone in the Dark que seguro que algunos recordáis de haberlo jugado en 2001 cuando salió. Muy al estilo Undying, este Alone nos llevaba en la época actual a una isla misteriosa cerca de la costa de Massachussets, oscura, lluviosa y mal rollera en la que el renovado Edward Carnby y Aline Cedrac investigaban una buena trama sobrenatural. Atmósfera pura tenía este juego, merced a un elemento soberbiamente implementado como era el uso de la linterna y la luz y sombras que arrojaba al escenario al encenderla. Atmósfera y sustos, porque sólo el primero cuando manejábamos a Edward, el de las sombras, se nos ha grabado a más de uno a fuego en la mente del grito que soltamos. Puro survival horror de la vieja escuela y con doble juego, ya que podemos elegir a Edward y afrontar una parte más de disparos, o a Aline y resolver más puzles. Está en Steam por cierto…
Folklore
Para el que suscribe uno de sus juegos favoritos, Folklore, o Folk Souls en Japón, fue de la primera hornada de títulos que llegaron a PlayStation 3 en el tramo final de 2007, su año de debut en Europa, el mismo que en apenas dos meses nos trajo Uncharted 1, Assassin’s Creed 1, Heavenly Sword o Call of Duty 4 Modern Warfare (viejos buenos tiempos). En sí, siempre que me han preguntado por él lo he descrito de la siguiente forma: El Pokémon de Tim Burton, porque básicamente es eso: un título con una ambientación a medio camino entre Fantástica y sobrenatural en la que recorríamos mundos de fantasía cazando a criaturas imposibles a las que adiestrábamos y usábamos en combate. Visualmente bellísimo, hipnótico y deslumbrante, y sonoramente con una de las BSOs más bonitas que hay en el catálogo de PS3, el juego arranca en un misterioso pueblo irlandés en pleno 31 de octubre que a la caída del sol se llena de entes, espectros y fantasmas, con un detective a lo Iker Jimenez y una chica que ha recibido una carta de su madre… que ya estaba muerta. Un Action RPG atípico, con dos protagonistas y por tanto dos campañas distintas que además invita al ejercicio, porque la caza de criaturas usando físicamente los sensores del DualShock 3 a modo de látigo te pone en forma.
Obscure
Otro día, si me dejan, repasaré la cantidad de survival horrors y juegos de terror que tuvimos en la época de PlayStation 2, Xbox y la Cube, porque fue para enmarcar. Obscure, estrenado en 2004, es de esos juegos que en un primer vistazo se englobaban directamente bajo el esquema Resident Evil. Pero los franceses de Microids supieron darle un giro que no veíamos nunca: Cooperativo. Exacto, un juego de terror a dobles para jugar con un colega. La locura, señores, porque eso hizo a este título y su secuela obras de culto que podéis pillar en Steam aparte de en PS2 y PSP / Vita. En sí jugaba con los tópicos del típico film de terror de Instituto USA, pero sus creadores le metieron una dosis de terror con una historia mucho más cercana a un HP Lovecraft que a un Scream o slasher yankee. Eso, una atmósfera malsana que juega con el miedo de un enorme complejo que de día no da miedo pero que de noche impone, una BSO orquestal que es una joya sonora, y el juego a dobles que lo mantienen fresquísimo. Eso, doblaje al español y la intro inolvidable al ritmazo guitarrero del Still Waiting de Sum 41.
Condemned
Hay títulos que se olvidan pronto, pero que siguen siendo buenas obras a pesar de que gráficamente hayan sido superados -los gráficos no hacen a un juego por cierto. Condemned: Criminal Origins es uno de ellos, un título reivindicable para PC y Xbox 360 en el que somos un agente del FBI que investiga macabras escenas del crimen y busca a serial killers para aplicarles a veces una justicia más del Talión que según el manual. La fuerza de este juego se basa en su atmósfera y en la brutalidad de sus combates cuerpo a cuerpo, con una fisicidad y visceralidad en primera persona impactantes mientras nos sentimos parte del CSI usando Luminol y sacando macabras fotos forenses. Opresivo, claustrofóbico y espeluznante, Condemned nos lo hace pasar muy mal, y aunque necesita mejoras en ciertos apartados jugables, consigue que vivamos dentro de nuestro propio Se7en, porque la atmósfera es así de cruda y conseguida, y parece que nos van a salir Mills o Somersett por algún lado. Kudos al diseño sonoro, enervante el muy cabrón.
Luigi’s Mansion
Una de las joyas de esa pedazo de consola que fue Game Cube, Luigi’s Mansion es el equivalente a adaptar Ghostbusters al universo Nintendo, metiéndole un poco de Casper y Abbot y Costello aquí y allá. Explorar una recargada mansión victoriana con Luigi balbuceando ‘Mario…? Mario??’, linterna en mano implementada de forma magistral, y ese concepto de terror suavizado fueron tan recordados que la IP tuvo una secuela de órdago para la 3DS -pero nunca en Wii U, que la pedía A GRITOS. En sí es exploración, puzles y caza de fantasmas usando una aspiradora, mientras buscamos a Mario dentro de un entorno visual cuyos detalles técnicos e iluminación siguen deslumbrando 15 años después. Sí, se nota que lo adoro, pero la crítica también lo adoró, y los fans lo convirtieron en el juego de Cube más vendido de su catálogo. Please Nintendo, Luigi’s Mansion 3 en la Switch!!
Alien Isolation
Antes hablábamos de los títulos fanservice como Los Cazafantasmas. Pues aquí tenemos otro que puede ser usado de ejemplo de cómo se deben hacer las cosas. Alien Isolation es, a mi juicio, uno de los mejores títulos de terror que hemos tenido precisamente en una época en que el terror AAA estaba casi desaparecido. Como Survival Horror remite a la vieja escuela, como juego basado en una franquicia clava todos y cada uno de los elementos, empezando por esa gran decisión de fijarse en el primer Alien, en el cara a cara con una sola bestia, y no en el festín de matar xenomorfos a manos llenas como han hecho otros títulos. La atmósfera es terrorífica -si lo jugáis en PS4 poned la cámara y el altavoz del mando-, la trama acierta al no copiar sino inventar algo nuevo al centrarse en la hija de Ripley, y los escenarios un remedo de la Nostromo que era lo que muchos fans soñábamos. Es una pena que no vendiera lo suficiente como para que SEGA autorizase una secuela, y aunque Isolation 2 no está descartado, tampoco es algo que veremos dentro de un año precisamente. Crucemos los dedos, señores.
Project Zero 2
En mi Top Ten de juegos favoritos figura precisamente este. Fan irredento de Project Zero desde que el 1 me lo hizo pasar mal de narices -o sea, bien de narices-, fue la segunda entrega la que más me caló. La historia de estas hermanas, las gemelas Mio y Mayo; la indefensión de una de ellas por estar coja; el macabro ritual de esa aldea olvidada y poseída; las tramas paralelas de los entes atrapados allí… Project Zero 2, a mi juicio, es de los mejores juegos que el género del Terror ha tenido, y a la par uno de los títulos más escalofriantes de la historia. No es sólo que clave el estilo, ejecución y artificios de los films de terror asiáticos que reescribieron el género tras la época de slashers del primer Scream, sino que le añade lo que los films no tienen: interacción y que seas tú el que exorciza a los fantasmas en primera persona, más un apartado sonoro de voces, efectos y notas que os reto a jugarlo de noche con un home cinema, barra de sonido o auriculares envolventes. Ciertamente la saga Project Zero parece una rara avis old school en la actualidad, como su mejorable pero muy recomendable quinta entrega demostró el Halloween pasado en Wii U, pero si queréis pasar miedo de verdad, sentir ese escalofrío de “va a salir algo, va a salir y me va a asustar”, recuperad la saga entera y descubriréis una sinfonía de terror absoluto.
Eternal Darkness: Sanity’s Requiem
Otro título de Cube que ha entrado en el imaginario colectivo de los fans por méritos propios, Eternal Darkness es, simplemente, una obra maestra del terror y otro juego que no vendió lo que debía y se convirtió en obra de culto. La historia familiar de los Roivas sirve para que conozcamos una familia marcada y manejemos a una buena cantidad de personajes a través de una variedad enorme de épocas históricas. La originalidad de su concepción es una de sus bazas, con la idea de que podíamos pasar miedo manejando a un comandante romano en la Persia del 26 BC, a un mensajero de Carlomagno, a un médico colonial, un monje franciscano del siglo XIII, una bailarina y esclava… Eternal Darkness, a pesar de que con toda obviedad a nivel técnico acusa sus 14 años, innovó con su medidor de locura para los personajes, que no sólo se traducía en dejarnos aterrados, sino que cambiaba y se adecuaba al escenario, al personaje, y logró romper la 4ª pared y hacer partícipe de estos al usuario. Si tenéis acceso a una Cube recuperadlo, porque lo del sucesor espiritual de Shadows of the Eternals parece que va para largo…
Until Dawn
De juego cancelado casi en secreto para PS3 a uno de los imprescindibles de PlayStation 4, Until Dawn ha sido una de las sorpresas más agradables del 2015 que ha gustado incluso a muchos detractores de las obras de David Cage. ¿Por qué? seguramente porque Until Dawn se deja de dramas y apuesta por recuperar la fórmula slasher de los 80 y 90 en una suerte de juego de Cage dirigido por John Carpenter. Su atmósfera es enorme y conseguida, su gameplay inmersivo en la exploración a la par que frenético e intenso en las carreras, sus sustos efectivos y bien dosificados, y su baza maestra de ‘cuidado, que aquí se te mueren los protas’ una de sus claves. Con Until Dawn se puede pasar miedo solos, y se puede pasar miedo en grupo, y no rehuye el gore y lo macabro al tiempo que hacérnoslo pasar tan mal como las víctimas en pantalla. Es un slasher virtual como ningún otro, y con una amplitud de miras -muy accesible al control y este es muy intuitivo- que lo hace ideal incluso para los que sólo jueguen al Clash Royale en el móvil. ¿Hay juego más recomendable en Halloween? Puff, difícil de contestar, eh?
Deadly Premonition
Espera, ¿Deadly Premonition? ¿Ese juego que en Xbox 360 tenía un control complicado y gráficamente parecía casi de Psone o de demo alpha muy alpha de Xbox? ¿Pero qué tiene este título para que unos pocos locos sigan recomendándolo? Os diré que tiene: Ser la versión virtual del Twin Peaks de David Lynch aderezado con un serial killer sobrenatural de infarto y un prota enorme. Hablamos de un juego de terror como ningún otro, porque mezcla terror con comedia, personajes delirantes, gameplay no lineal, mundo abierto… Una locura con unas críticas tan divididas en 360 que lo mismo un analista le daba un 2, otro un 10 y otro se quedaba en el 6. La versión de PS3 mejoró muchos apartados, pero mantuvo la locura intacta multireferencial que a ratos te asusta, a ratos te enerva, a ratos te deja ‘WHAT THE FUCK’. Y como tal se ha convertido en una obra de absoluto culto que más de uno atesoramos en nuestra estantería.
Call of Cthulhu: Dark Corners of Earth
En el mundo del terror hay pioneros y dioses como el señor H.P. Lovecraft, amo y maestro indiscutible del horror cósmico, la atmósfera victoriana y los monstruos con tentáculos. Y su universo comandado por el dios Cthulhu un continuo vergel adaptado e influyente para escritores, guionistas, directores y creativos. En el ámbito jugable no hay juego más Lovecraft que este Dark Corners of the Earth, porque en lo referente a las obras del maestro lo clavó a todos los niveles desde la atmósfera a los enemigos, la época, o el sistema de combate realista y por tanto difícil. Sí, no es un juego perfecto, tiene bastante que corregir en el plano técnico -no está exento de bugs-, pero las sensaciones que desprenden, la inmersión total en Innsmouth y la idea de que así sería un juego si Lovecraft lo hubiese escrito son palpables y para los que adoramos su obra, este título es una joya. Una joya que años después de su salida está siendo reivindicado como se merece.
Pesadilla antes de Navidad: Oogie’s Revenge
Oh, venga. Seguro que alguno se lo estaba ya viendo venir, “fijo que cierra con algo temáticamente puro Halloween”. Pues sí, y remito de nuevo al fanservice, porque si algo es este juego de la época PlayStation 2 y Xbox es un fanservice extremadamente detallista. Todo está dónde debe estar, ya sea la casa de Jack, el laboratorio de Finkelstein o la plaza mayor de Halloweentown. Todo es perfecto, increíble, y Capcom se ganó una ovación al cuidar cada mínimo detalle de un juego que se considera como la secuela de Pesadilla antes de Navidad. Bajo un título de acción hack ’n slash puro, Capcom nos metió en el universo más recordado cada año de Tim Burton, y de paso añadió unos combates musicales contra Jefes Finales que convirtieron temas como la Canción de Sally en himnos de batalla. La crítica no lo trató bien, lo acusó de repetitivo y quedarse a medias, pero nunca verás algo tan fiel al universo de Nightmare Before Christmas fuera parte de la propia película. Y si tenéis GBA, recuperad el título que sacaron para la portáil de Nintendo, ya que es la precuela del film y un Metroidvania en 2D muy apañado.
¿Y vosotros, qué habéis jugado en estos días y cuáles son vuestras elecciones y aquello que consideráis joyitas?
Menuda miscelánea de recuerdos! Añadiría… hummm… el Silent Hill 3!
Yo con el clyve Bakers ya voy bien jajaj
Todavia recuerdo empezar a jugarlo, el susto del espejo y gritar cual Jack Sparrow 😂😂😂
Interesante recopilatorio.
Creo que deberiamos añadir a la lista algunos, que no son necesariamente de terror, pero como la lista en si es un poco suelta, pues metamolos:
– White Night. Este teneis que jugarlo. es bastante reciente y es un gran juego, que en muchos momentos pone los pelos de punta. Si gustan los RE y los Project Zero, este gustara.
– Brutal Legend. Tiene tintes del genero, y es un juegazo 😉
– Edge of Nowhere: No es por hacer publicidad a mi compañia, pero es que es un gran juego. Si alguien tiene un Oculus, que no lo dude 🙂
ENORME ese White Night. Tuve la oportunidad de analizarlo y me encantò su monocromìa, el toque Noire y el aire a lo Alone in the Dark. He querido dejar fuera todo el catalogo indie porque merecen su propio espacio sin duda.
Y Brutal Legend es un orgasmo metalero total🤘🤘
Yo acabo de probar la demo de Kitchen de RE/ en PS VR y todavía me tiemblan las piernas. Lo de combinar porno y VR vale, pero terror y VR es de enfermos, joder, qué mal lo he pasado.
Si, el futuro de la VR esta en el terror y el porno, y no en ese orden.
Ahora, porno en psvr, como que no. Asi que nos conformaremos con el terror.
Juas, this, Roswello. XD
Menuda currada de reportaje, tengo que decir que a mi el cazafantasmas lo jugué en 360 y me encantó, nostalgia quizás? puede. De los demás obscure con esa ambientación parecida a la peli The faculty y Lollypop Chainsow que a pesar de no ser ninguna maravilla entretiene. Pero sin duda mi favorito es Alan wake..
Zombies ate my neighbours el numero 23 espero xD
La magia de Deadly Premonition está precisamente en el hecho de parecer un videojuego de serie B. Esos controles tan ortopédicos y esas risas son impagables, con un sinfín de momentazos como el del Sinner’s Sandwich
THIS, juegazo.