Elite Dangerous: Diario de Vuelo - Día 1

El viaje iba a ser duro. La misión de llevar productos básicos a un lejano sistema inmerso en una cruenta guerra civil parecía sencilla. Eso no era lo que nos preocupaba. Los beneficios iban a ser sustanciosos y el viaje casi seguro que valdría la pena aunque nos separaran miles de años luz de distancia.

Elite Dangerous Screen 1

Nada como coger la gran autopista galáctica llamada hiperespacio y empezar a saltar entre sistemas era pan comido, una vez nos alejáramos de la fuerza gravitatoria de la estación.

El problema era el presentimiento de que algo iba a ir mal hoy. Habíamos revisado la nave no fuera que hubiéramos olvidado ultimar los preparativos pero todo estaba en orden. La mercancía estaba en su sitio. Cero polizones a bordo. Bueno… Seguro que era la cena de la última noche, una insulsa mezcla de sustancias viscosas cuyo aspecto se asemejaba vagamente a comida de verdad, que nos habría sentado mal. ¡Cómo para volver a esta estación la próxima vez!

Aunque nos hubiera gustado quedarnos un día más, el transporte apremiaba. Los precios no se iban a quedar eternamente fijos mientras otros mercaderes vieran que ahí había negocio. Era nuestra oportunidad para mejorar nuestra nave, una chatarra espacial que todavía no sabíamos cómo se levantaba del suelo. Pedimos permiso al centro de mando de la estación. Oímos un breve permiso concedido. Era hora de calentar motores. No había cola así que cuanto más rápido saliéramos, antes llegaríamos. Una vez con los motores a máxima potencia, nos alineamos con la salida de la estación y esperamos pasar por el estrecho hueco sin rozarnos. ¡Maldita economía del espacio! De repente, oímos que algo se resquebrajaba a la vez que experimentamos un fuerte golpe que nos tiró a todos al suelo. La nave giraba sin control, mientras las paredes de la estación se acercaban rápidamente a nuestra posición. Y de repente, todo negro.

Un poco dramatizada, ésta fue mi primera experiencia después de los tutoriales con Elite Dangerous. Seguro de saber cómo sacar a una nave de una estación espacial, sales con confianza para encontrarte con otra nave que justo está entrando por el mismo sitio que tú y no has visto. Vamos embalados y pasa lo que pasa: choque frontal, la cabina destrozada, sin seguro de mis recién adquiridas mercancías, convertido en escombros espaciales y sin un céntimo en nuestros bolsillos. Un comienzo fulgurante para nuestra carrera galáctica, ¿no creéis?

Pero antes de seguir relatándoos nuestras aventuras, queremos decir que abordar un análisis de una obra como Elite Dangerous es tarea difícil. Ya no sólo es que se hayan atrevido a recrear toda la Vía Lactea dentro de un juego a través de la generación procedural (primera aplicación de la técnica en el ámbito de la simulación espacial a la espera de los hypeantes Star Citizen y No Man’s Sky), sino que los mecanismos que rigen esta vasta inmensidad nos dejan perplejos la primera vez que los tocamos, obnubilados frente a datos de rutas comerciales, la ley de oferta y demanda que dependen de las diversas categorías de productos, y la inmensidad del espacio ante nosotros. Si no sois de echarle a un juego horas, alejaos de éste lo más lejos posible porque 1) es un agujero negro de tiempo; 2) se necesita mucha experiencia para dominar todo lo que oculta Elite Dangerous. Estos diarios de vuelo intentarán dar una pequeña visión de lo que os aguarda en la creación de Frontier Developments, desde la perspectiva de un jugador cuyo contacto con los simuladores espaciales ha sido relativamente escaso. A los que ya hayan echado horas a las versiones previas, estos no les servirá de nada. Para aquellos que estén indecisos, pueden ser una buena guía de lo que os podéis encontrar.

Elite Dangerous Screen 2

Antes de llegar a ni siquiera a despegar de una estación espacial, es necesario familiarizarse con el sistema que tendremos que manejar en el futuro sin ayudas. Los tutoriales se presentan en unos magníficos vídeos de Youtube en lo que todo se explica… en perfecto inglés sin subtítulos. Podéis echarles un vistazo aquí pero aviso que vais a tener que desempolvar vuestros conocimientos de la lengua de Shakespeare y poner el oído y la vista al servicio de la creación de Frontier Developments. Si no tenéis un nivel medio-alto de inglés, olvidaos de Elite Dangerous hasta que llegue la traducción al español (que en un principio habría debido estar para el lanzamiento oficial) aunque también podéis empaparos de las diferentes comunidades que se han formado ya alrededor del juego y que se encuentran recopiladas en este hilo del foro oficial.

Volviendo a los tutoriales, pasaremos de los conceptos básicos como el viaje a través del espacio (con dos velocidades: supercrucero e hiperespacio) hasta el combate, donde tendremos que desplegar todos nuestros sistemas, conociendo el momento justo para retirarnos, posicionarnos y coger por la cola de su nave a nuestro agresor, reduciéndolo a gravilla desintegrada. Más o menos en una hora y media, conseguimos hacer todo lo que se nos pide, así que ya es hora de surcar el universo real ya sea sólo (modalidad offline aunque necesitada de conexión a Internet para poder actualizar el estado de los planetas) o persistente (modo online donde interactuamos con otros jugadores). Nos preparamos para salir de la estación espacial sin contratiempos, ahora mucho más precavidos de lo que nos puede esperar al otro lado de la puerta del espaciopuerto. Mientras nos alejamos, empezamos a preparar los sistemas para decidir que hacemos a partir de ahora. ¿Iremos a cazar piratas? ¿Nos haremos ricos comerciando? ¿Exploraremos el espacio profundo? ¿Nos dedicaremos a la minería? Las posibilidades son infinitas y hacen del juego algo diferente según el enfoque que queramos adoptar.

Son decisiones importantes pero antes tenemos que aprender a controlar la nave y, desafortunadamente, la combinación de teclado y ratón no es una buena opción a no ser que la interiorices después de unas cuantas horas de juego (y un par de pegatinas que te indiquen qué botón hace qué). Además de tener que operar en tres ejes (movimientos izquierda-derecha, abajo-arriba y rotacionales), tenemos que gestionar los paneles de nuestra nave (con sus numerosas opciones), abrir rampas de carga, sacar el tren de aterrizaje o gestionar los sistemas de energía de la nave. Desafortunadamente, no hemos podido probar la configuración con mando y teclado pero seguramente sea menos engorrosa que teclado más ratón. Nosotros estamos pudiendo analizar Elite Dangerous con un Thrustmaster T.16000M. Uno llevaba tiempo alejado de este tipo de periféricos bastante tiempo (desde Flight Simulator X en el año 2006. ¡Casi nada!) pero el reencuentro con ellos me han convencido de que es la opción más cómoda para este tipo de género, aunque la combinación mando-teclado no creo que desmerezca el resultado final. En vuestras manos está hacer el desembolso adicional que supone el joystick además del juego, pero la inversión os puede salir rentable si le vais a echar horas y horas.

Elite Dangerous Screen 3

Después de hacernos con todos los pertrechos necesarios y sin estar seguros de nada, ponemos como destino un sistema cercano, a diez años luz, para ir familiarizándonos con lo que tendremos que hacer durante innumerables horas pero sin las ayudas del tutorial. Nos agarramos al asiento porque es hora de explorar el espacio.

Continuará en el Diario de vuelo Día 2

  1. me encantaria pillar este, pero no tengo las horas..

    aun asi, quiza solo como inspiracion por el gran diseño de interfaz que tiene, vadria la pena.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

5 × tres =