Bueno, no digo que me ha defraudado, digo esto porque esta PS Vita no me ha dado la opción de valorar si me ha gustado o no y el sentimiento que tengo ahora mismo es mas de indignación y de impotencia que cualquier otro estado anímico que exista. La razón es que esta nueva consola de Playstation sin una tarjeta de memoria es un pisapapeles de lujo. No sabe hacer nada o casi nada y lo encuentro un insulto. Tras el salto me explico.
Ya no es el hecho de bajar demos, poner música, películas, etc…. que nosotros somos unos frikis que sabemos a lo que nos atenemos y la vamos a poner a reventar. El hecho de que te gastes un dinero en un juego físico (una tarjeta de memoria) y esta no sea capaz de almacenar ni tan solo un savegame lo encuentro de la prehistoria. Pero lo puedo llegar a entender sin comprender, ya que su mas directa competencia (Nintendo, corregidme si me equivoco) le vuelve a pasar la mano por la cara cuando cualquier NDS porque sus cartuchos si hacen esto. Puedo llegar a entender, sin comprenderlo otra vez, que como antaño ya pasaba con PSX, PS2 o PSP en la totalidad de sus títulos no podías guardar la partida sin la existencia de una memoria especifica, pero si en prácticamente todos los juegos podías jugar perdiendo todos los avances al apagar la consola. Es que estas tarjetas no son capaces de funcionar sin una instalación OBLIGATORIA en una tarjeta de memoria, como en el caso de este Little Deviants es 1 MB. Así que puedes gastarte la pasta en la consola, en un juego físico (275€ +/-) y no poder jugar a casi nada. Casi nada porque lo que si podrás hacer jugar a unos tutoriales llamados Plaza Bienvenida y hacer uso de demás aplicaciones sociales como Near o Fiesta, además del navegador de internet que también merece un post aparte. Pero nada más allá porque el resto de aplicaciones sociales necesitan también de su espacio para funcionar. Es que no hay ni 5 MB para instalar la aplicación de Twitter, es una vergüenza. Y sé que muchos me lo vais a decir, «Esto ya se sabia antes de comprarla». Cierto, pero no hasta este extremo.
Y hago un esfuerzo por comprenderlo. Me digo a mi mismo que esto es un negocio y el objetivo es ganar dinero y más dinero y por eso «obligan» a gastarse más del que podíamos pensar en un inicio. Pero miro el calendario y veo que el año en el que estamos es 2012. Que tengo desde hace años una cámara digital que tiene 16 megas para hacer alguna foto sin tarjeta. Que en el cajón tengo un Mp3 comprado en los chinos por 20€ y tiene 2G de capacidad. O que el más insignificante smartphone dispone de unos 400 Mb para instalar aplicaciones o incluso incluyen tarjetas estándar de buen tamaño. Ya no entramos en dispositivos de última generación los cuales pueden tener 32G internos. No lo llego a comprender y mas viniendo de las consolas PS3 y la obligada incorporación de disco duro en todas ellas. Y me pongo en el papel del padre o madre completamente ajeno a este mundo. El cual con el lanzamiento de Invizimals, por poner un ejemplo, la chavalada se va a volver loca por la consola y todos estos padres y madres se van a llevar un ZAS en toda la boca.
Por eso estoy como estoy, esperando mi tarjeta desde UK con mi consola y mi juego Little Deviants encima de mi escritorio sin poder hacer nada con ella. Y ciertamente a mi juicio esta maquina despliega poderío en potencia y diseño, sinceramente me encanta y por eso la compro de inicio, pero creo que esta consola necesita una revisión. Debe existir un modelo con memoria interna o se debe permitir a los juegos escribir en sus mismas tarjetas para evitar esto, o de lo contrario esta batalla la tienen perdida, si es que aspiran a ganarla. Esta es mi primera impresión.