Hoy el Bricogamer es especial, ya que es el primero en el que, servidor, he participado a su creación. Como parte de un regalo de aniversario, se decidió que se podía regalar al homenajeado una Raspberry Pi corgada de emuladores retro, pero faltaba la parte más importante: ¿le dábamos la caja al cual o nos lo currábamos un poco? la respuesta, en este Bricogamer.
Todo empezó con la idea de colocar la Raspberry dentro de un cartucho de Alex Kidd, el destinatario se desvirgó en el mundo gamer con el, pero tras ver tutoriales y resultados se desechó la idea por meterla en la propia caja del juego. Tuvimos que desecharla tambien al no encontrar un juego, ya que íbamos justo de tiempo. Finalmente decidimos metarla dentro de su primera consola: una Master System II.
Tras buscar un poco, encontramos una barata en los encantes de Barcelona, el rastro en Madrid, y nos pusimos manos a la obra.
Tras desmontarla y quitarlo todo, vimos los primeros problemas en conservar partes originales, encajar la placa e intentar cerrar la consola, ya tocaban por todas partes, así que la vaciamos completamente y empezamos la operación retro.
Encajamos la placa y le pusimos un sicronizador de mandos de Xbox 360 para que encajara con el mecanismo del botón start de la propia consola original, de esta forma los mandos de 360 se convierten en los mandos a jugar en este invento. Como queríamos que no notara nada, volvimos a colocar partes originales como el botón on-off y los conectores frontales para los mandos a base de silicona.
Finalmente le pusimos un HDMI y un cable ethernet para facilitar la entrada de roms via red, retiramos el precinto y aseguramos las piezas a la carcasa para que no se movieran en caso de golpe o transporte.
El resultado? juzgad vosotros mismos
