Mi relación con Blizzard siempre ha sido de amor odio; he sido su mayor fanboy y, casi al mismo tiempo, su mayor detractor. En Gamescom probamos Diablo 3 en Playstation 3 y nuestras sensaciones fueron un poco contradictorias y todo era caótico. Ahora, tras dos semanas de dura pelea y pillaje en Santuario, mi opinión es diferente: Diablo 3 para Ps3 es uno de los mejores juegos a los que me he enfrentado.
Un poquito de historia…
Hace ochenta años el mundo de Santuario fue salvado de la destrucción por un puñado de héroes anónimo que manejábamos en Diablo y Diablo 2; estos héroes sucumbieron a su locura tras sobrevivir al ataque de los ejercito infernales comandados por los señores del infierno: Diablo, Mefisto y Baal. Diablo 3 comienza con una cinemática del viejo Deckard Cain regresando a las ruinas de la antigua catedral de Tristam, buscando signos para derrotar el despertar del mal. En ese momento un meteorito caído del cielo, un heraldo del apocalipsis se estrella en el mismo lugar donde Diablo había penetrado en el mundo. Todos los héroes de Santuario han visto llegar el meteorito y se disponen a defender la tierra de las hordas del infierno. Tu eres uno de esos héroes. La trama de Diablo 3 gira alrededor de los dos demonios que sobrevivieron, Azmodán y Belial; y la búsqueda de la llamada «piedra del alma oscura«, parte fundamental para conseguir eliminar la amenaza de los demonios del mundo de Santuario.
Presentando a nuestros héroes…
En Diablo 3 para Playstation 3 contamos con cinco tipos diferentes de personajes para elegir, los mismos que en la edición del juego en PC:
Su estadística base es la fuerza y se alimenta de furia, una energía que acumula al recibir o hacer daño.
¿Es igual al juego de PC?
Las similitudes con la versión de PC terminan aquí. Estamos ante la misma historia y los mismos personajes, pero Blizzard ha conseguido realizar un juego prácticamente nuevo. La base era muy sólida y el tiempo lo ha demostrado, el problema era conseguir adaptar esa mecánica mezcla de hack&slash y ARPG, que se jugaba con cuatro teclas del teclado y un ratón, a un mando de consola. Y se ha adaptado de una manera maravillosa, tanto que ahora, cuando juego a otro de la misma mecánica, echo de menos el mando de consola entre mis manos.
El movimiento base del personaje se hace con el analógico izquierdo, responde a la perfección. Con el analógico derecho hacemos un movimiento de esquiva. Con X lanzamos la primera habilidad, la que más vamos a utilizar con el personaje. Con L1 nos curamos, aquí solo hay un tipo de poción y con L2 bloqueamos el objetivo. Así empezamos con el personaje en el mundo de Santuario, poco a poco al ir subiendo niveles, conseguimos desbloquear otras habilidades que se asignan a los botones cuadrado, triangulo, circulo, R1 y R2. En las opciones del juego podemos cambiar las habilidades que se asignarán a cada botón del mando si no estamos contentos con esta configuración. Como veis no se han dejado nada fuera, ni una habilidad se sale del mapeo de botones del mando de Ps3, incluso tenemos la posibilidad de pulsar la seta hacia dentro y un rayo celestial iluminará nuestro personaje, útil en el multijugador a cuatro si la refriega esta llena de enemigos. La cruceta digital aquí se utiliza para tener un acceso rápido sin pausar el juego a los objetos que hayamos conseguido mientras saqueamos el mundo.
Se ha modificado todo el sistema de inventario de nuestro personaje. Ahora los objetos ya no ocupan un número de huecos en nuestra bolsa, directamente se pasan a la zona en la que se use del equipo. Con un sistema de rueda alrededor de nuestro personaje podemos elegir la parte del equipo que queremos modificar, ahí nos saldrá lo que tenemos equipado y lo que tenemos en el inventario. El único defecto que tiene este juego es que este sistema es un poco lento y algo confuso, tenemos que pulsar cuadrado para ver las características del objeto y ver, realmente, si nos mejora o no. Tenemos un modo rápido de cambio de equipo sin tener que pausar el juego, muy útil si jugamos entre cuatro amigos, para no romper la dinámica; con el digital movemos arriba y abajo el equipo que hemos saqueado y nos saldrán tres características: ataque, defensa y salud con una flechas verdes o rojas. Muy rápido y sencillo, aunque algunas veces es mejor parar el juego para ver qué equipo es el mejor para cada uno de los componentes del grupo. Este tipo de pausas son necesarias y las tendremos que sufrir cada vez que queramos vender o cambiar algo del inventario, o más importante aun, cuando conseguimos habilidades nuevas y queremos equiparlas. Aun con todo no se hace pesado e incluso se agradece un pequeño parón para descansar de tanta muerte demoníaca.
El aspecto técnico…
En algunos momentos vemos algún pixelado en los vídeos de presentación de los personajes o en los que nos describen la historia tras Diablo 3, sobre todo en algunas transiciones rápidas. Se lo podemos achacar a la velocidad de lectura del lector, o de mi propio lector en sí. No es un defecto mayor y es posible que no te hayas dado cuenta al quedarte totalmente embelesado con la calidad de las cinemáticas de Blizzard. Son unos auténticos genios en este apartado, demostrando año tras año que son los número uno en este sentido.
En el apartado gráfico es juego está un peldaño por debajo de la versión de PC en lo que corresponde a definición, 720p contra 1080p o superiores de PC. De todas formas la definición del juego es muy buena en una televisión de 42 pulgadas. Los efectos especiales, luces, rayos, etcétera están a un nivel muy alto y hacen de Diablo 3 un juego espectacular. Vemos en pantalla a más de 20 enemigos, nuestros cuatro héroes y mil trozos de demonios saltando por los aires al utilizar nuestras habilidades más avanzadas y todo esto sin una sola ralentización.
En el sonido, Blizzard ha reutilizado algunos de los samples y efectos que se usaban en los anteriores Diablo, es un guiño a la franquicia que se agradece. La música es épica y una maravilla para los oídos, no nos aburriremos del apartado musical por muchas horas que le echemos al juego.
¿Se ha modificado la jugabilidad?
Ahora diablo 3 es mucho más intenso que en la versión de PC, más rápido y sentimos a nuestros personajes mucho más poderosos. Casi se podría decir que es un hack&slash con perspectiva fija, casi lo asemejaría a la jugabilidad del antiguo Gauntlet de máquinas recreativas. Esta adaptación de Blizzard es mucho mejor que la versión de PC, más atractiva para los no iniciados e igualmente adictiva. Además hay que añadir el concepto de rejugabilidad que tiene Diablo 3, uno de los únicos juegos del mercado en los que no te aburres de darle vueltas a los cuatro actos. Tenemos cuatro modos: normal, pesadilla, infierno y cuando lleguemos con un personaje a nivel 60, averno. Así mismo ocho niveles de dificultad que afectan a los enemigos y al loot (los objetos que caen): fácil, normal, difícil, maestro I, maestro II, maestro III y maestro IV. Juntamos los cinco personajes tan diferentes entre sí, los logros, los retos que cada personaje tiene para desbloquear partes de su estandarte y para colmo, el modo incondicional: personajes con muerte permanente. Podemos sumar opciones de juego únicas como las refriegas, matar monstruos o el modo guardián de la llave. Este Diablo 3 tiene horas de diversión aseguradas, tanto solo como acompañado donde todo se potencia por el número de jugadores activos en la partida.
Y si juegas solo, en cualquier momento puedes pausar el juego y activar la partida abierta o solo con tus amigos. Incluso hay modo LAN en red local si hacemos una party de Playstation 3 conectadas entre sí.
El sistema de loot se ha modificado en esta versión y desde la primera vuelta tendremos acceso a objetos legendarios o épicos raros. Lo normal es que a nivel 20 tengamos un personaje nivelado con todas sus opciones disponibles para lidiar con los monstruos de su nivel, sin un salto de dificultad demasiado grande y que sí veremos al llegar al final de la primera vuelta. Aquí la cosa empieza a ponerse complicada, pero Blizzard con el nuevo sistema de objetos, no nos obligará a repetir una y otra vez la misma zona para conseguir ese equipo necesario para pasar una zona con facilidad como si pasaba con la versión de PC.
¿Tiene lo malo de la versión PC?
Como ya hablamos el otro día, Blizzard se ha dado cuenta de sus propios errores. No tenemos la necesidad de tener cuenta de Battle.net ni de tener la consola conectada a internet para jugar. Podemos jugar a Diablo 3 offline perfectamente, solucionando uno de los problemas más conocidos del juego en PC: los cuelgues del servidor. Sumamos que no hay casa de subastas online, el verdadero lastre de Diablo 3 en PC. Como veis todo lo malo o negativo de la versión para compatibles se ha corregido para hacer de Diablo 3 un juego más dinámico y directo, primando el «loteo» (objetos conseguidos de los enemigos) de los objetos conseguidos por el jugador.
Conclusiones
Blizzard ha conseguido que Diablo 3 en consola sea el mejor RPG de acción multijugador y el más rejugable que hay en el mercado. La manera de cambiar el concepto de control point and click de Diablo 3 en PC por un sistema más cercano al hack&slash típico de consola ha sido todo un acierto y uno de los motivos que hace de este juego una obra maestra de la jugabilidad. Sin duda, a partir de ahora no podré jugar de otra manera a este tipo de juegos que no sea con el mando de la consola. Blizzard ha conseguido demostrar que los juegos de PC, que hace algunos años veíamos tan lejos de las consolas, pueden ser viables en nuestras maquinas de sobremesa. Solo hay que ponerles el mismo mimo a los detalles como han hecho con esta versión del juego original, que en mi humilde opinión, es superior a la versión original por ritmo y jugabilidad.
Chapó Blizzard, te has vuelto a ganar mi admiración. [95].