Tras su paso por Playstation Network, la red de PlayStation 3, llega a nuestras portátiles la versión ampliada de Fat Princess – The Faistfull Cake, un adictivo y divertido juego de la compañía SuperVillain Studios. Fat Princess es un juego totalmente atípico en el que tu no eres el protagonista, no eres un héroe, no eres un gran o poderoso mago, ni un futuro espadachín que salvará al mundo, eres uno más del montón y debes cumplir tu tarea.
La historia, contada a modo de cuento infantil, narra los problemas entre 2 reinos rivales desde el día en que sus princesas caen presas de una maldición que las hace devorar pasteles sin control.
Por ello, los reinos se enzarzan en peleas y guerras para conseguir una cura para tal terrible maldición y porque básicamente se están quedando sin alimentos a causa de lo tragonas que son sus princesas.
Al iniciar cada misión empezaremos siendo una aldeano básico en el castillo, pero con tan sólo acercarnos a las maquinas que suministran sombreros o recoger uno del campo de batalla y ponérnoslo nos transformaremos en esa clase seleccionada. Las unidades las componen artilleros, guerreros, magos, clérigos y constructores.
De este modo mientras los clérigos y magos se basan en los ataques mágicos, los artilleros y guerreros forman la fuerza bruta de tu reino, mientras que los constructores facilitan la construcción mas variada posible, desde escaleras para asaltar el castillo rival a puertas de defensa o trampolines. Todas las clases tiene 2 niveles de evolución, el básico y el avanzado.
Para evolucionar una clase hay que mejorar la máquina que suministra dichos sombreros con madera y piedras, ampliamente esparcidas por el campo de batalla, que los constructores son capaces de recoger. Una vez tengamos la clase avanzada podremos variar, según queramos, entre la clase básica con la avanzada al apretar un botón.
En todos los campos de batalla existen puestos de avanzada que suministran refugio temporal, así como enlaces o atajos a tu castillo sin tener que recorrer todo el mapa, además de atajos naturales como cuevas e incluso la posibilidad de fabricar catapultas para sobrevolar medio mapa.
También encontraremos trozos de pasteles que deberemos dar a nuestra princesa para hacerla subir de peso, ya que cuanto más pese, mas difícil le será al enemigo secuestrarla de lo gorda que esta.
Los 2 bandos también cuentan con una fuente que suministra una poción especial, que al ser lanzada, crea un ataque de área que transforma, tu incluido si no corres lo suficiente, en gallinas. Los terrenos son variados geográficamente y debemos tener cuidado con las mareas o podemos morir ahogados.
El juego consta de 3 modos:
Historia: El modo historia en forma de 15 capítulos.
Gladiador : Es el típico modo survival en una plaza redonda.
Online: Donde poder jugar escenarios con jugadores vía red
Las misiones en el modo historia son de lo más variadas, desde acabar totalmente con el enemigo, hasta secuestrar la princesa enemiga pasando por construir un templo mas rápido que el rival.
No existen enemigos de fase o fases de bonus, aquí no hay tiempo que perder, ya que la rapidez de la fase la decides tu: si optas por construirte todo iras mas lento, pero si optas por ir al modo kamikaze, te aseguras menos tiempo de fase… aunque aquí el tiempo no puntúa.
En el modo Online podremos encontrar hasta 9 o 10 modos diferentes para jugar con nuestros colegas o a través de la red, que os garantizo que es desternillante y estresante a la vez.
Podemos escoger las misiones del modo historia contra uno o varios jugadores en modo Had-hoc o unirnos o crear partida en el modo infraestructura.
Los gráficos dentro del juego son normales y no esperéis vídeos o cinemáticas, no hay. La mezcla entre el 3D y el dibujado de los personajes (estilo Worms) convierten todo en algo muy atractivo y muy vistoso, por lo que es realmente fácil adaptarse a los mapeados. Dentro de las batallas veremos bastantes animaciones, tanto de los personajes como el terreno, que mejoran el juego, incluso llegareis a ver la sangre salpicar por el suelo al acabar o golpear al enemigo.
La introducción a cada capitulo, con sus correspondientes dibujos, consigue que no pierdas el interés por el cambio de misión y este acorde a la historia que sigue el juego.
El sonido es discreto y a pesar que cada mapa tiene su propia musical de tono medieval, pasa muy desapercibido por los comentarios que va lanzando tu personaje en ciertas ocasiones. Durante las batallas una voz en off te informa de los principales eventos a ambos lados y aunque en todo momento ayudan, puede llegar a ser algo cansinos y repetitivos.
El control es sencillo, solo necesitas 4 botones para jugar y crea una adicción endiablada, que sin darte cuenta estarás diciéndote, sin éxito, un capitulo mas y lo dejo que llego tarde.
Un punto negativo es que se os puede hacer corto, cosa que al no haber ningún pack de expansión o parecido, que yo sepa, a un juego que podría alargarse perfectamente te quedas con ganas de más.
En ocasiones encontrarás desesperante entrar en los torreones o puestos de avanzada, no se si por la la puerta o mala implementación. Otro punto que desmejora el juego es la dificultad que puedes encontrar para unirte a una partida online.
En su favor cabe destacar el sistema de carga de partidas, al no ser un juego competitivo, siempre sobreescribe la partida y al cargarla se agradece, ya que tarda poco y no hay que seleccionar nada, aprietas cargar y listo. Una gran libertad a la hora de plantear la misión o la táctica a seguir y una jugabilidad caótica que engancha desde el primer momento.
Fat Princess es un juego muy bien explotado, original en concepto y guión, que crea una fuerte adicción y que a pesar de no ser gráficamente un portento, es de los más divertidos y caóticos que he jugado en tiempo. Altamente recomendable y si jugáis online os aseguro risas.