Infinity Danger es un shmup tan sencillo como adictivo

Desde pequeñito uno de mis géneros favoritos siempre ha sido el del los Shoot’em Up (últimamente más conocidos como Shmups). Durante unos cuantos años atrás estos juegos han escaseado, pero parece que en el último par de años están empezando a resurgir gracias a los desarrolladores indie. Así que cuando vi Infinity Danger, me llamó mucho la atención.


Es un juego para dispositivos iOS desarrollado por Milkstone Studios. Por lo que he podido ver está disponible también para PC y Xbox Live, pero yo lo he conocido en su versión para móviles, que es a la que he estado jugando.

Se trata de un juego bastante sencillo. Con el dedazo gordo izquierdo controlamos la posición de la nave y con el derecho la dirección del disparo. No es necesario mantener pulsado este último, puesto que recuerda la última dirección y se mantiene disparando hacia allí. El movimiento de la nave es sencillo pero cuesta un poco acostumbrarse al control del disparo. No siempre apuntaremos a donde queremos al principio. Pero en un par de partidas ese problema se soluciona.

El juego se limita a una sucesión de jefes finales. Aquí no hay enemigos de relleno. Nuestro objetivo es destruir el núcleo de los enemigos, que está rodeado de un montón de piezas que se colocan de forma procedural en función de nuestro comportamiento en los jefes anteriores. Si nos elimina muchas veces un tipo de armas, el siguiente jefe tendrá más armas de ese tipo, por ejemplo.

Antes de cada jefe se muestra un gráfico que indica la potencia de fuego de cada tipo de arma que monta así como su nivel de movilidad, armadura, torreta y disparo, para que nos hagamos una idea de a qué nos vamos a enfrentar. En cada nueva partida comenzaremos desde cero, contra el jefe más básico y deberemos eliminar al mayor número de enemigos posibles para escalar en la tabla de puntuaciones online.

No tendremos un máximo número de vidas, pero sí un tiempo límite para derrotar a cada enemigo y cada vez que recibamos un impacto ese tiempo bajará de forma considerable. Así que nuestro fin de partida será cuando se nos agote el tiempo. En la siguiente partida volveremos a empezar en una serie de jefes diferente por la forma en que estos se crean.

Es un juego rápido y muy entretenido para los que les guste el género. No tiene demasiada profundidad, pero es perfecto para una partida rápida… o dos. [80]