Los muertos no son lo único sin vida en Murdered: Soul Suspect

Muchos son los «Triple A» que han visto su lanzamiento retrasado hasta 2015. Por esto los pocos títulos con grandes compañías detrás deberían hacer más ruido de lo habitual, algo que no parece haber afectado a Murdered: Soul Suspect desarrollado por Airtight Games y distribuido por Square-Enix, que ha llegado a las tiendas sin hacer demasiado ruido.

La aventura comienza con una extensa cinemática introductoria para dejar claro quien es nuestro personaje y como ha empezado su aventura. Ronan O’Connor es un detective del SPD o Cuerpo de Policía de Salem; un trabajo llamativo para un joven que se crió en las calles, robando y metiéndose en todo tipo de líos. Un tiempo después del fallecimiento de su esposa le tocaría a él correr el mismo destino, en plena investigación Ronan es asesinado ante nuestros ojos pero para su sorpresa ese no es el final del camino, si no el inicio de la investigación más importante de su carrera, la de su propio asesinato.

Así es como llegamos a ser un ente incorpóreo que tiene la capacidad de atravesar objetos, poseer humanos y realizar todo tipo de peripecias sobrenaturales para descubrir los secretos que el pueblo y los habitantes de Salem ocultan. Como fantasma que somos no podremos hablar con los seres vivos pero si manipularles para leer sus mentes e influenciarles para que hagan una determinada acción necesaria para avanzar en nuestras investigaciones. Esto no quiere decir que Ronan vaya a pasar toda la aventura sin mediar palabra, podemos charlar con los muchos espíritus con asuntos pendientes que pueblan el «otro mundo» en Salem, bien para obtener información o para ayudarles a cruzar al otro lado resolviendo sus asesinatos.

Si vais en busca de algo de acción este no es vuestro juego, en Soul Suspect se prima la exploración de entornos cerrados, la obtención de pistas e información y la conversación con otros personajes del entorno. Todo esto lo hemos visto funcionar a las mil maravillas en cientos de aventuras en tercera persona. Si tuviéramos que comprar Murdered con algún otro título similar de publicación anterior posiblemente lo haríamos con cualquiera de los últimos Sherlock Holmes, aclarando, claro está, que Murdered: Soul Suspect es una versión para niños de los trabajos de Frogwares.

Avanzar en la trama y resolver los problemas, tanto primarios como secundarios, que se nos plantean es una labor mucho más sencilla de lo que nos gustaría. Las zonas a explorar son demasiado pequeñas, los errores no nos penalizan lo suficiente como para que nos importe no dar con la respuesta correcta a la primera y para colmo cada objeto o pista repartida por el nivel tiene un brillo que facilita mucho su obtención. Todo en este desarrollo parece elaborado con demasiada prisa y muy poco mimo, un producto fácil de digerir sin alardes de personalidad evidentes.

A la escueta profundidad jugable debemos sumar un argumento que no se desarrolla en el tiempo tanto como nos gustaría. La cuidad de Salem ha estado plagada de misterio y oscurantismo desde la caza de brujas que allí tuvo lugar en el siglo XVII. Esto no se ha aprovechado tanto como se podría esperar en un juego protagonizado por un espíritu. Tampoco se le ha sacado provecho al archienemigo de la historia, el Campanero (una mala traducción de El Asesino de la Campana) es un asesino en serie buscado por cometer crímenes atroces, lo que podría haber dado para escenas de gore o momentos de verdadero terror adulto que en Airtight Games deben de haber obviado para no plantar un +18 en su juego y cubrir una cota de mercado mayor.

En los apartados técnicos Murdered: Soul Suspect consigue una armonía perfecta con su guión y su jugabilidad, es decir, se queda en los mínimos aceptables para conseguir no destacar en absoluto. Estamos muertos, eso significa que la mayor parte del tiempo veremos el «plano espectral» de la ciudad de Salem, lo que visualmente se traduce en un juego gris y azul casi la mayor parte del tiempo, consiguiendo que terminemos cansados de pasear por entornos apenas inspirados. Más hiriente es el caso de los ciudadanos de Salem, modelos que se repiten hasta a saciedad y que se transportan de una zona a otra en cuanto giramos la cámara, amén de sus pésimas animaciones que hacen que no queramos mirarles mientras nos hablan para poder creernos algo de lo que nos dicen.

Las composiciones musicales brillan por su ausencia, en nuestro largos paseos apenas nos acompañarán un par de sonidos que intentan dar un enfoque lúgubre a nuestro viaje y en determinados momentos la música se animará a sonar un poco más alto para intentar destacar, desgraciadamente la olvidaremos pasados unos segundos. Un detalle que debemos agradecer es que el juego haya venido completamente doblado al castellano, algo necesario ya que el doblaje original no parecía convencer demasiado a muchos jugadores. Tampoco es que el doblaje a nuestro idioma sea excepcional, de hecho en más de una ocasión no entenderemos el tono de una conversación por estar totalmente fuera de lugar, pero agradecemos el esfuerzo en localizar el trabajo a nuestra lengua.

Hasta aquí todo han sido palos, lo reconozco, pero no vayáis a pensar que Murdered: Soul Suspect es un juego terrible y del que debemos alejarnos inmediatamente, ni mucho menos. Se agradece una propuesta de juego pausado donde lo importante no es la acción, si no la historia que se nos cuenta y que puede atraer más o menos, algo que ya depende más de cada jugador. De lo que adolece esta obra es de falta de ambición, no sabemos si por falta de presupuesto, de tiempo o por querer aprovechar la retirada de otros competidores al año que próximo, lo que si sabemos es que habríamos querido algo más. [60]