Después de muchos anuncios al respecto, Square-Enix nos trae la 3ª entrega de la saga Parasite Eve, que poco tiene que ver con la saga, para la portátil de Sony, en un juego que promete acción y disparos
La acción nos sitúa en el 2012, donde una invasión de plantas gigantes y monstruos ha asolado la ciudad de Manhattan. Aya, con ayuda de sus compañeros, deberá detener esta invasión y para ello retrocederá en el tiempo hasta el 2010 y detener la invasión desde el punto 0. Para ello, Aya no se teletransporta directamente, sinó que traslada su mente a un cuerpo de esa época y toma posesión del cuerpo. Esta habilidad, propia de los poderes de Aya y accesible durante el juego, nos permite acceder a zonas del decorado mas rápidamente, sobrevivir si nuestro cuerpo actual muere o atacar desde varios puntos a la vez.
El título se presenta en forma de 7 episodios, con cinemáticas antes, después y durante cada episodio para explicar mejor la trama y enlazándolo con sus lagunas mentales y falta de recuerdos. La acción está planteada en 3ª persona con el apuntado en la típica cámara encima del hombro, por lo que la vista general del escenario siempre es bastante buena, hasta ahora no he encontrado ninguna cámara que estorbe mas de lo normal.
The 3rth Birthday es un tactical-action RPG, es decir, sobrevive mientras disparas y evolucionas. Y digo evolucionar, que no mejorar, porque, durante el juego, las mejoras de nuestro personaje se hacen a través de la modificación de nuestro propio ADN. Cada monstruo que matemos, nos dará unos chips que podremos implantar o substituir en una zona de nuestra cadena de ADN, proporcionando mas vida, resistencia, habilidades etc, según la combinación de chips que hagamos y el resultado final del ADN.
Durante el juego y según el ADN que tengamos nuestras habilidades aumentan o disminuyen, pero los poderes básicos de Aya no variaran: podremos ursurpar cuerpos humanos (militares o civiles) y hacer sondeos ¿mentales? a los monstruos, que debilitarán o incluso matarán a dicho enemigo. Esto último es posible cuando estemos atacando a dicho monstruo, encima del enemigo aparecerá una señal amarilla que indicará que podemos intentar un ataque mental. Nuestra última habilidad es el «Overdive», una especie de estado máximo en el que nos transformaremos en una máquina de matar, donde nuestros disparos serán mas letales, directos y contundentes.
El hecho que casi siempre estemos acompañados por las fuerzas militares hace que podamos dirigir un ataque combinado con los soldados que sigan vivos en las proximidades. Aya dará la orden y todos los soldados atacarán al objetivo que hallamos marcado mientras dure la barra de energía de esta habilidad. Existe un sistema de coberturas que recordarán a otros juegos y a pesar que casi toda la acción pasa en el suelo, en alguna ocasión nos podremos subir a algún vehículo para dar un poco de descanso a nuestros pies.
Un detalle curioso es que según vayamos recibiendo heridas la ropa de nuestra protagonista irá rompiéndose, nunca dejaremos a Aya desnuda, tranquilos, indicándonos así la cantidad de heridas recibidas. Durante las transiciones podremos comprar o reparar la ropa de nuestra protagonista, si queremos.
El juego posee unas cinemáticas dignas de mención y muy potentes para la pequeña de Sony. El sonido es bueno aunque no destaca mas allá de lo habitual, sonidos, explosiones etc. Aunque la acción está planteada en 3ª persona con el apuntado en la típica cámara encima del hombro, por lo que la vista general del escenario siempre es bastante buena, hasta ahora no he encontrado ninguna cámara que estorbe. El ritmo de juego sube a medida que vayamos dominando el cambio de cuerpo, llegando a no parar quieto y eliminando grandes hordas de bichos rápidamente.
Como nota negativa podríamos decir que no sigue la linea argumental de las anteriores sagas, así como un acabado que no destaca mucho. En ocasiones una dificultad mas de habilidad en cambiar de cuerpo que la propia dificultad del juego y, en ocasiones, relantizaciones debido a la carga de muchos enemigos en pantalla. Como positiva la jugabilidad es altamente adictiva y el cambio de cuerpo nos ofrece una alternativa de juego muy interesante. El culo de Aya, a traves de la ropa rota, siempre alegra la vista
Personalmente me ha sorprendido gratamente el ritmo de 3rth Birthday juego y la jugabilidad, y sinceramente me ha picado mucho el juego. Recomendable para aquellos que buscan una survival horror con acción y sin ganas de preguntarse mucho porque una abeja mutante de 10 toneladas vuela y dispara rayos. [7]