Como ya os anunciamos la semana pasada, en AKB vamos a comenzar a analizar algunos de los productos Razer para todos aquellos que estéis pensando en compraros algún periférico para vuestro PC, MAC o Xbox 360. Para estrenarnos, hoy os traemos el análisis del ratón Razer DeathAdder, que resultará interesante sobre todo para los amantes a los FPS.
Lo primero que vamos a detallaros son las características técnicas del ratón y luego las sensaciones que hemos tenido con su uso:
– Sensor infrarrojo 3.5G de 3500 ppp Razer Precision
– Diseño ergonómico para diestros
– 1000Hz Ultrapolling / tiempo de respuesta de 1ms
– Cinco botones Hyperesponse programables independientemente
– Ajuste de sensibilidad inmediata On-The-Fly Sensitivity
– Modo siempre encendido Always-On
– Botones extra grandes antideslizantes
– Trayectoria de datos súper amplia de 16 bits
– Aceleración de 15 g y hasta 152,4 – 304,8 cm por segundo
– Bases de Zero-acoustic Ultraslick
– Conector USB dorado
– Protector de cable de fibra trenzada
– Tamaño aproximado: 128mm (largo) x 70mm (ancho) 42,5mm (alto)
Como veis se trata de un ratón bastante completo con la posibilidad de llegar a los 3.500 dpi. Lo primero que me ha gustado del ratón ha sido su diseño ergonómico que resulta tremendamente cómodo para su uso. Además de su diseño, en su comodidad influye también el tamaño de los botones (sobre todo los dos laterales que en muchos ratones suelen ser excesivamente pequeños) y el peso, bastante equilibrado aunque un poco más pesado que algunos ratones con los que he jugado (algo que particularmente me agrada aunque esto ya es cuestión de gustos).
A la hora de probar el ratón hemos echado unas partidas a Battlefield 3, Hawken y el siempre eterno Counter Strike Source. En general me he encontrado con un ratón muy preciso. Como siempre, he tardado un tiempo en acostumbrarme al mismo y he ido probando diferentes configuraciones, aumentando y reduciendo el número de dpi y la sensibilidad del ratón en el juego hasta que he encontrado una de mi agrado. En cuanto han pasado unos minutos y he encontrado el punto dulce a su sensibilidad (aquí podríamos entrar en el eterno debate de si se notan los 3500 dpi y otras cuestiones técnicas que, sinceramente, creo que dependen del gusto de cada jugador) me he encontrado con un control suave y preciso que reacciona muy bien tanto a los movimientos suaves como a los bruscos, encontrando una excelente respuesta en todos ellos.
Dado su número de botones y su diseño tan ergonómico el ratón está claramente pensado para disfrutar de los juegos de acción o FPS y no para títulos más complejos como los MMO, aunque para este género Razer también cuenta con sus propios ratones.
Ahora vamos a hablar un poco de los pequeños detalles, como el conector USB dorado que mejora la conexión con el PC, el cable que se encuentra protegido por una cubierta de fibra trenzada o la iluminación del ratón, que cuando está conectado deja ver el logo de Razer en un azul oscuro que va ganando o perdiendo intensidad en un intervalo de segundos lo que hace un efecto verdaderamente bonito. Esto, seguramente, poco os importará a muchos de vosotros (a mi sinceramente tampoco) aunque hay que decir que todos los añadidos que vengan a mejorar el dispositivo o a hacerlo más chulo son bienvenidos.
Por último comentar que, pese a que Windows reconoce inmediatamente al ratón y permite su uso, para disfrutar de todas las características del mismo (guardar diferentes perfiles, modificar dpi o aceleración…) deberemos bajarnos el programa de Razer que está disponible en su página web. El programa es completo y de un uso sencillo e intuitivo, aunque hemos de decir que se hubiera agradecido bastante que se incluyera un CD acompañando al ratón para ahorrarnos bajarlo o para poder instalarlo en el caso de que no tengamos conexión a internet.
Conclusiones
El ratón Razer DeathAdder 3500 me ha convencido para su uso en los FPS, tiene un peso que es de mi gusto, resulta tremendamente cómodo, reacciona como es debido y resulta tremendamente preciso. El único inconveniente que le he visto (siendo quisquilloso) es que no incluye un CD para instalar el programa que nos permite sacarle el máximo rendimiento al ratón, aunque, en los tiempos que corren es raro encontrarse a un jugador de PC sin conexión a internet permanente, pero sinceramente, se hubiera agradecido el detalle, aunque, evidentemente, no por este pormenor dejaría de recomendar este DeathAdder que, en su versión más moderna con un sensor que alcanza los 6400 dpi solo cuesta 62 €, bastante barato para la calidad que atesora y comparado con otros ratones.