¿Eres de los que de verdad cree que el tamaño no importa? ¡Iluso! Importa y mucho. Pero al contrario de lo que se piensa, ser pequeño puede ser incluso mejor… ¿o acaso no has oído que más valen pequeñas y juguetonas?
Y eso es lo que conforma la razón de ser de Ratchet & Clank en su primera aparición para la portátil de Sony, el jugar con las medidas y tamaños para entrar por agujeros pequeños, el hacerse grande para acabar con los enemigos. El tamaño importa y mucho, porque por primera vez Ratchet y su casi inseparable Clank son de bolsillo, pero a su vez son grandes, y mucho, porque, sinceramente, El tamaño importa es uno de los títulos más atractivos del catálogo de PSP. Y es que actualmente sólo hay un título de plataformas que pueda hacerle frente en la portátil de Sony: Daxter, otra franquicia que ha dado el salto desde PS2 y que probablemente sea uno de los mejores títulos de esta generación portátil.
La aventura comienza cuando los dos protagonistas, que se encuentran disfrutando de un merecido descanso estival en las afrodisíacas playas de Pokitaru, mojito en mano, tumbados a la bartola, son despertados por una joven fan de Ratchet, quién inocentemente se les acerca pidiendo una fotografía de su ídolo. Ser famoso es lo que tiene, que te acosan vayas donde vayas y resignado ante la ilusión de la impúber admiradora, Ratchet comienza a posar por toda la isla mostrando su estilo. Todo se termina de fastidiar cuando los archienemigos de nuestra pareja, que no descansan ni por Semana Santa, deciden secuestrar a la jovencita, momento en el que, inevitablemente, los protagonistas deben poner punto y final a su descanso.
Gráficos
Espectaculares. Simple y llanamente soberbios. Es cierto que no llegan al nivel de Pon tu arsenal a tope, tercera entrega de la franquicia en PS2, y que se nota que tanto el nivel de las texturas como el tamaño del mapeado son inferiores, pero poco puede importar el ligero descenso de calidad cuando se han convertido tan magníficamente los gráficos a una versión portátil.
Si hubiera que destacar algún aspecto en concreto, me quedaría sin duda con las secuencias cinemáticas, realizadas con el propio motor del juego, repletas de sentido del humor y que nos muestran unos personajes con una gran expresividad facial que les acerca a los cartoons de toda la vida, con personajes irrepetibles como el Capitán Qwark, un auténtico friki con dentadura profidén que nos hará esbozar más de una sonrisa.
El motor gráfico es muy suave y salvo una cámara que, pese a permitir varios arreglos en el menú de opciones para que resulte lo menos incómoda posible, es el aspecto que peor resuelto está en la versión portátil (se mueve con los gatillos, que obviamente no son tan cómodos como un stick analógico), el engine funciona a las mil maravillas. El tamaño de los escenarios, sin ser colosal, es aceptable y a pesar de su linealidad, a nivel grafico se comporta como un auténtico titán, sin caídas en la tasa de cuadros por segundo y mostrando simultáneamente un buen número de enemigos.
El apartado artístico no sorprende tanto puesto que la mayoría de elementos, enemigos y escenarios han sido ya visionados en las entregas que han aparecido en PS2, aunque no por ello se debe dejar de elogiar el trabajo realizado con algunos enemigos y con el peculiar armamento que acompaña a Ratchet. Los decorados también son calcados a los de la tercera entrega de PS2 y guardan muchas similitudes con los primeros videos que Sony ha liberado de su futura versión para PS3.
Sonido
Aunque el número de melodías que aparecen contenidas en el umd sea más bajo que en otras versiones, el trabajo en cuanto a los efectos de sonido está a la misma altura que el resto de versiones, con unos fx que son seña de identidad de la franquicia y donde destaca el sonido del armamento. Ver a un puñado de robots enfurecidos golpeando a un enemigo mientras emiten sus zumbidos y gruñidos no tiene precio.
Tampoco lo tiene el doblaje al castellano, perfecto; y es que aunque no se suela reseñar en la mayoría de análisis, existen doblajes al castellano que no están a la altura pero que no se critican por miedo a que posteriores entregas no vengan en nuestra lengua. Pero en esta ocasión no; las entonaciones, el ceceo de la niña raptada y la personalidad de las voces gozan de un nivel muy alto.
Jugabilidad
La esencia de la saga se mantiene viva en PSP. Ratchet & Clank es un título de plataformas donde éstas no son el factor primordial, sino que el uso del armamento para resolver situaciones y acabar con enemigos gozan de tanta importancia como el no caer al vacío al pasar de una plataforma a otra. La diversidad y variedad de situaciones se plantea a través de varias carreras que efectuamos a bordo de un propulsor similar a una tabla de skate y en otras misiones en las que debemos ir disparando en una especie de shooter sobre raíles. Y por si esto fuera poco, tendremos la opción de controlar a Clank quien por su tamaño y habilidad para controlar otros robots, tendrá que resolver en solitario algunas misiones.
La mecánica de juego es bastante sencilla; controlamos con el pad analógico al personaje que toque y disponemos de un botón para saltar, dos para usar las armas (la clásica llave inglesa y el arma secundaria que hayamos seleccionado en el menú) y un cuarto botón para elegir de forma rápida que arma secundaria queremos llevar encima. A su vez los gatillos sirven para mover la cámara alrededor de la acción, lo que probablemente sea el aspecto que peor se ha llevado a la versión portátil. La cámara es muy incómoda, muy cercana y cuesta moverla, por lo que nos deja vendidos en muchas situaciones, sobre todo cuando somos rodeados por un numero elevado de enemigos. Tal vez una cámara automática le habría venido mejor, pero es lo que hay y debemos adaptarnos lo mejor posible.
Por lo demás el juego se controla bien; las armas gozan de la importancia característica y las hay tan delirantes como un grupo de robots en miniatura que atacan como pitbulls a los rivales o una especie de regadera que hace crecer una especie de plantas carnívoras que nos ayudarán a resolver algunos puzzles. No son tantas ni tan variadas como en Pon tu arsenal a tope pero para la mayoría de jugadores serán más que suficientes.
El desarrollo del juego es bastante lineal, hay un camino prefijado que debemos seguir, a pesar de la variedad de las situaciones; resolvemos una misión, encontramos un rastro que nos aporte algo de luz sobre el paradero de la joven raptada y volamos con nuestra nave espacial al planeta en cuestión en busca de nuevas pistas. Durante la aventura iremos progresando en el equipo que llevamos, no sólo en armas (que se vuelven más potentes cuanto más las usemos) sino también en artilugios y trajes con los que resistir mejor las inclemencias espaciales y las acometidas de los enemigos.
Transcurridas unas ocho horas de juego veremos los títulos de crédito, momento en el que podremos optar por rejugar cada misión en busca de los múltiples bonus que pueblan el juego y que requerirán nuestra mayor pericia, o bien podemos dedicarnos a uno de los cuatro modos multijugador, que si bien no son la panacea del entretenimiento, al menos prolongarán en parte su vida jugable. Cuatro modos distintos (capturar la bandera, enfrentamiento individual y por equipos y el original Iron Lombax) para un máximo de cuatro jugadores y con opción infraestructura para que las paredes de tu cuarto no pongan límites a la diversión.
Conclusiones
Ratchet & Clank aparecen por vez primera en PSP con un título que, pese a ser un calco de las situaciones vividas en anteriores entregas de la saga, goza de un nivel altísimo, tanto en su acabado gráfico como por el entretenimiento que ofrece. Por fuerza mayor se convierte en el segundo título de plataformas-acción de la portátil de Sony, justo por detrás de un Daxter cuyo dominio parece incuestionable. Si Nintendo y su portátil pueden presumir de Mario, Wario, Kirby y compañía, PSP no se está quedando atrás dando satisfacciones a los aficionados de este género, que merced a los títulos mencionados deben estar más que satisfechos.
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