Enhorabuena, ha sido el ganador de la Lotería de los Trabajadores. Su premio: un puesto de trabajo en un checkpoint fronterizo con la vecina Kolechia procesando visados. La Madre Patria confía en ti y en tu criterio a la hora de cumplir las ordenes de entrada. ¡Viva la República Comunista de Arstotzka!.
La guerra con Kolechia terminó hace seis años, seis interminables años de bombas, masacre y exterminio. La guerra costó vidas, pero recuperamos la ciudad fronteriza de Grestin, mi nuevo hogar. La suerte y la de mi familia dependen de mi valor e integridad, de mi buen ojo a la hora de detectar a los espías, contrabandistas y terroristas que atentan contra nuestra Madre Patria.
Mi primer día en la frontera ha sido placentero, solo podíamos dejar entrar a los ciudadanos de Kolechia. Ha sido sencillo rechazar los pasaportes de los no nacionales, el Estado dice que hoy no pueden pasar y así debe ser. Tenemos que proteger a nuestro pueblo de los enemigos, muchos están ocultos entre los inmigrantes y debo estar atento. Me han premiado por detectar a dos mujeres con pasaportes caducados y un hombre que se hacía pasar por mujer. He ganado el sustento de la familia, hoy todos comeremos y estaremos calientes en el piso que El Partido nos alquila. ¡Viva Arstotzka!.
Hoy he llegado puntual y me he encontrado una circular del partido: abrimos la frontera a todos los países, pero debo ser concienzudo con la revisión de pasaportes. Ha sido todo muy fácil, hasta que alguien ha intentado entrar con un pasaporte falso: su foto no coincidía con la persona de la ventanilla. Menos mal que me di cuenta a tiempo, mi vida y la de mi familia dependen de mi pericia detectando falsificadores y enemigos del estado. A las 17:00 horas ha saltado la alarma, un hombre al que no deje pasar en el checkpoint ha saltado la valla y ha lanzado una granada contra nuestro ejercito. Lo han abatido a tiempo pero han muerto muchos compatriotas, mañana habrá represalias.
Solo puedo pensar en el atentado, la circular de hoy ha endurecido las normas. Ahora se necesita un visado diario junto al pasaporte. La imagen de la sangre y los nervios, me hacen tardar algo más de la cuenta revisando pasaportes y visados, incluso he tenido que discutir con un ciudadano que aseguraba ser un compatriota sin pasaporte. Le he dicho que era imposible que pasase sin la documentación, volverá mañana. Al revisar el pasaporte de un hombre no me di cuenta de que en sus papeles ponía que era mujer, me ha llegado una advertencia del órgano central, la próxima vez cobraré menos si me vuelvo a equivocar. Por suerte he vuelto a realizar una buena labor y de nuevo mi familia estará caliente y comerá, mañana será otro día.
Cuarto día, tenemos mucha gente con visados de trabajo, paso y estancia. Esto no es tan sencillo como parecia en un primer momento y no consigo atender a muchos ciudadanos y, con la confusión, dejo pasar a más de uno pensando que sus documentos están en regla. Las advertencias llegan una tras otra a mi teletipo, hoy no tendré paga por dejar pasar erróneamente a contrabandistas y ladrones. Mi miedo al error me lleva a fallar una y otra, mis nervios ponen en peligro mi trabajo y la integridad de mi país. Me he equivocado más de 10 veces y al salir de mi turno hay un coche de policía esperándome, me informan que mi familia ha sido expulsada de la casa que el estado, como buen padre de sus ciudadanos, nos había alquilado. A mi me llevan a la prisión por enemigo de la Patria, mis errores me han condenado, adiós. ¡Viva Arstotzka!.
Este es uno de los veinte finales que podemos encontrar. Papers, Please por su estilo retro ochentero, una profundidad moral que pocas veces había visto en un título y, sobre todo, por una rejugabilidad prácticamente eterna, se merece un lugar importante en los indie de 2013. No me puedo creer que este juego lo haya creado Lucas Papa el solo, tiene mucha calidad y es original como ningún otro. Lo podéis disfrutar en una beta abierta desde la web del autor o comprándolo en Steam.
Ahora te toca a ti, ciudadano de Arstotzka, demostrar que eres válido para el estado. [88]