Todos estamos locos de hype, escepticismo y desconfianza con los anuncios de las que yo llamo neo-consolas: Ouya , Gamestick , Piston y su madre en almíbar. Esto ha generado ríos de tinta y la redacción no ha sido menos, donde hay opiniones para todos los gustos: defensores a muerte del argumento que simplemente son PC’s hasta los que defienden que son verdaderas consolas…
Ya sea por concepto clásico o antigüedad, el término consola siempre se ha referido al sistema cerrado de una compañía en la cual las desarrolladoras o estudios hacen juegos para ese sistema cerrado o plataforma.
Sega rules the world
Con la nueva tanda de neo-consolas las reglas cambian, el sistema no está cerrado por lo que permiten la entrada de estudios emergentes, programadores free-lance y cualquiera con un poco de idea. Esto hace que la oferta sea increíble y el tener algo que solo enchufar y jugar con juegos que tienes en el móvil pueda permitir un crossplay futuro. Pero no corramos tanto.
No todas estas neo-consolas son iguales y hay que diferenciar:
Ouya y Piston son máquinas es si, mini pc’s, barebones o llamalo como quieras, pero tiene hardware propio para poder correr los juegos, supuestamente. Gamestick y Shield, por contra, no son más que evoluciones del antiguo Onlive donde los juegos corren por servidores o un PC propio.
Así pues, aclarado este punto, en este artículo hablamos de las que tengan hardware propio ya que plantean dudas en su definición de PC o consola.
Retomemos el tema del SO cerrado, al llevar un SO abierto aporta una nueva visión defendida por Roswell:
«Yo creo que la línea que separa ambos mundos cada vez será mas delgada, hasta que terminen por fusionarse. Si miramos que está pasando con ciertos proyectos, las consolas están adoptando sistemas operativos (android) mas típicos de un ordenador que de una consola.
Windows 8 es una aproximación hacia la fusión de el SO clásico a las nuevas propuestas como IOS/Android. Y no me extrañaría ver una evolución de W8 en la próxima Xbox, o que PS4 tenga una versión de Android…. al fin y al cabo, el hardware siempre será hardware y no es el que marca la diferencia entre consola y ordenador (por muy «modular» que sea el PC).»
Atrevido y argumentos no le faltan. El futuro de las consolas pasa por el online y la nube, adaptar el sistema para ello ya se ha empezado a hacer en esta generación, pero abrir el SO sería una jugada que daría muchas oportunidades al cross play entre neo-consola y Smartphone y tablets.
Tenemos la plataforma, ¿que hay de los juegos exclusivos o juegos propios? otro de los argumentos usados para definirlas como una u otra plataforma. El marquet actual de Android es insuficiente para lo que prometen estas plataformas híbridas, ya que como defiende Kristian:
«Yo no quiero jugar a juegos de móviles en mi tele. Y si quisiera, ya lo puedo hacer por streaming. Y tampoco quiero otro PC. Bueno, sí que lo quiero, pero sabré que es un PC y no una consola.»
Gran parte de razón tiene, ya que el market aún no ha previsto la entrada de estas consolas y no hay grandes juegos anunciados para ellas, simplemente lo que encuentres en el market: mini juegos o juegos relativamente cortos y de pasar 5 minutos, nada con cara y ojos como un Dishonored, Borderlands o algo que llame la atención.
Roswell, en el lado opuesto, contraataca con un argumento muy sólido:
«He visto juegos muy buenos e interesantes en android y en IOS (tengo ambas plataformas) y no he podido disfrutarlos por culpa del control táctil. Así que unas adaptaciones de esos títulos al control tradicional de pad, y encima jugándolos en la TV, por algo mas de 100€, a nivel personal me parece un acierto.»
Razón no le falta, ¿cuantos juegos en móvil no querríamos jugar en un pad y pantallote? pero tener un pad no hace una consola, ya que os recuerdo que hay pads para Androids e iPhones y no dejan de ser móviles.
Pero la cosa se complica cuando formulo la siguiente pregunta:
«¿Si sacaran un juego que fuera solo para Ouya no se convertiría en una consola?»
A partir de aquí las opiniones son dispares, la mayoría asiente que se convertirá en una consola y dejaría de ser un barebone camuflado, pero hay un reducto de usuarios que sigue pensando lo contrario.
La discusión está en la mesa: argumentos a favor, en contra, dispares, coloridos y alocados hay por doquier pero la pregunta es la misma: ¿Son consolas estos inventos con Android o no son más que espejismos tecnológicos?
