Con el lanzamiento de Medal of Honor se ha levantado una amplica polémica entre los círculos más hipócritas de la sociedad estadounidense y tanto es así que EA se ha visto obligado a eliminar la palabra «Talibán» del propio juego para que muchos comercios aceptaran ponerlo a la venta. Sinceramente, creo que estamos ya en unos tiempos en los que uno puede ponerse en el bando de «los buenos» y de «los malos» en un videojuego sin que nadie se sienta dolido. La polémica viene a resumirse en que está bien matar moros porque son malísimos, pero eso de que uno de ellos mate a un estadounidense, puf.
Pues incluso el mismísimo David Jaffe, cuyo mito – para mi- acaba de caerse en estos mismos instantes, le ha dedicado mucho amor al nuevo MoH en su Twitter, ya que en el multiplayer podamos jugar en el bando de los árabes:
He probado el multijugador de MOH y me hicieron reaparecer como un Taliban y simplemente no podía jugar. No dispararía. Quería un botón para rendirme […] ¿Por qué querría jugar como un Talibán y matar a soldados americanos? Yo simplemente no quiero hacerlo. ¿Soy por eso un maricón?
Más adelante le instan a compararlo con la famosa escena del aeropuerto de Modern Warfare 2:
Ni de cerca. Estaba impresionado por No ruso pero no me preocupaba casi nada el poder pasar la escena. Diablos, quería ver el tipo de animaciones que habían utilizado para las muertes en No ruso.
En fin, que si jugáis contra los yanquis online intentad coger el bando de las barras y estrellas si no queréis que la gente se vaya de la partida y os dejen con el culo pelado. Valientes bastardos. Seguro que no le importa un pimiento cargarse cientos de vietnamitas.