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Dead Rising, reanálisis




Toño ya dijo la suya en su análisis hace más de 2 años – cómo pasa el tiempo – pero yo hasta ayer por la noche no concluí Dead Rising. Bueno, lo de concluir quizá sea inadecuado, viendo lo que pasa tras su secuencia de créditos, pero lo dejaremos ahí para aquellos que todavía no se hayan pasado el que para Toño y para mi es, sin duda, uno de los mejores juegos exclusivos de Xbox 360.

Lo primero que llama la atención es lo bien que se conserva. Han pasado ya más de 2 años desde que fuera lanzado y se conserva, salvo matices, como el primer día. Gráficamente gusta y se gusta, salvo defectos muy puntuales, y cosas como la enorme interactividad con el escenario y los objetos que en él se encuentran tan sólo las he visto en los títulos de Bethesda (Oblivion, Fallout 3). Lástima que las armas se desgasten con el uso, en un intento, supongo, de los desarrolladores por no eliminar la sensación de indefensión en la que se supone que debe encontrarse el protagonista.

La historia, contada al más puro estilo de la serie 24, impone un ritmo contrareloj que nos obligará a priorizar nuestros esfuerzos. Rápidamente nos daremos cuenta que no podemos salvar a todo el mundo, y que bastante haremos con conseguir escapar con vida del supermercado. Continuamente nos estaremos preguntando si realmente hace falta que nos arriesguemos para salvar a nuestros conciudadanos en vez de asegurar nuestro trasero y seguir centrados en el hilo principal, que, dicho sea de paso, haberlo haylo.

Mención aparte a los Psicópatas, como se han bautizado a los jefes final de Misión, y que, curiosamente, ninguno de ellos es zombie. Son, en todos los casos, personas encerradas en el centro comercial que, debido al ataque zombie, han sacado lo peor de ellos mismos. Su presencia, implementación y personalidad es de lo mejorcito que he visto nunca, recordando al espíritu de juegos como Punch Out o los de MGS (como apuntó MAXPOWER).

Dead Rising es una aventura imprescindible que ningún poseedor de Xbox 360, mayor de 18 años, eso sí, debería perderse si le gusta la acción, las películas de zombies o, simplemente, los juegos geniales. Porque Dead Rising es genial y, por méritos propios, debería ser considerado como un clásico de nuestro tiempo.

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