Icono del sitio Akihabara Blues

Eat Lead: El Retorno de Matt Hazard – Análisis PS3

Si lees el nombre de este juego lo primero que piensas es, ¿quién es Matt Hazard? ¿Una suerte de personaje de acción que siempre estuvo a la sombra del Duke? ¿Un Freddy Hardest anglosajón? ¿Y dices que vuelve? ¿De dónde? El caso es que el retorno es totalmente ficticio, puesto que el que hoy analizamos es el primer juego protagonizado por Matt, un personaje inspirado en la fisonomía de Bruce Willis y motivado por el cine de acción de los 80 y por los videojuegos clásicos. Una parodia de los últimos 25 años de la industria del videojuego.

La mecánica de Eat Lead es sencilla: coger elementos de aquí y allá, rodearlos de tópicos de los que mofarse y para adelante. Se empieza con un sencillo tutorial, que los diseñadores afirman que les han obligado a incluir, en el que aprendemos lo básico. Y lo básico es disparar a todo lo que se mueva y tomar cobertura. Y aunque en teoría querían copiar la depurada técnica de Gears of War, se ha quedado un poquito más cerca de la de Wanted. Y no hay sinceramente mucho más que hacer que esconderse, disparar y cuando hay oportunidad, golpear cuerpo a cuerpo. Y en eso se resume todo el juego: entras a una habitación y hasta que no te cargas a todos los enemigos que aparecen no puedes progresar. No hay mapa, ni objetos que utilizar, ni puzzles, ni siquiera variedad en las tácticas de combate. Esconderte, disparar, avanzar. Hasta que llegas a los final bosses arquetípicos (recordad que es un título que pretende hacer del humor su seña de identidad) en los que tendremos que utilizar QTE o alguna otra treta dependiendo del caso.


El diseño de los niveles es absolutamente lineal y salvo algún chiste que se salva, alguna mofa de juegos como Duke Nukem o Mario Bros o la aparición de algunos enemigos originales (los realizados con sprites son lo máximo), la acción es bastante predecible y con un comportamiento por parte de la IA más que pobre. Entonces piensas, ¿lo han hecho así para reírse de los juegos en los que los enemigos asoman la cabeza cada tres segundos o ha sido porque no saben hacerlo mejor? Poco importan las divagaciones, el resultado es tan mediocre que termina por darte lo mismo. El “retorno” de Matt no engancha.

Si tenemos en cuenta que no hay opciones multijugador de ningún tipo, que técnicamente no pasa de lo correcto en el plano de animaciones, diseño de escenarios, calidad artística y efectismo gráfico, lo único que podemos salvar es su doblaje al castellano, la música de acción, algunos chistes facilones de los que propone (pocos, eso sí) y que la recopilación de trofeos es la más sencilla que he visto en cualquier juego de PS3 (incluyendo Bronze Trophies por pausar el juego, ver los créditos completos o por empezar a jugar). Matt Hazard, en caso de haber existido con anterioridad, no habría estado muy contento…

Videoanálisis de GameTrailers

Web oficial | Matt Hazard

Salir de la versión móvil