La Edge UK de este mes viene con una portada cuanto menos controvertida: una caja negra que simula un PC de última generación y el título ¿La máquina de juegos definitiva? Como se plantea desde la editorial de este prestigiosa revista inglesa, el PC podría ser la máquina que compañías como Nintendo, Microsoft, Sony o Sega, en el pasado, han estado buscando infructuosamente. El quid de la cuestión se encuentra, según Edge, en el hecho de que todo el mundo juega o ha jugado con su PC, aunque sea al Buscaminas, que los mejores juegos de la historia han salido para compatibles y que la experiencia de juego de PC es única. Además, se refuerza en la confianza que compañías como Valve o Bioware tienen en este soporte.
Yo personalmente disiento. La afirmación de que los mejores juegos de la Historia están en PC exige, como mínimo, la matización de «Algunos». No sé si la mayoría, pero, emuladores aparte, los que únicamente juegan con su ordenador se pierden series como Zelda, Super Mario, Dragon Quest o Gran Turismo. Aunque otras como Final Fantasy o Halo han encontrado rápidamente el camino de convertirse en multiplataformas.
Y luego está el escabroso tema de los Requerimientos Mínimos, una expresión que, por fortuna, le suena a chino a casi todos los usuarios de consolas. Todo el mundo tendrá un PC, pero no todo el mundo, más bien una minoría si tenemos en cuenta el parque total de compatibles, cuentan con una máquina capaz de ejecutar con garantías y potencia suficiente el último Half-Life. El ciclo de vida, entendido como el espacio de tiempo durante el cuál el sistema podrá ejecutar los juegos más exigentes que vayan saliendo a la venta, de una aceleradora gráfica y de la configuración de un PC en general es relativamente corta, alrededor, creo, de 6-8 meses. En cambio, en una consola tal y como viene de fábrica podrás jugar con todos los juegos que durante los 5 años, más o menos, en los que la máquina esté en el mercado salgan a la venta. El coste de actualizar un compatible, así, entra en escena cada medio año, y no es precisamente pequeño, por lo que sale más a cuenta el tener una consola que un compatible como máquina de ocio electrónico. Aunque ya tengamos un PC para otros menesteres.
La supremacía de los compatibles en el terreno de los videojuegos ya es cosa del pasado. Las razones, opino, por la cuales los PCs aventajaban a las consolas en el terreno de los videojuegos eran el juego online y su mayor potencia. Cuando salió Quake para PC, con su modo multijugador online y sus gráficos potenciados por las tarjetas más avanzadas del momento, las diferencias eran más evidentes que nunca. Ambos aspectos han quedado igualados, o por lo menos son más parejos, sobre todo si tomamos como referencia a la nueva Xbox. Y es que, echando un vistazo a una 360 ejecutando Gears of War, ¿Quién echa en falta un compatible con una aceleradora de última generación? Más bien ahora es al revés: los amantes de los compatibles se mueren de ganas de que el juego de Epic haga sus pinitos en los ordenadores…