Gracias a 2K Games, ayer asistimos a la presentación de Duke Nuke Forever, en un ambiente lleno de nostalgia, cachondeo, babes y mucho Duke.
La sala mega vip de la discoteca Otto Zutz fue el marco elegido para la vuelta del Duke y es que, a pesar de los 14 años pasados desde su último juego real, el Duke sigue siendo el Duke.
El inicio de la presentación estuvo marcado por Randy Pitchford, presidente de Gearbox, podéis recordarlo de los anuncios de Duke, que se encargo de hacer un poco de historia sobre estos 14 años de trabajo: los inicios, los problemas de 3DRealms y la vuelta gracias a 2k Games. Nos adelantó informaciones como la duración de la campaña principal: 15h (15 años de trabajo = 15 horas de campaña, chiste del propio Randy), la historia detrás de Duke, que lo usaron de modelo para varios personajes muertos o que el juego está plagado de detalles obscenos, soeces y blasfemos.
Después del conmovedor y cachondo discurso, llegó a marcarse un chiste comparando la Sagrada Familia con el proceso de creación del Duke, pudimos ver parte del gameplay de la versión final, ya que todo el proceso de lanzamiento está casi terminado, y poco después pasamos a disfrutar de las babes y de la demo, que a pesar de los gráficos que tiene, que ya nos han confirmado que la versión final del juego mejora dichos gráficos.
En este nuevo título se ha optado por un estilo clásico de disparos y exploración, junto con nuevas fases de conducción y un poco de plataformas. El juego vendrá sin censura alguna, por lo que veremos tetas, sangre y mas tetas. Este nuevo titulo «empezará justo en el punto donde lo dejamos en Duke Nukem 3D» y es la continuación real de la estela del Duke.
No podemos enseñaros gran cosa, puesto que no pudimos hacer fotos, a excepción que fueran generales y sabemos que no es gráficamente el mejor juego de esta generación, pero que @#$%&, no nos importa, todos, en realidad, no queremos jugar a un shooter, queremos jugar al Duke Nukem.
Desde aquí agradecer a 2k Games y a Randy por hacernos pasar una velada mágica recordando la gloria del Duke.