Rocambolesca historia, a la par que estúpida, la que nos llega desde el otro lado del mundo, más concretamente desde la ciudad de Auckland, en Nueva Zelanda, en la que los Product Manager de Ubisoft decidieron promocionar el lanzamiento de SC: Conviction vistiendo a un actor de Sam Fisher y dejandolo suelto en la calle con una pistola de plástico apuntando a los viandantes. Tal cual. ¿Qué ocurrió exactamente? Pues que a eso de las ocho de la tarde del pasado viernes el doble de Sam Fisher se acercó a la terraza de un bar en el que alrededor de 20 personas se encontraban tomando carajillos y piñas coladas. A su visión, uno de los testigos gritó «lleva un arma», con lo que la gente comenzó a chillar y a esconderse bajo las mesas mientras el Sam Fisher de palo se paseaba apuntándolos con la pistola de goma y «las manos vendadas» (sic.)
A los pocos minutos apareció un policía, que por suerte no era yanqui y por ende no tenía el gatillo fácil, quien dedujo que debía de tratarse de una broma, a la que puso fin bajo una severa advertencia y un «sesienten, coño». La gente de marketing de Ubisoft se ha arrepentido y ha declarado que «se les fue de las manos» y que nunca debieron «introducir una pistola» en la campaña. Ahora solo queda, amigos míos, rezar para que alguien haya grabado el momento en vídeo. Partida de ojal asegurada.
Celebrando que habían resuelto el caso
Fuente |NZH