El maravilloso Ismael Álvarez, crack del pincel y amante de los videojuegos, ha rescatado a Lara de la tragedia en la que se ve envuelta en el último Tomb Raider y la ha retratado como se merece, en la plenitud de su belleza. Y es que por mucha sangre que tenga en la cara, Miss Croft siempre será una Diva.