[GC 13] Impresiones con el nuevo mando de Playstation 4

Durante la Gamescom de Colonia hemos estado muy pendientes de lo que comentabais por Twitter con el hastag #AKBCG13. Algunas de las preguntas más importantes, venían referidas a nuestras sensaciones con los mandos. Empezamos por el nuevo control de Playstation 4.

La primera ocasión que tuvimos en la feria de ponerle las manos encima al nuevo control de Playstation 4, el Dualshock 4, fue tras la presentación de Skylanders Swap Forces, gracias a los chicos de Activision. Nos llevamos una grata sorpresa al ver que nos invitaban a probar el juego y teníamos dos plataformas a nuestra elección: WiiU y Playstation 4. Sin desmerecer en absoluto al genial mando de WiiU, nos decidimos por el nuevo sistema de control de Sony.

La primera sensación, el primer feedback que sentimos cuando tenemos el mando entre las manos, es que la distancia entre los extremos ha aumentado un par de centímetros con respecto al mando de Playstation 3. Ahora nuestras manos están más separadas entre si. Se hace muy extraño al principio, sobre todo si estáis acostumbrados al estilo de mando pequeño que Sony siempre ha usado en sus consolas. En apenas un par de minutos, tu cerebro ya no percibe esa distancia mayor entre pulgares y puedes disfrutar del Dualshock 4 como siempre.

«La primera sensación es un aumento de distancia entre pulgares al que nos acostumbramos en un par de minutos».

Esa distancia mayor entre pulgares, se debe a la inclusión de un sensor táctil en el centro del mando. Con Skylanders Swap Forces no tenía ningún uso, pero en la presentación de Warframe (título exclusivo de Playstation 4) el sensor táctil servía para realizar uno de los ataques especiales del personaje que manejábamos. Con un gesto del pulgar de abajo hacia arriba, nuestro alter ego ninja espacial lanzaba un escudo de energía para protegerse. Todo de manera casi instantánea y sin retardo. Este sensor puede ser muy útil para realizar gestos que sirvan, por ejemplo, para cortar o para movernos entre menús de un inventario o de la propia consola. Para usarlo como control de un RTS me pareció demasiado pequeño. Debajo del panel táctil se ha colocado un altavoz por el que podemos recibir ordenes personalizadas en los juegos, como ya tiene el mando de Wii, por ejemplo.

«No sabemos si estaban incluidas las baterías, pero el mando era totalmente ligero, incluso de más, a pesar de que es más grande que el de Playstation 3».

Mucha gente ama el mando de Sony por lo pequeño que resulta entre las manos. Ese aspecto minimalista en la construcción trasera ha pasado a mejor vida en Dualshock 4. Ahora el mando ha ganado en tamaño trasero, se ha mejorado el sistema de sujeción y se han ampliado las agarraderas. Es mucho más cómodo y lo vamos a agradecer, sobre todo los que estamos acostumbrados a mandos más grandes como el de Xbox 360.

Dentro de los rediseños especiales hay que mencionar los nuevos gatillos del mando. Por fin Sony se ha dado cuenta de que el mejor método de uso en juegos de conducción o en shooter en general, es usar los gatillos superiores. Para mi era una aberración el uso de los analógicos para acelerar y frenar como en GT5. El principal problema en los shooters sigue presente, que es la disposición de los analógicos, pero los nuevos gatillos invitan a ser usados en lugar de los botones L1 y R1 que no me transmitían nada en shooter por ejemplo. Todo es mejor con gatillos.

«Tras muchos años con el mismo control, Sony se ha dado cuenta que necesitaba hacer una pequeña revolución dentro del mundo Playstation».

Se ha cambiado la superficie de los sticks analógicos y se ha dado más precisión a la cruceta digital del mando, que por mi parte ya era una de las virtudes de los anteriores Dualshock. El control de los sticks analógicos es más fácil para los pulgares, con una superficie que se hunde un poco para que el dedo casi se introduzca, y en ningún momento tenemos la sensación de que se pueda resbalar del dedo como pasaba en el Dualshock 3. Otro punto positivo, sin ninguna duda, los ingenieros que se han encargado del control han escuchado el feedback de los usuarios (menos el cambio de posición de los analógicos) y profesionales de la industria. Playstation 4 necesitaba un cambio en este sentido, con un control que se había quedado anticuado en muchos aspectos.

No tuvimos la ocasión de probar el sensor o el giroscopio que lleva el mando, junto a la luz que sirve para identificar al jugador y posicionar el control junto a la cámara. Nos os podemos informar sobre este punto ya que no se nos ofreció ninguna demostración con estas funciones. Tampoco probamos las funciones de los dos nuevos botones: Share y Options, pero están en una zona de fácil acceso para los pulgares.

Sobre el peso no puedo daros una estimación, los mandos estaban conectados por cable USB a la unidad de desarrollo, por lo que desconozco el peso con las baterías o si las llevaba incluidas. Si las baterías estaban dentro del mando, tiene un peso muy parecido e incluso inferior al del actual mando de Playstation 3.

«Sony ha colocado su nuevo control casi a la par del nuevo mando de Xbox One, salvo pequeñas diferencias, como la colocación de los sticks analógicos».

Voy a concluir estas primeras impresiones del nuevo mando de Playstation 4. Probamos dos juegos con el nuevo control, Skylanders y Warframe, en ambos las sensaciones fueron muy positivas y sin duda han mejorado los puntos negativos que le encontrábamos al mando de Playstation 3. Mejores gatillos, un mando un poco más grande, mejor sujeción trasera para manos grandes, la zona táctil, el altavoz y el cambio de superficie en los sticks. Muchos cambios para conseguir que el mando de la nueva consola de Sony se le considere un elemento nuevo del conjunto.

Ahora puedo entender por que la compañía dio una conferencia de presentación especial solo para el nuevo Dualshock, Sony tiene que educar a la gente en el nuevo mando, son muchos cambios de manera brusca que tendrán muchos detractores de inicio, pero por mi parte han hecho las rectificaciones y modificaciones necesarias, salvo que los analógicos siguen en un lugar que resulta incómodo e injugable en algunos géneros.