Juan Aguacate se vuelve a poner la máscara, esta vez para defender al mexiverso de su inevitable final en Guacamelee 2. Una mezcla interesante de plataformas, exploración y humor, donde Drinkbox Studios demuestra su madurez, entregando un título bastante disfrutable y entretenido.
Es hora de retomar
En Guacamelee 2 comenzamos donde terminamos la primera entrega. Juan se enfrenta nuevamente a Calaca, como una manera de traer a la memoria lo ocurrido en ese primer juego. Desde ese momento vemos como el humor vuelve a ser parte del título, ya que el enfrentamiento es muy sencillo y el mismo juego te lo muestra, entregando un trofeo con el lema “lo recordaba más difícil”.
Una vez superado este sencillo escollo, vemos a Juan disfrutando del retiro junto a su familia. De repente, unos cuadros negros comienzan a aparecer en la ciudad y el héroe es reclutado de nuevo para salvar, no solo a su ciudad, sino el mexiverso entero de un enemigo bastante poderoso.
Conociendo el lugar
Después de esto comenzamos en forma a conocer estos cambios que afectan el universo del título, viajando a través de portales que nos llevan a mundos que incluso hacen referencia a otros títulos como Limbo o el bonus del carro de Street Fighter II. De igual manera vamos conociendo las mecánicas de juego las cuales son bastante sencillas, pero que con el paso del tiempo se van complicando un poco, especialmente al momento de realizar combos y cambiar del mundo de los vivos a los muertos y viceversa.
Durante estos primeros compases del juego se comienzan a notar esas mejoras gráficas implementadas por el equipo de desarrollo. Sombras, reflejos en el agua, animaciones y demás detalles, comienzan a demostrar la madurez del estudio y que el título no es más de lo mismo.
A pesar de tener muchos elementos estilo metroidvaina, Guacamelee 2 es en su mayoría un juego de plataformas y eso lo podemos notar en las primeras instancias de juego, en las cuales se nos otorgan varias habilidades que nos permiten acceder a sitios del mapa rápidamente, sin necesidad de estar en ese proceso de exploración tan común del género.
Un poco desbalanceado
Esa combinación entre plataformas y metroidvania es lo que siempre me ha llamado la atención de esta serie, pero debo admitir que por momentos el titulo es muy lineal y te entrega todo muy pronto, especialmente las habilidades. Llega un punto del juego donde las tienes casi todas y aun falta mucho para terminar.
Eso sí, las secciones de plataformas, especialmente las relacionadas con la llave de los pollos illuminati, son geniales. Allí es donde Guacamelee 2 brilla y te pone en situaciones interesantes, retadoras e incluso frustrantes, pero son de esos casos donde uno sabe que el reto se puede superar y se intenta las veces que sea necesario para lograrlo.
Lucha, lucha, lucha
Otro elemento interesante del título es su referencia a la lucha libre. Juan presenta gran variedad de movidas que le permiten acabar con los enemigos, incluso gran cantidad de ellos al tiempo, y que gracias a los diferentes entrenadores puede ir mejorando, ya sea en su condición humana o de pollo.
De esta manera Guacamelee 2 nos invita a estar siempre ensayando diferentes movidas, técnicas y combinaciones si es que queremos acceder a las mejoras que los entrenadores nos ofrecen y así poder aumentar nuestra fuerza de cara al enfrentamiento al final con Salvador.
El humor como complemento
Puede sonar extraño, pero si algo tiene de bueno este juego es su humor. Las conversaciones con los personajes, muchas situaciones con los enemigos e incluso muchos escenarios muestran la irreverencia del título, que por momentos incluso ni siquiera se toma en serio.
Un sector lleno de memes, una secta de pollos, la receta del aguacate perfecto para Salvador y demás elementos forman parte de un título que es bastante adictivo y entretenido. Aparte de esto también hace homenaje a muchos juegos como Silent Hill o Zelda. Por momento me sentía como el Capitán América diciendo “oigan, entendí esa referencia”.
Conclusión
Siempre en las secuelas se busca evolución y no más de lo mismo. Guacamelee 2 nos da eso. Un juego que ha mejorado en cuanto a mecánicas y gráficas, que conserva gran parte de ese humor y también la dificultad principalmente en las secciones de plataformas, que son mayoría.
Las únicas quejas que tengo son las relacionadas a lo lineal que puede llegar a ser, desaprovechando ese elemento de exploración que entregan los metroidvania y también la historia, que es bastante plana en su desarrollo. Aunque debo decir que varios personajes son divertidos y carismáticos.
Al final este nuevo juego de Drinkbox cumple sobremanera con su objetivo, siendo bastante entretenido y mejorando en varios aspectos a su antecesor. Es de esos títulos que no se encuentran en el radar de los más populares, pero que recomiendo a todos lo que quieran pasar un buen rato. [85]