Ya tenemos vía libre para hablaros de todos los modos multijugador de Kane & Lynch 2: Dog days. Para empezar, el sorprendente estilo técnico y la genial habilidad «Derribado pero no muerto» que caracterizan a esta entrega se mantienen aquí; sin embargo, no controlamos a ninguno de los protagonistas, sino a un puñado de mercenarios y ladrones. Los modos disponibles son 4: Arcade (off-line), Alianza frágil, Poli infiltrado, y Policías y ladrones.
El arcade actúa a modo de super tutorial, que nos permite familiarizarnos con los controles y la dinámica de los combates. Debemos escapar de la policía tras dar el golpe, pero a cada ronda el asedio será más fuerte y violento, lo que nos reportará mayor beneficio si conseguimos huir.
Alianza frágil es el modo básico online. Es parecido al arcade, pero al jugar contra otros humanos, el sistema de traición se vuelve componente fundamental. Si uno de nuestros compañeros es un estorbo, o lleva poco dinero, alguien (o varios) pueden decidir eliminarlo. Pero al hacerlo, se convertirán en traidores, y sus colegas se llevaran una recompensa adicional si se encargan de ellos.
También seremos unos Judas si cogemos a otro criminal como escudo humano, pero en este caso nuestros verdugos deben tener cuidado, ya que si aciertan a la víctima, pasarán a ser como nosotros. La condición de traidor se indica con una tarjeta amarilla, que también obtendremos aunque el disparo al amigo haya sido inintencionado. Sin embargo, el que ha recibido el ataque tiene la oportunidad de devolvérnosla sin que sea considerado un desertor. En este modo, al morir como ladrón reaparecemos como policía, lo que nos dará la oportunidad de vengarnos de nuestro asesino.
En Poli infiltrado, como su nombre indica, uno de los jugadores es un espía de la policía, que debe intentar detener a los malhechores sin delatarse. Como policía encubierto no nos convertiremos en traidores al matar a un ladrón, pero hemos de esperar a que se cometa el golpe para tener una razón justificada al ser hombres de ley. El resto de policías saben quién es el infiltrado, pero hay que fingir para no descubrirnos; lo que no me quedó claro es que si disparamos a un agente, este nos devolverá el fuego. En este modo no hay respawn, por lo que tras una vida seremos historia.
Por ultimo, Policías y ladrones ofrece un modo contraoperativo clásico, con un bando de policías enfrentándose a otro de criminales en igualdad de condiciones. Las características comunes a todos los modos son por ejemplo la duración, ya que tendremos 4 minutos para dar el golpe y largarnos. Nuestro objetivo no será siempre dinero, a veces nos haremos con información muy preciada.
Eso ocurre en el mapa en que jugamos en todos los modos en la presentación, que está basado en una historia real, ocurrida en alguna parte de Asia si la memoria no me falla: un grupo de criminales preparó y ejecutó un importante golpe, pero a la salida les esperaba un clan rival que se había enterado del movimiento, y los eliminó, llevándose la «gloria» estos últimos. Cada mapa cuenta con una historia y un desarrollo de la misma diferente. En función de nuestra experiencia, recibiremos una puntuación y un rango de criminal, como experto, o psicópata. Con el dinero conseguido podremos ampliar nuestro arsenal, algo útil teniendo en cuenta que las armas iniciales no son precisamente las más adecuadas para nuestro trabajo.
Yo no soy muy dado al multijugador on-line, quizás porque las experiencias que he conocido hasta ahora son bastante monótonas. Sin embargo, en estas partidas me lo pasé pipa, como muchos de los compañeros: los gritos con ordenes e improperios varios fueron constantes durante los enfrentamientos, lo que creo que determina el nivel de diversión que un titulo enfocado al multijugador ofrece. Así que seguramente retome con fuerza el juego en red con RDR y este K&L2. Espero poder jugar contra vosotros a partir del 27 de agosto, fecha en que estará disponible en las tiendas.