Hubo una época en la que los juegos de plataformas eran los reyes del tinglado. Con unas mecánicas sencillas eran capaces de encadilarnos y divertirnos durante horas y horas. Hasta que llegaron los Shooters, que proliferan a sus anchas en las consolas de actual generación. Pero Kellogg’s está para remediarlo y para ello ha presentado su propio juego, Rise of the Choco Krispies.
Kellogg’s nos sorprende
Según el comunicado de prensa, la multinacional de los cereales no podía esperar al día de la presentación de Switch – 13 de enero – para revelar su incursión a la industria del videojuego en forma de plataformas exclusivo para la nueva de Nintendo. Se ha lanzado un teaser trailer para que veamos más o menos cómo luce y prometen revelar un trailer más completo para enero. Por lo que hemos podido ver corre bajo Unreal Engine 4, lo que le permite tener unos gráficos de lujo, con todo tipo de detalles e iluminaciones preciosas. Además, goza de amplias localizaciones que se prestan a ser exploradas e invertir decenas de horas en ellas. Ríete tú de Dragon Quest XI.
En lo que respecta a la historia nos veremos envueltos en un conflicto de naciones entre el Reino de los Dulces – hogar de nuestros héroes – y el Imperio de la Sal. Este último está poblado por gamers furiosos que rompen mandos tras perder partidas al Smash o al Overwatch. Los dos territorios viven en paz y harmonía hasta que un día el Emperador Salty XVIII decide que quiere dominar el mundo entero. Así podría eliminar todo rastro de dulzura en el mundo. Nada de parejas felices en los parques, qué asco. Obviamente, el villano de la historia consigue hacerse con todo lo que se encuentra a su paso.
Una pequeña muestra de lo que vendrá
En esta tesitura, nuestros héroes se enteran de la situación tras verlo en las noticias mientras toman un buen tazón de sus cereales preferidos. Así pues, se embarcan en lo que será la mayor aventura que jamás han vivido. Equipados con cucharas espada como arma, deberán enfrentarse a mil adversidades con el objetivo de encontrar los 6 tazones de oro que devolverán la estabilidad al mundo. El Santuario del Ragequit, las Marismas de la leche chocolateada o el Oasis de los gritos en Teamspeak serán algunos de los niveles que nos ofrecerán horas y horas de desafíos.
Podremos controlar a distintos personajes conocidísimos de nuestros desayunos azucarados preferidos. Desde el tigre de los Frosties hasta la rana de Smacks, pasando por personajes del mundo anglosajón como el tucán de los Froot Loops – ¿cómo pueden llegar a ser populares unos cereales de frutas? Cada uno tendrá poderes especiales que nos permitirán acceder a diferentes zonas, inaccesibles por otros. Por ejemplo, con la abeja de los Miel Pops podemos colarnos en zonas elevadas y con el oso de los Chocos podremos levantar hasta la piedra más pesada. Las mecánicas, como habréis supuesto, guardan un gran parecido a las de clásicos como Spyro the Dragon o Jak and Daxter, con decenas de objetos coleccionables y misiones secundarias que harán las delicias de los jugadores de todos los rangos de edad, desde los más pequeños de la casa hasta los padres.
Un candidato a GOTY 2017
Según declaraciones del productor del juego, Poppington Gonzales, nos encontramos ante algo muy diferente. «Nunca nadie ha visto nada parecido en el mundo de los videojuegos. Creemos que el género de las plataformas necesitaba un cambio radical y aquí estamos para aportar nuestro grano de arena. Mario nos ha dado miles de horas de diversión pero es que ya chochea un poco«. Polémicas declaraciones, sin duda. ¿Nos encontramos ante un nuevo rey del Hype? ¿O realmente la nueva IP de Kellogg’s dará un golpe sobre la mesa? Sólo podemos esperar.
Yo la verdad es que estoy en éxtasis por la noticia. Si antes no podía esperar para saber más sobre Breath of the Wild y demás franquicias de Nintendo ahora aún menos. El sueño de mi infancia se ha vuelto realidad. ¡Chocapiiiiiiiiiic! Ah no, que eso era de los Chocapics, de Nestlé. Que por cierto, aún no han hecho declaraciones al respecto. Ya los veo contratando programadores cagando leches.
Sólo queda decir una cosa: el desayuno está servido.