Si habéis sido de los ansiosos compradores compulsivos que como un servidor os habéis tirado de cabeza a por Heavy Rain os habréis dado cuenta de unos cuantos detalles que te hacen cuestionarte sobre la planificación de SCEE a la hora de publicar un juego y sobre las condiciones en las que se realizan los testeos de un título que ha estado en desarrollo más de cuatro años.
En primer lugar debemos fijarnos en la caja. En el recuadro en el que aparecen la capacidad de disco duro requerida para jugar se lee 18 MB. Nada más falso que la realidad, puesto que el juego necesita una instalación obligatoria cercana a los 3 GB para funcionar. En segundo lugar, y antes incluso de la instalación, es necesario descargar el primer parche del juego que ocupa algo más de 200 MB. Algo falla si antes de que se ponga un juego a la venta ya hay un parche que sirve, supuestamente, para solventar problemas.
Pero las cosas no se quedan ahí. Si habéis sido de los afortunados compradores de una edición coleccionista y acudisteis raudos y veloces a utilizar el código en ella incluido para descargar un tema dinámico, un capítulo descargable y la banda sonora del juego os habréis encontrado con que resulta imposible descargar la banda sonora. Sony España ha explicado en su blog que los hayan hecho o vayan a hacerlo antes del 4 de marzo se encontrarán con la imposibilidad de descargar la BSO y, por si fuera poco, no podrán hacerlo cuando ésta esté disponible, sino que tendrán que ponerse en contacto con el servicio de atención al cliente para que les den una solución.
Y por último, que no menos grave, podemos constatar que las «escasas unidades» que presentan problemas de parones, cuelgues y fallos varios durante el juego son más de las que parece a simple vista. Y un servidor con firmware actualizado y sin fallos previos en el funcionamiento de su PS3 levanta la mano tras sufrir un par de cuelgues en las dos primeras horas de juego. ¿Dónde están los controles de calidad? ¿Cuándo se solucionarán los problemas que afectan al juego?
Zasca, zasca, zasca…¡NO! ¡No te cuelgues ahora! ¡NOOOOO!