A pesar de que Kristian habló muy bien de XCOM Enemy Unknown en su análisis de la versión de PS3, conseguí resistirme porque la estrategia no es uno de mis géneros favoritos. Pero por suerte, en mi último cumpleaños, recibí un paquete con matasellos de Inglaterra con el juego para PC. El remitente era un buen amigo que vive ahí arriba y al que le agradezco enormemente que me regalara el juego.
Ahora he tenido ocasión de jugar a la versión de iOS (que he probado en un iPhone 5 y en un iPad 4). Se trata de una maravilla de port para dispositivos portátiles. Como indiqué en el párrafo anterior, ya tenemos un análisis publicado de la versión de consolas con el que estoy bastante de acuerdo, así que no entraré a describir con demasiado detalle las mecánicas de juego.
XCOM: Enemy Unknown es un juego de estrategia que se divide en dos partes claramente diferenciadas. Por un lado estás las misiones en las que manejamos por turnos a un pequeño grupo de soldados para cumplir una serie de objetivos, que pueden ir desde eliminar a todos los alienígenas de la pantalla hasta capturar uno vivo o rescatar algún rehén. La otra parte del juego se sitúa en el cuartel general, donde tomaremos las decisiones más importantes y que de verdad afectarán a nuestro progreso en el juego.
El juego comienza con una importante decisión, en qué continente colocar nuestra base de operaciones. Cada continente nos dará una serie de beneficios distintos, así que no hay que tomar la decisión a la ligera. En nuestra primera partida sólo podremos elegir entre América y Europa (después habrá más opciones), siendo más recomendable elegir el viejo continente. En esta base pasaremos gran parte de nuestro tiempo. Es un bonito y espectacular menú en 3D en el que podremos ver todas las estancias que la forman y añadir nuevas para ampliarla.
Aquí tendremos que tomar multitud de decisiones: decidir qué tecnologías investigar en cada momento y qué estancias construir y dónde colocarlas (pues su posición puede influir en su rendimiento y el de las contiguas y tienen un coste de mantenimiento mensual), gestionar a nuestros soldados (armamento y equipo que van a llevar, habilidades que deben aprender al subir de nivel…), atacar a naves enemigas con el uso de interceptores que pueden ser mejorados (el ataque es automático, pero podemos influir en él durante su desarrollo mediante comandos), revisar el pánico de los países a causa de la invasión (si no los ayudamos pueden retirarnos su apoyo con la consecuente merma de recursos), seleccionar las misiones a realizar (habrá varias disponibles a la vez, pero sólo podremos hacer una de ellas cada vez), etc.
Es posible desplegar una red de satélites por todo el planeta. Para poder construir un satélite es necesario dinero. Para poder lanzarlo hace falta un nexo de satélite, que es una habitación en nuestra base que es capaz de gestionar varios de ellos. Debemos indicar a qué países enviar esos satélites. Al desplegarlos obtenemos bonificaciones. Aunque pueda parecer caro, cubrir todo el planeta de satélites lo antes posible (sin descuidar el resto de gastos) puede ayudarnos enormemente a la larga. Tanto hacer una misión como lanzar un satélite en un país reduce su nivel de pánico.
Las misiones se realizan por turnos. Primero manejamos a nuestros soldados y cuando terminamos le toca mover ficha al enemigo. Salvo que ya tengamos a los soldados cubiertos y luchando contra los enemigos, la primera acción la utilizaremos habitualmente para desplazarnos, a ser posible a una cobertura y la segunda (y última) para atacar, defendernos o realizar un segundo desplazamiento para llegar más lejos entre otras posibilidades (también es posible realizar un desplazamiento doble, en el que el personaje corre en lugar de trotar, gastando de una vez las dos acciones disponibles para ese personaje).
En estos combates los personajes pueden subir de nivel para obtener nuevas habilidades. Al principio llevaremos a 4 soldados, pero a medida que avancemos podremos utilizar a un total de 6 en cada misión. Tendremos muchos a elegir, pero si eliminan a uno de ellos en una batalla, lo perderemos para siempre, así que es importante intentar mantenerlos con vida y ver si merece la pena sacrificarlos para la consecución de la misión. No es lo mismo jugar con un soldado entrenado que con su sustituto novato.
En el paso a dispositivos móviles si han perdido unas cuantas cosas. La primera que notamos es la ausencia de multijugador, porque no aparece en el menú. He leído que van a añadirlo de forma gratuita en una futura actualización, pero no puedo confirmarlo. De todas, en lo personal, no es algo que me preocupe, puesto que ni siquiera he probado ese modo en PC, prefiero jugar la campaña de un jugador. Sería agradable que lo incluyeran como han comentado, pero si finalmente no lo hicieran, en un juego para dispositivos móviles, no creo que fuera un problema.
El apartado gráfico, como es lógico, también es inferior al del resto de versiones, pero aún así se ve increíblemente bien. Todo tiene un nivel de detalle altísimo para un móvil. Me esperaba que el bajón fuera más pronunciado, pero me he llevado una agradable sorpresa. Lo que sí se ha perdido es el doblaje al castellano, el audio sólo está disponible en inglés. Todos los textos están traducido a nuestro idioma y los diálogos llevan subtítulos, así que no vamos a perdernos nada. Estos cambios eran de esperar tanto por rendimiento unos, como por tamaño de la aplicación los otros (el juego ocupa 3,2 GB instalado).
Siendo un juego de estrategia, que se maneja como la mayoría del género con point & click, el paso a los controles táctiles es bastante natural. El control de la cámara es lo único de este apartado con el que no he quedado del todo conforme. Los gestos para rotarla y cambiar el zoom no acaban de funcionar todo lo bien que me gustaría. En la parte inferior izquierda de la pantalla hay botones para realizar las mismas acciones, pero después de unas cuantas partidas uno se acostumbra al control táctil. De todas formas, no estaría de más que refinaran este apartado en la próxima actualización.
Podremos guardar la partida en cualquier momento, tanto en local como en iCloud. Además, el juego realiza guardados automáticos después de cada turno en los combates, por lo que no será problema dejugar una partida a medias. Algo que en PC o consola no es tan importante, en un móvil se vuelve crítico, porque lo más habitual es jugar partidas cortas. Por tanto, la situación está bien resuelta… si es que conseguimos dejar de jugar, porque el juego engancha como pocos.
Los desarrolladores dicen que funciona en varios dispositivos (está la lista en la página del juego en iTunes), pero recomiendan jugarlo en el iPad 4 para una mejor experiencia. Yo lo he probado tanto en móvil como en tableta y aunque se juega perfectamente en ambos, lo ideal es hacer caso a los chicos de 2K Games.
Con una campaña de un jugador prácticamente idéntica a la de PC y consolas, éste es sin duda uno de los mejores juegos disponibles para los dispositivos de Apple. No es barato, cuesta 18€, que es algo a lo que los clientes de la manzana no están acostumbrados, pero viendo el resultado final del producto puedo asegurar que el precio no es disparatado ni mucho menos. Es un juego perfecto para estas fechas en las que nos vamos de vacaciones y nos los podemos llevar con nosotros para los ratos libres. [90]