Que alguien le compre el Manhunt… **gasp**
Un juez de California se ha atrevido a desacreditar a Terminator el Gobernador del Estado bloqueando la Ley que impedía a los menores de edad acceder a los videojuegos calificados como violentos, con un argumento tan contundente como que no está demostrado más allá de duda razonable que jugar a ese tipo de videojuegos provoque una conducta violenta en el mundo real. Por lo tanto, prohibir el acceso a los menores de edad se considera un ataque a la Libertad de Expresión. Mr. Schwarzenegger ya ha asegurado que recurrirá la sentencia. No esperábamos menos de alguien que desayuna Comunistas Rebeldes al Ajillo.
Foto de cabecera | El mundo de los gatos
Si yo fuera el gato de la foto estaría más acojonao que el director de la fábrica de Larios ante una visita sorpresa de Massiel. A la niña le falta un trinchador en la otra mano, que cara de zampabollos tiene la colega xDDDDDDD.
Esto siempre es igual en USA, con su doble moral y su concepto de «políticamente correcto». Más aún con Arnie como gobernador del estado más rico del país y encima republicano (el brazo más extremista de la política yanki). Mientras saquen el juego aquí…
Son cosas q no se entienden….
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Por un lado hace películas en las que mata a todo el que se cruza en su camino, y por otro está todo el día tocando las narices con lo que es y no es correcto. ¿Cual es su criterio?¿Acaso cree que los niños no verán sus películas y en cambio si jugarán a videojuegos violentos? Yo creo que allí, igual que en nuestro «grande y libre» país, los niños pueden acceder de igual manera a las dos cosas (incluso con más facilidad a las películas, que las ponen en la tele a cualquier hora).
– No, no, que los niños no juegen al Manhunt que se vuelven locos, pero padres, ponedles la peli de Commando y la de Depredador, que apenas salen sangre y cadáveres.
Arnie: ¡¡Madrrre del amorrr herrrmoso!!! No sse puedde dejarrrr a unos tierrrnos infannetess que aprrendan a hasserrr esas maldadesss (respondiendo a un periodista sin mirarle y firmando tranquilamente una sentencia de muerte para un preso de su estado… Lo dicho, doble moral)