En Cracked han publicado un curioso artículo en el que nos relatan las «virtudes y excelencias» de ocho periféricos, adelantados a su tiempo, que fracasaron estrepitosamente. Entre ellos, la Virtusphere, el cacharro que te da descargas eléctricas, la chaqueta masajeadora, la Dream Machine (cuyas connotaciones ginecológicas y/o sadomasoquistas son notorias) y mi favorito, que podéis ver en el vídeo, el Poyastick o Joydick, que interpreta tu ritmo masturbatorio. Si estáis interesados en haceros con uno, os diré que venía en pack con un juego hentai llamado Cross Days.