Buenas noticias para los amantes de Megaman. La novena entrega acaba de aparecer para los tres servicios de distribución digital de consolas. Su principal característica reside en su diseño pixel art y en su concepción como si hubiera sido diseñado para nuestra Nintendo Entertainment System. En esta versión del Live Arcade no hay nada que nos permita diferenciar si estamos haciendo funcionar una máquina de última generación o hemos puesto a funcionar un emulador: únicamente los 200 puntos para el gamerscore reagrupados en 12 complicadísimos logros hacen ver que estamos ante un título actual.
La peculiar concepción de Megaman 9 nos ofrece un juego con aspecto de NES pero concebido en el 2008 y con la posibilidad de verlo en la tele de 40 pulgadas. Scroll horizontal, enormes sprites, cargas entre pantallas (no niveles, una pantalla es lo que cabe simultáneamente en la pantalla o un poquito más), gama de colores mínima, sonidos biperizados y auténtica jugabilidad 8 bits. Es decir, difícil hasta decir basta. Es obligado memorizar por dónde sale cada enemigo, qué movimientos hace o qué disparos lanza y buscar una ubicación en el decorado, tomando como referencia los clásicos elementos en segundo plano, donde poder golpear sin ser golpeado.
Cabe preguntarse qué sentido tiene a finales de 2008 el realizar un juego nuevo como si se hubiera desarrollado para una máquina de hace 20 años. Hay otros títulos, conversiones, que han recibido un lavado de cara, mínimo en algunos casos como el de Asteroids Deluxe, y bastante extenso en otros como PacMan Championship Edition. Pero diseñarlo tal como si fuera un título del año 85… No dudo que pueda tener su encanto artístico y los amantes de lo retro en general y de Megaman en particular tendrán más que suficientes motivos de alegría. El resto nos conformamos con pasar a su lado y mirarlo con sorpresa, pero sin excesivo entusiasmo. Y eso de tener que adquirir aparte armas y niveles de dificultad… es rizar el rizo de la distribución digital.
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