Este jueves 15 de abril será el último día que los usuarios de la primera Xbox podrán jugar al online de sus juegos. Microsoft cierra el grifo también sin ninguna compensación si juegas a estos títulos desde Xbox 360 o si se tratan de Xbox originals comprados desde esta plataforma.
A mi no me afecta, no tuve la primera Xbox y no juego a sus juegos online en 360, pero todo esto me hace meditar. Extrapolando esta non grata noticia al «mundo del comercio virtual» llego a la siguiente conclusión.
Por cosas como estas estoy total y absolutamente en contra de las descargas digitales. Obviamente también por el exagerado precio con el que las empresas hacen su agosto saltándose intermediarios y cobrando prácticamente lo mismo. Pero sobretodo porque no hay nada tan seguro y que nos de tantas opciones como el formato físico sin estar a expensas del antojo o problemas de las compañías. Por mucho que “te permitan” descargarte un juego tantas veces como quieras una vez que te lo compras, las empresas vienen y van, y sus servicios igual, sin embargo un juego está en nuestra estantería el tiempo que queramos, permite mantener el muy necesario mercado de segundamano y por supuesto mantener «lo retro» dentro de 20 años en su mejor esencia.
Descarga tantos juegos como quieras, paga todo lo que quieras por ellos, por trajes de sackboys, por servicios virtuales o juego online, pero sé consciente que cada vez que hacemos eso estamos más cerca de un futuro muy incierto y del que todos seremos responsables.
No te excuses con que no hay solución ante este panorama cuando hay opciones, un buen comienzo para parar esto sería no comprar juegos en formato digital (obligar a las compañías a sacarlos en formato físico), no pagar hasta por demos o por códigos que desbloquean dlcs que ya tienes en el juego por el que ya has pagado previamente, no comprar trajecitos para los personajes de Street Fighter 4 cuando ya en Street fighter 2 los podías elegir seleccionando al personaje con otro botón, elije servicios de juego online gratuitos y por supuesto ten en cuenta una cosa: si “la ocasión hace al ladrón” y este mundillo “virtual” ofrece un nuevo mundo de nuevas posibilidades y ocasiones que se pueden aprovechar para bien o para mal, ¿hacia donde crees que lo dirigen las compañías? y ¿hacia donde lo quieres dirigir tú?.