Nunca fui bueno para las despedidas

Cuando llegué hace ya casi tres años a AKB nunca pude imaginar que iba a estar en esta casa tanto tiempo, que iba a hacer tantos amigos, que iba a vivir momentos muy especiales y que lo iba a pasar tan bien.

Pero, tras todo este tiempo, hoy tengo un montón de sensaciones de lo más raras. Me siento como un niño que abandona su hogar para crecer, labrarse una vida, para soñar y para comenzar un camino lleno de posibilidades y si me siento así es que dejo AKB, la que ha sido mi casa durante tanto tiempo, para fichar por el equipo de MeriStation.

Estoy francamente ilusionado con mi nueva aventura en Meri y me muero de ganas de aportar mi granito de arena y de aprender junto a los grandes profesionales que me rodearán en mi nueva casa, pero quiero que sepáis que nunca os voy a olvidar, que AKB ha sido muy pero que muy especial para mí, que gracias a este “chiringuito” he aprendido mucho, he conocido a gente que puedo considerar casi mi familia y he pasado horas y horas conociéndoos a muchos de vosotros, queridos lectores, debatiendo y compartiendo con todos mi punto de vista sobre algunos juegos, mis Akiba News, mis gameplays, mis primeros streamings…

No quiero alargarme más, nunca fui bueno para las despedidas, pero voy a acabar diciéndoos a todos GRACIAS, de corazón. A vosotros, lectores, por apoyarme entrando día a día en AKB, siendo fieles incluso en los peores momentos y aportando siempre vuestro punto de vista hacia mi trabajo en esta casa.

Y, por supuesto, GRACIAS a todo el equipo, sobre todo a Kristian que me abrió la puerta cuando no había escrito ni una línea en otros medios de videojuegos, a Humpr3y que me ayudó y me enseñó muchas cosas en mis primeros meses aquí, a Ray (nuestro querido CM), a Norrit (aka El Buitre), a Roswell (nuestro gran artista), a Juantxi (un jodido maestro), a Jentrena (te dejo el PC amigo mío), a Iván (¿Con quién voy a discutir ahora sobre Nintendo?), a Tibu (mi heredero espiritual)… y al resto de los que habéis escrito alguna vez aquí, tengo una memoria fatal para los nombres y es imposible que me acuerde de todos vosotros.

Muchas gracias una vez más a todos y sayonara, AKB.