Desde 2008, Sony, una de las marcas japonesas más reconocidas y líder mundial en electrónica de consumo, está en números rojos. Llegaron los tiempos de profundas reformas que llevaron a miles de despidos, cierre de sedes, alguna tan importante como la de Nueva York, venta de edificios y hasta a deshacerse de divisiones como la que contenía la emblemática marca Vaio a fondos de inversión.
Sony y sus pérdidas
Las cifras no mejoraron hasta 2012, donde la multinacional obtuvo beneficios de casi 300 millones de euros tras los 3.500 de pérdidas del ejercicio anterior. Lamentablemente el coste de reestructuraciones fue más alto de lo previsto (solo salir del negocio de los ordenadores supuso perder 350 millones de euros) volviendo en 2013 los números negativos, en esta ocasión casi 1.000 millones de euros. Hasta los negocios de móviles y televisiones, marcas como Xperia y Bravia, perdieron importancia para Sony por sus malos resultados, pasando a un segundo plano.
Y se lanzó PS4 y la consola arrasó. De las números negros se pasó a las ganancias de más de 1.000 millones con el negocio de las videoconsolas a la cabeza del milagro junto el del cine, la música digital y la fabricación de sensores de cámaras digitales. Esto es lo único que da dinero y todo lo demás es prescindible. Como en otros tiempos, Sony sigue con estrategias de dudosa moralidad hacia el consumidor, como vender a precio por encima de mercado porque simplemente se lo puede permitir, al igual que otras marcas que se han ganado el favor de millones de seguidores. Pero una cosa es satisfacer al fiel parroquiano y otra cosa muy diferente es rendir cuentas ante dios.
Una empresa debe dar beneficios, y perder tanto dinero durante tanto tiempo es insostenible. Hay que seguir la senda del alza, toca ir sobre seguro y eso es lo que los accionistas, que ya han demostrado mucha paciencia, desean. Unos para recuperar lo perdido en acciones que llegaron a bajar a valores de los años 80 y los nuevos que se han aprovechado de la debilidad de la compañía japonesa haciéndose con parte de ella, para ganar con sus inversiones.
PS4 Pro, ¿Un caballo ganador?
Las ventas de PS4 han sido muy altas pero siempre ocurre lo mismo: no se pueden mantener eternamente. Aún es muy pronto para lanzar una nueva consola que rompa con la anterior pero siempre se está a tiempo de lanzar nuevos modelos. Sería suficiente un modelo Slim para revitalizar ventas pero las exigencias hoy son mayores que nunca y cuando en otro tiempo Sony ignoró las tendencias de mercados o entró tarde en algunos, quizás hoy mira y copia a otras compañías y negocios. Un nuevo modelo más barato no sólo aporta ventas, también más gastos de fabricación y sobre todo menos beneficios. Surge PS4 Pro, un nuevo modelo que prácticamente ofrece algo similar que otro de la competencia 100€ más barato, justificando su existencia y precio a base de cierto batiburrillo de números de teraflops y mejoras visuales para todos.
Tanto en detractores como defensores del nuevo modelo, el deseo más o menos manifiesto es el mismo: que no estiren demasiado la gallina de los huevos de oro del hardware sin aportar al usuario realmente nada más allá de promesas, confusión, gastos y decepciones. Puede que sacar varios modelos de una misma generación de iPhone le funcione a Apple, pero también puede que sea un caso tan especial y único como el hecho que en su mismo sector un fabricante de móviles de la talla de Samsung hayan tenido que replantearse sacar varios modelos diferentes de un mismo terminal, o Huawei, cada día más cerca de las dos anteriores, haya reducido el número de terminales que lanza anualmente.
PS4 Pro es solo el principio
¿Sabíais que Damian Thong, especialista en bienes de consumo y analista del fondo de inversiones y servicios financieros mundial, Macquarie Group Limited, predijo la salida de PS4 Slim y PS4 Pro y además prevé una PS5 en la segunda mitad de 2018? Sea como fuere, ¿estás preparado para comprar PS4 Pro, un televisor 4K de 50 pulgadas como mínimo y quizás una PS5 dentro de no más de 2 años? Parece que Sony sí, a eso y mucho más cuando PSVR está a la vuelta de la esquina y hasta surgen rumores de parches de pago de videojuegos con las nuevas funciones Pro. ¿Será este el futuro del juego que daba título al reciente PlayStation Meeting?