Aunque Out of The Box saldrá a lo largo de este 2017, hemos podido probarla a través de su demo en Steam. Teníamos ganas por saber de Nuclear Tales, desde Randall’s Monday y no nos ha dejado indiferente.
Cuando entramos en Out of The Box conocemos a un protagonista que vuelve de la cárcel después de haber tenido un problema encubriendo a Harry, su jefe. Éste parece llevar todo el cotarro chungo del Estado y le da un trabajo como portero de discoteca a nuestro protagonista.
A partir de aquí, se establece una mecánica muy Papers, Please, el juego que nos dejó pasmados hace unas temporadas y que hablaba de la burocracia de Artzoska. En este caso, estamos llevando la cola de la discoteca “The Box”, por la que debemos estar atentos a los transeúntes que van acumulándose. En nuestra mano estará decirles que entren o salgan de nuestra vista.
También se añaden otras situaciones como controlar la documentación, para ver si son menores, si son VIPs, o si llevan carnets falsos, así como actuar como moderador si se produce alguna pelea en el exterior de la discoteca. Ahí tendremos dos opciones: o dialogar o pelear. Normalmente actuaremos con la segunda, dado que incluso, a veces, nos encontremos con más de un borracho liándola afuera.
Para hacer todo más fácil, tendremos una libreta donde encontraremos los nombres de los VIPs, así como las opciones de juego, las normas y donde podremos obtener algún que otro soborno. Tendremos que ser cautos con las situaciones donde tengamos que decidir si hacer o no caso al tipo que tenemos en frente.
Me ha gustado un par de guiños. Como el diálogo del “Caranchoa” que me ha hecho soltar alguna carcajada o el nombre de “Víctor Sullivan” en uno de los carnets haciendo mención a uno de los personajes más famosos de Uncharted.
Estaremos deseando de probar la versión completa cuando salga a lo largo del año. Randall’s Monday ya dejó un buen gusto con esa mezcla de buscar piezas de un gran puzzle alrededor de mil referencias culturales. Out of The Box parece ir por el buen camino, y nos deja con ganas de más.