Dispuesto a buscarle utilidades inútiles al iPad (recordad que en la primera edición vimos como conseguía correr W95) este domingo tenemos una nueva idea: usarlo como indicador de tráfico para ciclistas. Es decir, como un intermitente pero a lo bestia. Y si os digo la verdad cuando voy conduciendo muchas veces pienso que en los coches tendría que haber herramientas que nos permitieran una mejor comunicación entre conductores. Algo así como una pantalla en la parte trasera que reproduzca los mensajes que emitimos con nuestra boca mediante un dispositivo de reconocimiento de voz. Así los «joputa vaya pirula me has hecho» o los «anda macho, que has tardado diez minutos en darte cuenta de que te quería adelantar» no caerían en saco roto. Esto es parecido, tiene mucho curro y no creo que el iPad resista el primer chechuhazunderrape pero como concepto está bien.