Aunque se había visto algún tráiler y algún vídeo corto, aún no habíamos podido contemplar en toda su gloria el juego Bayonetta, desarrollado por ese super-estudio de galácticos llamado Platinum Games y que está formado por la gente de Clover (Okami) y otros Capcom como Shinji Mikami, papá de los Resident, o Hideki Kamiya, papá de los Devil May Cry.
Y a este último hace una referencia constante Bayonetta. Se podría decir que es un clon de los DMC, cambiando a Dante por una bruja de turgentes senos y gafapasta que reparte más piños en el aire que una azafata de Iberia. Ya en serio, las similitudes son enormes, tanto en mecánica del juego como en las arquitecturas de los escenarios, diseño de entornos y enemigos. No nos quejaremos en voz muy alta, que los beat’ em up de calidad no es que abunden en estos tiempos de shooters y los que nos consideramos hijos de Haggard nos morimos por tener cuántos más, mejor.